BLOQUE 5. La crisis del Antiguo Régimen (1788-1833): Liberalismo frente a Absolutismo
5.3. El reinado de Fernando VII: liberalismo frente a absolutismo. El proceso de independencia de las colonias americanas.
Fernando VII permaneció preso en Valençay durante la Guerra de la Independencia hasta que en 1813 Napoleón le devolvió el trono de España con el Tratado de Valençay.
Con el Manifiesto de los Persas de 1814 se apoyaba a Fernando VII para volver al absolutismo y restablecer unas Cortes como las del Antiguo Régimen y comienza el Sexenio Absolutista (1814-1820). En mayo de 1814 se firma el Decreto de Valencia tras un golpe de Estado que declara nula la Constitución de Cádiz. Los liberales eran perseguidos y se organizaban en sociedades secretas que recurren a sublevaciones militares para hacerse con el poder.
Triunfó el pronunciamiento de Rafael del Riego en Cabezas de San Juan en 1820 y obligó a Fernando VII a jurar la Constitución de 1812. Así comienza el Trienio Liberal (1820-1823), durante el cual las Cortes y el rey compartían los poderes. Sin embargo, Fernando VII impedía la labor de las Cortes debido al veto suspensivo. En este periodo los liberales se dividen en moderados que gobernaron hasta el 1822 y que defienden la participación del rey en la labor legislativa, y los progresistas o exaltados que gobernaron en 1823 y que dicen que el rey solo tenga el poder ejecutivo. Ambos grupos intentan desarrollar la Constitución de Cádiz y querían abolir definitivamente el Antiguo Régimen. Suprimieron los mayorazgos y se abolió el régimen señorial, se redujo el diezmo y se definieron las bases de una desamortización eclesiástica, se abolió la Inquisición y se redactó un Código Penal.
Sin embargo, los absolutistas querían restablecer el Antiguo Régimen y protagonizaron la sublevación de la Guardia Real en 1822, varias guerrillas en Navarra y Cataluña y crearon la Regencia de Urgel, pero fue disuelta por los liberales. Fernando VII buscó apoyo en las potencias absolutistas europeas y en 1823 entró en España un ejército francés dirigido por el duque de Angulema llamado los Cien Mil Hijos de San Luis, y libera a Fernando VII que había sido llevado a Andalucía como rehén, y restaura el absolutismo, comenzando la Década Ominosa (1823-1833).
Durante esta etapa se abolieron las medidas liberales, excepto la supresión de la Inquisición que fue sustituida por Juntas de Fe. Los absolutistas se dividieron en reformistas dirigidos por López Ballesteros que aceptan ciertas reformas para evitar revoluciones liberales y crean la Bolsa y el Banco de San Fernando, y en apostólicos que son más radicales y estaban dirigidos por Carlos María Isidro, hermano menor de Fernando VII que quería sucederle en el trono, estaban financiados por la Iglesia y protagonizaron la revuelta de los Agraviados. Sin embargo, Fernando VII firmó la Pragmática Sanción que abole la Ley Sálica y permite reinar a las mujeres, pero don Carlos no lo aceptó. Así surgió el carlismo, movimiento defensor del absolutismo radical y de los derechos sucesorios de Carlos. Cuando Fernando VII muere en 1833 su hija Isabel tiene tres años, por lo que no puede gobernar y su reinado comienza con regencias.
El proceso de independencia de las colonias americanas
Durante el reinado de Fernando VII se produce la emancipación de las colonias americanas, cuyas causas son el descontento con la política de control económico y político de los Borbones, el trato discriminatorio de los criollos que estaban desplazados de los cargos públicos, así como la marginación de los campesinos, el pensamiento ilustrado y la influencia de la independencia de EE.UU. La primera fase de la emancipación de las colonias (1808-1814) se produce durante la Guerra de la Independencia de España, cuando se forman Juntas que se declararon autónomas y no aceptaban a José I. En 1810 se independizaron Paraguay y, a nivel teórico, Caracas y Buenos Aires.
La segunda fase (1814-1824) se inicia cuando Fernando VII regresa al trono y como no toleraba la autonomía de las colonias envió un ejército, pero avivó las ansias de independencia. Argentina se independizó en 1816, Chile en 1817 por José San Martín, y Colombia, Venezuela, Panamá y Ecuador con Simón Bolívar tras las victorias en Bocayá en 1819 y en Carabobo en 1821. En este año se logra la independencia de México gracias al movimiento de los curas Hidalgo y Morelos, que tiene carácter social, y al Plan de Iguala del general Itúrbide. Perú y Bolivia conseguirán la independencia en 1824 tras la Batalla de Ayacucho, y al mismo tiempo se independiza América Central, excepto Cuba y Puerto Rico. España también conserva las Filipinas.
Para España la pérdida de las colonias supone la pérdida del importante comercio exterior. América quedó dividida en quince repúblicas pese a los movimientos unitarios, dirigidas por caudillos criollos, de forma que la población india queda marginada.