El Reinado de Isabel II: Consolidación y Crisis del Estado Liberal

El Reinado de Isabel II

2.1. La Subida al Trono de Isabel II

Isabel II juró la Constitución de 1837 e inició su reinado. Su madre, el padre Claret y Sor Patrocinio influyeron en su gobierno. En 1846, se vio obligada a casarse con su primo Francisco de Asís.

2.2. Construcción y Consolidación del Estado Liberal

/En el reinado de Isabel II se consolida el Estado Liberal. Etapas de su reinado:/1. Década moderada (1844 – 1854): el gobierno es moderado y está dirigido por Narváez. Logros de estos años:/-1844:se crea la Guardia Civil. /1845: Ley de Ayuntamientos y reorganización de las Diputaciones Provinciales./1845: Reforma del sistema fiscal. Los impuestos se clasificaron en directos e indirectos./1846: Ley electoral (se mantiene el sufragio censitario)./se creó el Tribunal Supremo y se aprobaron los Códigos Civil y Penal./1851: se firma el Concordato con la Santa Sede/se reforma la Universidad/1845: se hace una Constitución moderada, reaccionaria y conservadora. Entró en vigor en 1869, y sus características fueron: soberanía compartida entre Corona y Cortes, confesionalidad católica del Estado, ampliación del poder del rey sobre el senado y el Congreso. Además el rey podía disolver el congreso, con la obligación de convocarlo en un plazo máximo de 3 meses y se amplia el poder de la Corona sobre el resto de instituciones. Para completar a la Constitución se aprobaron varias leyes. En esta época se autorizaron las primeras construcciones de ferrocarriles, se aprueba una ley para la bolsa y se hace una reforma bancaria./El matrimonio de la reina provocó una crisis, y en 1851 Narváez es sustituido por Bravo Murillo, pero dimite en 1852 tras intentar reformar la Constitución. Tras una crisis de varios años, comienza el bienio progresista con Espartero./2. Bienio Progresista (1854 – 1856)/Tras el fracaso de la Vicalvarada de O’Donnell, Cánovas del Castillo redactó el 7 de julio de 1854 el Manifiesto de Manzanares, donde pedía un estricto cumplimiento de la Constitución, la autonomía de los municipios, reducir los impuestos, restablecer la milicia nacional y una nueva ley electoral y de imprenta. El éxito hizo que la reina nombrara presidente del gobierno a Espartero, que a su vez nombró ministro de guerra a O’Donnell. Logros de este bienio:/1856: Constitución non nata./1855: Desamortización de Madoz./1855: ley general de ferrocarriles/1856: Ley de sociedades bancarias y crediticias./Ley de Trabajo (no llegó a aprobarse porque no gustó a nadie)./A principios de 1856 estallan motines por todo el país y al final Espartero dimitió. El nuevo presidente del gobierno fue O’Donnell, que empezó con una dura represión sobre los motines/3. Gobierno de moderados y Unión Liberal (1856 – 1863)/Narváez estuvo en el gobierno hasta 1858, pero ese año se le pide a la Unión Liberal de O’Donnell que forme un nuevo gobierno. Este gobierno duró 5 años y consiguió unir a moderados y liberales. Entre sus objetivos estuvo el de revitalizar la importancia española en el mundo, y por eso se hicieron expediciones a Indochina, México y Marruecos, donde el objetivo era proteger Ceuta y Melilla y que terminó con la ampliación de Ceuta y la incorporación de Sidi Ifni./El gobierno de O’Donnell coincide con una etapa de prosperidad económica, pero en 1863 fue destituido y empezó la crisis final del periodo isabelino./4. Crisis del gobierno isabelino y su final/Después de O’Donnell se vuelve al moderantismo con Narváez otra vez. En esta época hay una crisis económica que empieza con la disminución de las inversiones extranjeras y la caída de los precios. Se para la construcción de los ferrocarriles también, como resultado del déficit de las empresas ferroviarias. La falta de algodón por la guerra de secesión de EEUU provocó la caída de la producción textil catalana. El resultado fue la pérdida de capacidad adquisitiva y el hundimiento del mercado./A esto se suma un descontento político generalizado, cuyos ejemplos fueron los sucesos de la noche de San Daniel (matanza en el ámbito universitario) y la sublevación de los sargentos del Cuartel de San Gil (duramente reprimida por el gobierno)./La represión provocó numerosas protestas por todo el país. En 1866, demócratas y progresistas firmaron el Pacto de Ostende comprometiéndose a derrocar a Isabel II y formar una asamblea constituyente elegida por sufragio universal para decidir la forma de gobierno del país. La Revolución de la Gloriosa de 1868 (la batalla final fue la del Puente de Alcolea, y después Isabel II huyó a Francia) puso fin al reinado de Isabel II y dio comienzo al Sexenio Revolucionario, una etapa muy convulsa en la historia de España.

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