España, 1868. Se inicia un pronunciamiento popular. De los creadores de la caída de Isabel II y de los guionistas de la Constitución de 1869, llega un proceso de democratización de la vida política, una auténtica revolución popular: el Sexenio Democrático (1868-1874).
La Revolución de 1868: El Fin del Reinado de Isabel II
Todo comienza con la Revolución Francesa de 1848, pero España llega 20 años más tarde. Las causas de la revolución del 68 son dos:
- Crisis económica múltiple: Bursátil (caída de las acciones del Banco de España), industrial (crisis de la industria textil catalana por la subida de los precios del algodón) y agrícola (se dobla el precio del trigo).
- Crisis política de la monarquía de Isabel II: Conflictos entre O’Donnell y Narváez entre 1863 y 1868.
En 1866, el Partido Progresista y el Demócrata se fusionan para destronar a Isabel II. Tras la muerte de O’Donnell, su partido (Unión Liberal) también se fusiona. En 1867, en Ostende, se firma un pacto. Los unionistas de Serrano aportaban la fuerza militar, los demócratas la doctrina del krausismo alemán, y los progresistas, aunque no veían esencial derrocar a Isabel II, se unieron liderados por Prim y Sagasta para acabar con los moderados.
Las almas de la Gloriosa: Prim, Serrano y Topete. Prim y Serrano se reúnen en Cádiz el 17 de septiembre de 1868. Prim subleva Almería, Málaga y Cartagena. En el puente de Alcolea, el gobierno cae. Isabel II huye a París y acaba su reinado.
Además de la revolución progresista, existía la revolución radical (demócratas + republicanos), más cercana al pueblo, pero quedó eclipsada por los seguidores de Topete. En octubre de 1868, unionistas y progresistas se fusionan para gobernar, con Prim como Ministro de Guerra. Decretan las siguientes leyes:
- Disolución de la Milicia Nacional.
- Libertad de prensa, reunión y asociación.
- Sufragio universal.
- Expulsión de los jesuitas.
Las Cortes Constituyentes y la Constitución de 1869
Tras la separación de Serrano y Prim, se celebran elecciones a Cortes Constituyentes. Votan 4 millones de españoles. Ganan los progresistas (Prim y Sagasta) y se alían con demócratas monárquicos y unionistas. Quedan tres minorías: el Partido Republicano Federal, los isabelinos y los carlistas.
Este nuevo parlamento elabora la Constitución de 1869, la más liberal del siglo XIX en España. Incluía:
- Amplísima declaración de derechos.
- Monarquía como forma de estado.
- Sistema bicameral.
- Soberanía nacional.
- Independencia del poder judicial.
- Libertad de culto religioso.
- Voto de censura de las cámaras al gobierno.
- Sufragio universal masculino.
La Búsqueda de un Rey y el Reinado de Amadeo de Saboya
Serrano se autoproclamó regente mientras Prim buscaba un rey. Laureano Figuerola, Ministro de Hacienda, creó la peseta, el Arancel Figuerola de 1869 y la Ley Figuerola del suelo.
Prim consigue que Amadeo de Saboya, hijo de Víctor Manuel II, rey de Italia, sea coronado rey. Tres días antes de su llegada, Prim es asesinado.
Amadeo I se enfrenta a:
- Oposición de los moderados.
- Resurgimiento del carlismo.
- Oposición republicana.
- Oposición de los ricos hacendados de Cuba y Puerto Rico.
- Oposición del clero (su padre sitió el Vaticano).
- Inestabilidad política por la ruptura de la coalición gubernamental.
Amadeo I (1871-1873) solo pudo abolir la esclavitud en Cuba, regular el trabajo infantil y crear jurados mixtos en las empresas. Abdica ante las complicaciones.
La Primera República Española (1873-1874)
La misma noche de la abdicación de Amadeo I, el Congreso y el Senado proclaman la Primera República Española, reconocida solo por Estados Unidos y Suiza. Fue una estrategia para ganar tiempo y buscar un nuevo rey, impulsada también por la aparición del Partido Republicano Federal, dividido entre legales (Pi y Margall) e intransigentes (Orense).
Fases de la Primera República:
- Estanislao Figueras (febrero-junio 1873): Republicano unitario. Se enfrenta a revueltas en Andalucía y Cataluña, y a las milicias federales. Se convocan elecciones en mayo, que gana el Partido Republicano Federal.
- Pi y Margall (junio-julio 1873): Elabora un proyecto de Constitución, similar a la de 1869, pero con la división de España en 15 estados federales. Decreta nueva legislación laboral para proteger a los niños. Durante la República, rige la Constitución de 1869. El carlismo y el cantonalismo (cantones que no reconocían el poder de Madrid) acaban con su gobierno. Los cantones más importantes fueron Alcoy, Granada y Cartagena, que declara la guerra a Madrid. Pi y Margall dimite.
- Nicolás Salmerón (julio-septiembre 1873): Republicano unitario. Acaba con todos los cantones menos Cartagena. Dimite al negarse a firmar penas de muerte contra líderes cantonales.
- Emilio Castelar (septiembre 1873-enero 1874): Unitario. Suspende las Cortes y acaba con el cantonalismo. Reabre las Cortes, que querían un gobierno de centroizquierda. Castelar se niega y da un golpe de estado (golpe de Pavía). Dimite sin resistencia.
El Retorno de la Monarquía
Tras el fracaso de la República, se establece una república presidencialista presidida por Serrano. El Partido Alfonsino cobra fuerza. El 1 de diciembre de 1874, se publica el Manifiesto de Sandhurst (Cánovas del Castillo), firmado por Alfonso XII. El 29 de diciembre de 1874, Martínez Campos da un golpe militar en Sagunto. Alfonso XII es proclamado rey, acabando con la República.