El Siglo de las Luces en España

La Ilustración y su Llegada a España

El siglo XVIII fue el Siglo de las Luces, un movimiento cultural que buscaba dejar atrás la mentalidad metafísica del Barroco y abrazar un nuevo espíritu fundamentado en el empirismo y el racionalismo. La llegada de la Ilustración a España fue un proceso complejo debido al control de las autoridades, que temían que las ideas ilustradas amenazaran el orden establecido. A pesar de esto, algunas ciudades portuarias, con su prosperidad económica y actividad comercial, acogieron los planteamientos del enciclopedismo. La difusión de las nuevas ideas recayó en las Sociedades Económicas de Amigos del País, donde se discutían las ideas de los principales ilustrados, se asistía a representaciones teatrales, se analizaban las reformas políticas y se promovían iniciativas para mejorar el desarrollo económico y educativo.

Los Ilustrados Españoles

Entre los precursores de la Ilustración en España encontramos figuras como José del Campillo y el Marqués de la Ensenada, quien ejerció diversos cargos políticos con Fernando VI. Uno de los máximos exponentes fue Fray Benito Jerónimo Feijoo, defensor de la libertad de pensamiento.

El Despotismo Ilustrado y las Reformas Borbónicas

Carlos III y el Motín de Esquilache

Carlos III, primogénito de Felipe V e Isabel de Farnesio, ascendió al trono español tras ser rey de Nápoles y la muerte de su hermano Fernando VI. Su política reformista de inspiración ilustrada, emprendida junto a políticos italianos, provocó la oposición de parte de la aristocracia y el descontento popular. El Motín de Esquilache, que estalló en Madrid y se extendió a otras ciudades, fue una muestra de este rechazo. Las causas de la revuelta fueron complejas, incluyendo la desconfianza de la nobleza y la Iglesia ante las reformas, la escasez y el alto precio de los alimentos, y el rechazo a los ministros italianos. El detonante fue un conjunto de medidas de saneamiento y orden público tomadas por Esquilache. La gravedad de las revueltas obligó a Carlos III a destituir a Esquilache y decretar el abaratamiento de algunos alimentos básicos.

Medidas Reformadoras

Tras las revueltas, Carlos III se rodeó de ministros españoles y continuó con su programa de reformas que afectó a diversos ámbitos:

• Educación: Se fomentó la instrucción pública como medio para garantizar la prosperidad económica del país a partir del desarrollo del pensamiento científico y la investigación.
• Agricultura: Se implementaron medidas de liberalización del precio del grano y se redujeron los privilegios de la Mesta para mejorar el sector.
• Industria: Se recortaron los privilegios de los gremios, se fundaron reales fábricas y se establecieron aranceles para proteger la producción interna.
• Comercio: Se fomentó la libre circulación de mercancías mediante la supresión de las aduanas interiores y la progresiva liberalización del comercio colonial. La mejora en las infraestructuras de transporte también impulsó el comercio.

Demografía y Economía en el Siglo XVIII

Demografía

El siglo XVIII experimentó un crecimiento demográfico debido a una alta natalidad y al descenso de la mortalidad gracias al aumento de la producción agrícola, nuevos cultivos, menos epidemias y menos guerras. Se implementaron políticas poblacionistas, como la repoblación de nuevos territorios y la roturación de tierras. Sin embargo, existió una desigualdad entre regiones, con las costas más pobladas que el interior.

Agricultura

A pesar de la mala calidad de algunas tierras, las condiciones climáticas adversas y la existencia de «manos muertas» (tierras en poder de la Iglesia y la nobleza que no se podían vender), la producción agrícola aumentó. Abundaban las grandes propiedades y se implementaron mejoras agrarias. Se extendió el cultivo del maíz y la patata, la vid en Cataluña y Valencia, y se incrementó el regadío.

Industria

Surgieron nuevas iniciativas empresariales, como talleres privados y reales fábricas. La industria se vio impulsada por la desaparición de barreras aduaneras y el comercio con América. También se incentivó la actividad empresarial.

Comercio

El comercio interior mejoró debido a la eliminación de aduanas, la mejora de las comunicaciones y el aumento de la producción. El comercio colonial siguió siendo destacado.

Política Exterior de los Borbones

La política exterior de los Borbones estuvo marcada por los siguientes objetivos: la recuperación de territorios en Italia, la alianza con Francia (los Pactos de Familia) y la defensa de los intereses en América. En el primer Pacto de Familia, España intervino en la Guerra de Sucesión de Polonia y el príncipe Carlos se convirtió en rey de Nápoles, a cambio de ceder Parma a Austria. En el segundo Pacto, durante la Guerra de Sucesión de Austria, se recuperó Parma. Y en el tercer Pacto, España participó en la Guerra de los Siete Años y apoyó la independencia de las colonias británicas.