España en el siglo XVIII: Transformación y Reformas Borbónicas
La Guerra de Sucesión Española (1701-1713)
Carlos II, sin descendencia, nombró a Felipe V como rey de España, dando fin a la dinastía de los Habsburgo y comenzando la de los Borbones. Esta decisión provocó revueltas dentro y fuera de España, ya que algunos preferían al Archiduque Carlos de Habsburgo. Esta disputa desencadenó una guerra civil y europea. Inglaterra y Holanda, temiendo la unión de España y Francia, también se opusieron a Felipe V.
Felipe V representaba el modelo centralista francés, apoyado por la Corona de Castilla, mientras que Carlos de Habsburgo representaba el modelo foralista, apoyado por las Coronas de Aragón y Cataluña.
La guerra terminó con el triunfo de Felipe V y el Tratado de Utrecht. En este tratado, Felipe V renunció a la corona de Francia. Los Países Bajos españoles y territorios italianos pasaron a Austria. Inglaterra obtuvo Gibraltar, Menorca, el navío de permiso y el asiento de negros.
Reformas Borbónicas
La dinastía borbónica implementó varios cambios:
- Medidas centralizadoras: Con el objetivo de aumentar la eficacia del Estado.
- Abolición de los fueros: Excepto en las provincias vascas y navarras, que apoyaron a Felipe V en la Guerra de Sucesión.
- Nuevo modelo de administración territorial: Los territorios se dividieron en provincias gobernadas por Capitanes Generales. Se creó la figura de los intendentes y se mantuvieron las Reales Audiencias y los ayuntamientos.
Los Borbones establecieron una monarquía absoluta, suprimiendo todos los consejos menos el de Castilla y creando las Secretarías de Despacho. Intentaron reformar el sistema de Hacienda mediante el Catastro de Ensenada, pero estos intentos no fueron muy eficaces. También expulsaron a la Compañía de Jesús.
El Despotismo Ilustrado (Carlos III)
Carlos III, hijo de Felipe V, fue rey de Nápoles de 1735 a 1759. Su reinado en España se caracterizó por el despotismo ilustrado.
Durante un periodo de recuperación económica, se llevaron a cabo censos para conocer las potencialidades económicas y fiscales. Se crearon las Reales Sociedades Económicas de Amigos del País para elaborar planes de reforma para la agricultura, como el Memorial Ajustado de Campomanes y el Informe sobre la Ley Agraria de Jovellanos.
Se denunciaron las propiedades amortizadas, argumentando que el acceso del campesinado a la propiedad era necesario para el progreso del país. Sin embargo, la negativa del clero y la nobleza paralizó las reformas.
Se rompió el monopolio de los gremios en 1772 y los ministros ilustrados aprobaron medidas para el desarrollo de la industria, creando las Reales Fábricas con apoyo del Estado.
En el comercio, se mejoraron las vías de comunicación, se suprimieron las aduanas interiores y, en 1778, se liberalizó el comercio con América, acabando con el monopolio de la Casa de Contratación.
En cuanto a las finanzas, se creó el Banco de San Carlos y apareció la peseta, aunque no como moneda oficial del país.
Gobiernos de Esquilache y Grimaldi (1759-1766)
Las reformas provocaron el Motín de Esquilache en 1766, en parte por la prohibición de usar capa y sombrero. Los jesuitas fueron acusados de fomentar el motín y expulsados en 1767.
Gobiernos del Conde de Aranda, Florida Blanca y Campomanes
Durante este periodo, los ministros ilustrados impulsaron varias reformas económicas, pero la oposición del clero y la nobleza impidió su completa implementación.
La Política Exterior Española en el Siglo XVIII
España y Francia (Pactos de Familia) se aliaron para enfrentarse a Inglaterra. El objetivo de España era recuperar Gibraltar, Menorca y los territorios italianos perdidos.
- Felipe V (1700-1746): Firmó el primer pacto con Francia en 1734 y el segundo en 1743. España apoyó a Francia en la Guerra de Polonia (1733-1738) y en la Guerra de Sucesión Austriaca (1740-1748). Felipe V logró que el infante Carlos fuera rey de Nápoles y Sicilia.
- Fernando VI (1746-1759): El gobierno español adoptó una política exterior de neutralidad.
- Carlos III (1759-1788): Firmó el tercer pacto con Francia en 1761, participando en la Guerra de los Siete Años (1756-1763). La victoria de Inglaterra y Portugal llevó al Tratado de París (1763), en el que España cedió Florida y Sacramento a Inglaterra y Portugal, respectivamente. Posteriormente, España, Francia y los rebeldes norteamericanos vencieron a Inglaterra. España recuperó Florida, Menorca y Sacramento con el Tratado de Versalles (1783).
La Política Borbónica en América durante el Siglo XVIII
La dinastía borbónica implementó cambios significativos en América.
La sociedad americana estaba dividida en dos grupos: la élite blanca (peninsulares y criollos), que controlaba la administración y las fuentes de riqueza, y el resto de la población (indígenas, esclavos y castas). A mediados de siglo, el gobierno de Madrid decidió explotar las colonias para obtener mayor beneficio, promoviendo las compañías de comercio y decretando la introducción de navíos de registro.
Durante el reinado de Carlos III se excluyó a los criollos de la administración, se creó el Virreinato del Río de la Plata en 1776 y se estableció el cargo de intendente. Con la expulsión de los jesuitas, la Corona obtuvo tierras, como las de Paraguay. El incremento impositivo y la liberalización del comercio con la península en 1778 generaron tensiones y revueltas, aunque fueron reprimidas.
La Ilustración en España
Los ilustrados (nobles, burgueses, funcionarios y clérigos) se interesaron por la reforma económica, la crítica moderada de la realidad social y las nuevas ideas políticas liberales.
En la primera mitad del siglo, destaca Feijóo, cuya obra se centró en la divulgación de la ciencia de Newton y la crítica a los prejuicios tradicionales y las supersticiones. Durante este periodo se establecieron academias como la Real Academia de la Lengua.
Los escritos de Campomanes, Jovellanos, Capmany o Cabarrús muestran la asimilación de las teorías económicas de la fisiocracia y el liberalismo económico.
El interés por la educación y el progreso científico impulsó la creación de nuevas instituciones de enseñanza secundaria y el desarrollo de las ciencias experimentales, destacando figuras como Mutis y Cavanilles en botánica, Ulloa y Jorge Juan en astronomía y cartografía, Piquer en medicina y Feijóo, Jovellanos y Cadalso en literatura.