Economía y Sociedad en Al-Ándalus

Economía

La economía de Al-Ándalus fue muy floreciente, especialmente en sus inicios, en contraste con la de la España cristiana. Se integró en el marco general del comercio islámico, y gracias a Al-Ándalus llegaron a Europa productos muy preciados.

Agricultura

La agricultura era muy desarrollada. Los excedentes de trigo y aceite se dedicaban a la exportación, y el vino se seguía consumiendo a pesar de las prohibiciones religiosas. En cuanto al regadío, surgieron huertas próximas a las ciudades, y los árabes perfeccionaron los sistemas de regadío con la utilización de acequias y norias. Sobre la propiedad de la tierra, aumentó el latifundismo; en Andalucía, los jefes visigodos huyeron y sus grandes posesiones pasaron a los señores árabes. El estado era propietario de 1/5 de las tierras, y las otras cuatro partes las tenían los terratenientes.

Industria y Comercio

La artesanía adquirió una importancia excepcional en un mundo urbano como fue Al-Ándalus. Destacaron talleres que fabricaban artículos de lujo para una población con un alto poder adquisitivo: marfiles, cordobanes, tejidos, etc. Al-Ándalus controló las rutas de oro del Sudán, y este oro fue la base de un sólido sistema monetario basado en el dinar de oro y el dírhem de plata. El comercio andalusí estaba integrado en el marco general de la economía del mundo islámico.

Las ciudades adquirieron una importancia que no tenían desde el Imperio Romano y contrastaban con las ciudades cristianas, que eran insignificantes. En Al-Ándalus se crearon nuevas ciudades (Murcia, Guadalajara, Albacete, Madrid…) y crecieron otras anteriores (Sevilla, Badajoz, Zaragoza), que eran importantes como centros industriales con talleres artesanales. Desde el punto de vista urbanístico, predominaban los planos irregulares y las calles estrechas para garantizar la defensa contra el calor.

2. La Sociedad

La Población

No se tienen muchos datos sobre la población. Se cree que los aportes exteriores no pasaron de 200.000 habitantes en todo el desarrollo histórico, y la población total anduvo sobre los siete millones en el siglo X. La zona más habitada era el valle del Guadalquivir, y la más despoblada, el valle del Duero, expuesto a los ataques cristianos.

Los Grupos Étnicos

Había una gran variedad de grupos étnicos, muy jerarquizados. Los más importantes son:

• Árabes: Procedentes de Arabia, Siria y zonas próximas. Se consideraban cercanos al Profeta y formaban una selecta minoría de gobernantes, guerreros y terratenientes.
• Bereberes: Eran la mayoría de los invasores y provenían del norte de África. Poseían las tierras más pobres.
• Judíos: Eran una pequeña minoría que se dedicaba al comercio, a la medicina y a la usura. Vivían sobre todo en las ciudades.
• Hispanovisigodos: Constituían el 98% de la población. En razón de su actitud ante la nueva religión, se clasificaban en:
  • Muladíes: Conversos al Islam, la mayoría.
  • Mozárabes: Cristianos que vivían bajo el dominio islámico y pagaban tributo a los musulmanes.

Estructura Social

Desde el punto de vista social, había una clase dirigente constituida por la nobleza de sangre, casi siempre de origen árabe, y una nobleza que adquirió ese estatus al servicio del Estado.

3. El Poder Político

A la cabeza del estado se encontraba el emir o califa, que fue consolidando su poder haciéndose independiente de Oriente. El poder del gobernante descansaba sobre una bien organizada administración copiada de Oriente, con el palacio como núcleo de poder. Los funcionarios más importantes eran: los valíes o gobernantes provinciales, el visir o primer ministro, y los amires o jefes del ejército.

4. El Mundo de la Cultura y el Saber

La cultura musulmana se caracteriza por recopilar y sintetizar elementos de los pueblos sometidos. En Al-Ándalus se adoptó el árabe como lengua y se integró en el mundo intelectual de Oriente. El papel fundamental lo desarrollaron los musulmanes españoles. En tiempos del califa Al-Hakam II, Córdoba era la ciudad más famosa del mundo conocido por su brillo cultural y su espíritu de tolerancia. En esta época se escribieron un gran número de obras de literatura, astronomía y matemáticas.

5. La Arquitectura

La arquitectura de Al-Ándalus está integrada en el arte oriental, pero aceptando elementos autóctonos. Dos tipos de edificios fueron los más importantes: la mezquita y el palacio. Entre las mezquitas, la más destacada es la de Córdoba. En cuanto a la utilización de materiales, se utilizaban desde los más nobles hasta los más pobres, pero revestidos con gran magnificencia. Los palacios se adaptaban a la naturaleza, siendo el más destacado, aunque no el único, el de la Alhambra.