El Estatuto Vasco: Un Recorrido Histórico
Primer Estatuto de Autonomía (1936)
Iniciada la Guerra Civil, el País Vasco obtuvo su primer Estatuto de autonomía, aprobado por el procedimiento de urgencia el 1 de octubre de 1936. El texto, redactado y negociado en Madrid por el socialista Indalecio Prieto, era más breve y simple que los proyectos anteriores. Su vigencia fue breve (9 meses) y solo efectiva en Bizkaia hasta su conquista por las fuerzas nacionales.
Unos días después, el 7 de octubre, se constituyó el primer Gobierno vasco presidido por J.A. Aguirre, formado por nacionalistas, que ocuparon las principales consejerías, y republicanos de izquierda.
Quedó fuera la CNT por el veto del PNV. En realidad, fue un gobierno presidencialista, ya que Aguirre concentró muchos poderes al ser al mismo tiempo lehendakari y consejero de Defensa, en un momento en que la prioridad era la guerra. Cabe señalar que desde el exilio pretendió seguir gobernando y defendiendo la identidad del pueblo vasco.
Oposición en el Exilio y el Pacto de Bayona
Acabada la guerra, en los años 40 la oposición democrática fue reprimida, encarcelada u obligada a la clandestinidad en el interior del país. En el País Vasco, la falta de libertades negaba su cultura y su lengua, el euskera. A pesar de todo, las fuerzas políticas y sindicales leales a la república y al Gobierno vasco continuaron su existencia en el exilio con el objetivo de revitalizarse.
En la ciudad francesa de Bayona se encontraban diferentes fuerzas de la oposición vasca. Sus componentes fueron quienes escribieron el «Pacto de Fidelidad» al gobierno republicano del lehendakari José Antonio Aguirre. Se unieron las fuerzas políticas antifranquistas por encima de sus diferencias políticas o ideológicas, ratificando su defensa a los valores de la democracia y su hostilidad hacia la dictadura. Asimismo, defendían tanto el Estatuto como el Gobierno Vasco. En un momento en el que parecía que los aliados no iban a intervenir para ayudar al gobierno vasco, una vez vencieran a las potencias fascistas en la guerra, estos optaron por mantener erguida la dictadura franquista en lugar de tentar a la suerte con un sistema democrático que, supuestamente, habría podido desembocar en un Gobierno liderado por comunistas.
El pacto ocurrió en parte por la gran preocupación de J.A. Aguirre en mantener la unidad del entorno vasco, y evitar la disolución del Gobierno.
Objetivo: Asesorar al Futuro Gobierno Vasco
Finalizado el régimen franquista y establecido un régimen democrático, los redactores de este pacto asesorarían al Gobierno Vasco, respetando los deseos del pueblo.
Significado: Unidad Vasca
El gobierno de Aguirre ayudó a los exiliados, luchó contra el franquismo impulsando huelgas generales en el País Vasco y fue favorable a los aliados.
Este sería el punto de arranque para consolidar la unidad vasca, pero ante todo se priorizó la recuperación de las libertades democráticas; lo que quizá fue la clave del acuerdo.
El Estatuto de Autonomía de 1979
Inicio del Proceso: 29-12-1978
El mismo día que entraba en vigor la Constitución de 1978, que abría un nuevo camino al Estado de las autonomías, se presentaba en las Cortes el proyecto de estatuto vasco elaborado por una comisión nombrada por el Consejo General Vasco (institución preautonómica creada por el gobierno de A. Suárez). Se vio la necesidad de redactar un texto que sería presentado al Gobierno Central, tan pronto como la constitución fuese aprobada.
Negociaciones y Aprobación
Tras un periodo tenso de desacuerdos y negociaciones, el Estatuto sería aprobado unos meses más tarde. El 25 de octubre de 1979, el pueblo vasco lo ratificó en referéndum (con una participación del 58,85% del censo y un 90,27% de votos afirmativos). Poco después fue aprobado por las Cortes con carácter de Ley Orgánica y sancionado por el rey.
Características
Representaba un avance importante en algunas reivindicaciones vascas, aunque sustancialmente era muy semejante al de 1936. La peculiaridad del texto reside en el reconocimiento de la foralidad y de los derechos históricos (Disposición Adicional), lo que le permite, entre otras cosas, tener una policía autónoma (Ertzaintza) a la que se alude en el art.17 y una lengua, el euskera, que será oficial junto al castellano (art. 6). Pero los rasgos definitorios más específicos del sistema autónomo vasco son la organización territorial interna particular (junto con un modelo propio de financiación).
Instituciones
Decidida la no integración de Navarra, al preferir su propio marco económico, ‘el territorio de la Comunidad Autónoma del País Vasco quedará integrado por los Territorios Históricos que coinciden con las provincias, en sus actuales límites, de Álava, Guipúzcoa y Vizcaya…’, representados en el Parlamento y Gobierno Vasco, pero con instituciones propias: Diputaciones y Juntas Generales. El País Vasco era considerado «comunidad histórica» y podía acceder a la autonomía plena.
Conclusión
Primeras Elecciones Autonómicas
En marzo de 1980 se convocaron las primeras elecciones autonómicas y Carlos Garaikoetxea sería investido como primer Lehendakari.
Ley de Territorios Históricos
El parlamento Vasco aprobó en noviembre de 1983 la Ley de Territorios Históricos: se regulan las relaciones de las Instituciones Comunes de la Comunidad Autónoma y los Órganos Forales de sus Territorios Históricos y se perfilan las atribuciones y el funcionamiento de todos ellos.