La Transición Española y la Constitución de 1978
Las Cortes Generales, formadas por el Congreso de los Diputados y el Senado, son las depositarias del poder legislativo. Ambas cámaras son elegidas por sufragio universal. El poder ejecutivo lo ejerce el Gobierno, cuyo presidente es nombrado por el Rey. El Gobierno dirige la política interior y exterior, la administración civil y militar, la defensa y la potestad reglamentaria. El poder judicial corresponde a los juzgados y tribunales. El Tribunal Constitucional se ocupa de interpretar las leyes y velar por que estas estén de acuerdo con la Constitución. La creación del sistema de autonomías fue el cambio más importante que introdujo la Constitución de 1978. Se reconocía, pese a la indisoluble unidad de la nación española, el derecho de autonomía de las nacionalidades y regiones que la integran.
Los Gobiernos de la Democracia Española
Primer Gobierno Constitucional (UCD)
En las elecciones generales de 1979, la Unión de Centro Democrático (UCD) obtuvo el triunfo electoral, mientras que el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) se consolidaba como partido de la oposición. El primer reto para la nueva legislatura fue poner en marcha el Estado de las Autonomías. Durante esta legislatura, la UCD sufrió una crisis interna debido al rechazo al gobierno de Adolfo Suárez. Sometido a fuertes presiones, Suárez acabó por convocar un referéndum el 28 de febrero. La situación de crisis económica arrastrada desde 1973 no hizo más que empeorar la situación, así como los problemas derivados de una intensa actividad terrorista desatada por ETA y los GRAPO. A todo ello se unió el malestar existente entre sectores conservadores del ejército y grupos de derecha radical. Suárez dimitió y se convocó un Congreso extraordinario de UCD, eligiéndose a Leopoldo Calvo Sotelo como candidato a la presidencia, quien adelantó las elecciones a octubre de 1982. En este contexto, se vivieron momentos de auténtica tensión con algunas intentonas golpistas, pero el momento clave fue el 23 de febrero de 1981, cuando, mientras se procedía a la votación de investidura de Calvo Sotelo, un grupo de guardias civiles, a las órdenes del teniente coronel Antonio Tejero Molina, irrumpió en el Congreso interrumpiendo la votación. Los golpistas controlaron puntos estratégicos, como las instalaciones de TVE. Este golpe fracasó y, finalmente, Tejero se entregó.
Gobierno de Calvo Sotelo (UCD)
El gobierno de Calvo Sotelo se caracterizó por el intento de acabar con los enfrentamientos internos de la UCD, frente a la crisis económica y social. En política exterior, buscó el acercamiento a Europa con la adhesión de España a la OTAN, el reforzamiento de nuestra posición en el mundo y la modernización del ejército español. En la oposición, Felipe González rechazaba los planteamientos del gobierno.
Los Gobiernos del PSOE (1982-1996)
En las elecciones de 1982, los resultados cambiaron radicalmente. La mayoría la obtuvo el PSOE, seguido de Alianza Popular. En la escena política apareció el nuevo partido de Adolfo Suárez, el Centro Democrático y Social (CDS). Felipe González gobernó entre 1982 y 1996. Esto permitió profundas transformaciones desde el punto de vista político, consolidándose la democracia parlamentaria, y desde el punto de vista económico y social, con la entrada de España en la Comunidad Económica Europea (CEE).
Primer Gobierno del PSOE (1982-1986)
Las elecciones de 1982 le permitieron a Felipe González gobernar con mayoría absoluta. Entre sus figuras destacaron Alfonso Guerra y Miguel Boyer. En política interior, el paro alcanzó cifras muy elevadas, y el gobierno tomó medidas para mejorarlo. En política exterior, Felipe González convocó un referéndum sobre la permanencia en la OTAN. El siguiente paso fue el ingreso de España en la CEE.
Segundo Gobierno del PSOE (1986-1989)
Esta legislatura se caracterizó por la modernización de España. Entre las medidas tomadas, la más destacada fue la reconversión industrial, con el consiguiente cierre de empresas obsoletas. A esta política se opusieron los sindicatos, que convocaron una huelga general el 14 de diciembre de 1988, quedando el país paralizado. En la oposición hubo cambios, pues Alianza Popular pasó a denominarse Partido Popular (PP). Por la izquierda surgió un nuevo partido, Izquierda Unida (IU).
Tercer Gobierno del PSOE (1989-1993)
Aunque durante su tercer mandato Felipe González también contó con mayoría absoluta, esta lo era con un margen más ajustado. Este gobierno estuvo marcado por la salida a la luz pública de escándalos financieros y casos de corrupción en los que estaban implicados importantes dirigentes del PSOE. También cambiaron los resultados de las elecciones municipales, y el PP se hizo con la alcaldía de Madrid y de algunas ciudades importantes. En un ambiente de crisis económica, Felipe González convocó elecciones en 1993.
Cuarto Gobierno del PSOE (1993-1996)
El PSOE perdió la mayoría absoluta y buscó el apoyo de los nacionalistas catalanes de Convergència i Unió (CiU). La principal promesa electoral fue acabar con la corrupción, pero siguieron los escándalos, destacando la trama de los Grupos Antiterroristas de Liberación (GAL), cuyo objetivo era la lucha armada contra el terrorismo de ETA. Las elecciones de 1995 supusieron una auténtica derrota para el PSOE. Felipe González adelantó las elecciones a febrero de 1996.
Triunfo del PP (1996-2004)
En las elecciones generales de 1996, el PP se convirtió por primera vez en el partido más votado. José María Aznar, tras difíciles negociaciones de dos meses, logró la investidura con el apoyo de los nacionalistas catalanes (CiU), vascos (PNV) y canarios (CC).
Primer Gobierno de Aznar (1996-2000)
El PP se presentaba a los españoles como un partido de centro-derecha, y este periodo se caracterizó por los éxitos económicos. Tras la crisis, vino una época de crecimiento económico. El gobierno supo combatir el paro y se cumplieron los criterios establecidos en el Tratado de Maastricht para la entrada en el euro. José María Aznar convocó elecciones generales en el año 2000, mientras el PSOE se debatía en una grave crisis interna.
Conclusión
El PP triunfó en las elecciones del año 2000, y España dio un inmenso salto modernizador en su estructura política y económica.