La Revolución Francesa: Causas, Etapas y Consecuencias
Antes de la Revolución, Francia veía lastrado su crecimiento económico por los derechos señoriales, diezmos y privilegios, que se llevaban el fruto del trabajo de los campesinos. No permitían la circulación de productos y los gremios no permitían la libertad de trabajo. En 1788, una crisis de malas cosechas provocó una hambruna y una subida de precio de los productos básicos. En la primavera de 1789, muchos campesinos se rebelaban ante el pago de impuestos feudales. En ciudades como París y Lyon también se extendía la miseria y el desorden. Francia era un país rico, bien situado geográficamente, pero con una serie de problemas a su espalda: impuestos y derechos de época medieval. Los campesinos manifestaron su descontento con asaltos, oleadas de robos, etc. La bancarrota de la hacienda es otro de los motivos que provocaron la Revolución Francesa, obligando a introducir reformas para proporcionar nuevos ingresos al fisco que vinieran de los estamentos privilegiados. El Ministro Calonne reunió a los notables para proponerles su contribución, pero se negaron. Fue la rebelión de la aristocracia, que propuso la reunión de los Estados Generales. A todo esto debemos sumar la Guerra contra Inglaterra, los despilfarros de la corte, etc., lo cual aumentaba el desánimo de la población. Calonne propuso un impuesto universal que no gustó nada y fue sustituido. En las monarquías absolutas, los Estados Generales eran una cámara consultiva y carecían de poder legislativo. Esta cámara llevaba sin reunirse 150 años. Se convocaron en 1789 y se contempló la elaboración de los cuadernos de quejas que recogían las reclamaciones de los representantes de los estamentos. Reclamaban contra el despilfarro de la Corte y la necesidad de reformas. En los cuadernos de quejas se ve un malestar general que pide que se cambien cosas y la necesidad de una reforma. En la reunión de los Estados Generales, los representantes del Tercer Estado estaban en minoría respecto a los estamentos privilegiados.
Hacia la Asamblea Nacional
Al discutir si las votaciones habían de ser nominales o por estamentos, los representantes del Tercer Estado decidieron constituirse en Asamblea Nacional. Prometieron estar unidos hasta redactar una Constitución, uniéndose a ellos un sector de la aristocracia. La Asamblea pretende someter al Rey, y toma el nombre de Asamblea Nacional Constituyente.
La Insurrección Popular
Desde el 12 de julio hay manifestaciones y Camille Desmoulins llama a la insurrección. El 14 de julio asaltan la Bastilla, y en el Ayuntamiento se formó un comité y una milicia burguesa, germen de la Guardia Nacional, comandada por La Fayette. El pueblo de París y su apoyo fueron fundamentales para el triunfo de la revolución. El Gran Miedo supone que la revolución se expande por el campo, es el protagonismo de los campesinos ante la noticia de lo que está pasando en París. El miedo lo tenían los terratenientes en el medio rural porque los campesinos asaltan de forma numerosa tanto castillos como las casas de los terratenientes, intentando destruir los documentos de propiedad, etc. La revolución es algo que ha encendido la mecha de una sociedad en la que entran campesinos, ciudadanos, etc.
La Asamblea Constituyente (1789-1791)
Una de las primeras medidas fue acabar con el feudalismo. El 26 de agosto se aprobó la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, con un alcance universal. Los redactores fueron Sieyès y Mirabeau. La Constitución de 1791, texto que adoptaba el sistema censitario, recogía la declaración de derechos y la monarquía parlamentaria. Esta constitución de 1791 reconoce a Francia como una monarquía parlamentaria o limitada por la gestión de las cámaras de los representantes. El sistema censitario dejaba aproximadamente al 40% de los varones en edad de votar fuera del voto. Esta constitución era claramente burguesa, moderada, que reconocía la monarquía.
La Asamblea Legislativa (1791-1792)
Prusia y Austria acordaban defender la monarquía absoluta francesa y amenazaban a los revolucionarios. Francia declara la guerra a Austria. Prusia amenaza a Francia si ejerce violencia contra el Rey, con lo que aumentó el radicalismo entre los franceses (La Marsellesa). Se instauró una «Comuna» (poder local) y se instó a unas elecciones por sufragio universal, que dio lugar a la Convención.
La Convención (1792-1795)
Es una de las últimas fases de la revolución. Esta nueva Cámara fue elegida por sufragio universal pero con una elevada abstención por circunstancias como la guerra, las levas masivas, el descontento interno que había, pero las elecciones dan lugar a una cámara bastante radicalizada. Los grupos políticos principales son los Girondinos, los Montañeses y la Llanura.
Etapa Girondina (1792-1793)
Políticamente eran los más moderados y partidarios de una monarquía parlamentaria y una descentralización de la administración. En este momento es cuando se va a abolir la monarquía y se descubren documentos que demuestran que el Rey estaba conspirando contra su propio país con los austriacos. Esto lleva a una votación en la asamblea en la que por unanimidad se decide que el rey es culpable en todo este asunto. Dada esta unanimidad en la culpabilidad del rey se vota la condena a muerte en la misma cámara dándose 387 a favor y 334 en contra, y se guillotina a Luis XVI en 1793. Al mismo tiempo se produce la invasión de Bélgica y la primera coalición entre España, Austria, Prusia, Gran Bretaña y Portugal contra Francia. Comienza la I República.
Etapa Jacobina (1793-1794)
Eran los representantes de una burguesía radicalizada. Robespierre es uno de los más destacados, pero no el único. Eran partidarios del centralismo y su fuerza principal estaba en París. Elaboran la llamada constitución del año 1. Tras matar al rey, Francia parte de cero y comienza su historia con la I República. La mayoría de los decretos de este período benefician a los sectores más populares, como un nuevo sistema de impuestos en el que pagan los que más tienen. Llevan a cabo la partición de los latifundios para hacer de Francia un país de pequeños propietarios. Van a imponer un sistema de racionamiento ante las dificultades económicas acrecentadas por la misma guerra.
Reacción Thermidoriana (1794-1795)
Dan un golpe de estado que marca el viraje a la derecha de la revolución. Se produce en verano y la realizan los partidarios de la Llanura y parte de los girondinos que no aguantan este viraje a la izquierda. Detienen a los líderes de los jacobinos, dando lugar a una República que era la que quería la gran burguesía francesa. Era una época que pretendía estabilizar la situación política para que la burguesía que había promovido la revolución pudiera llevar a cabo sus actividades económicas y sus negocios. La república jacobina había llegado muy lejos y la burguesía francesa necesitaba estabilidad. Entre otras cosas devuelven los territorios expropiados, se restablece el culto religioso, se limita el derecho de asociación actuando contra la mayoría de los partidos políticos. Hay quien asocia esto a una clara represión política. En 1795 hubo bastantes levantamientos y motines del hambre que fueron aplacados mediante la represión. La reacción acaba con la convención y da lugar al directorio.
El Directorio (1795-1799)
La idea de este viraje hacia el conservadurismo es restablecer el sufragio censitario. El poder legislativo se dividía en dos cámaras: El Consejo de ancianos y el Consejo de los Quinientos. El ejecutivo era un Directorio de 5 miembros. Este viraje a la derecha de alguna forma está preparando el camino para el golpe de estado que da Napoleón. Desde el punto de vista económico estamos en un periodo en el que la economía sale a flote. Es una política alejada del radicalismo jacobino, pero con sectores más bajos nada contentos y con insurrecciones como la Conspiración de los Iguales de Graco Babeuf. En la época del Directorio se observa el ascenso de Napoleón. Continua la guerra exterior donde empieza a sobresalir Napoleón, un joven militar que ascendió por méritos de guerra. Estando en la campaña de Egipto contra los británicos y tras conocer las dificultades del Directorio embarcó en secreto para Francia, llegando en septiembre de 1799. Es recibido en París como si fuera un dios. Va a contribuir a consolidar esta parte de la República más conservadora mediante un golpe militar contra el mismo Directorio. Napoleón, que tenía mando sobre las tropas de París ordenó rodear el edificio de los Consejos y nombró un gobierno provisional conocido como Consulado, compuesto por tres miembros: Sieyès, Ducos y el propio Napoleón. Aprobaron una nueva constitución, la del año VIII.