1.Los desequilibrios económicos de los años 20
Tras la Primera Guerra Mundial, EEUU se convierte en la primera potencia económica del mundo debido entre otras cosas a que su economía no sufre daños durante el conflicto. Durante este período se produce en EEUU un aumento del consumo debido a la escasez de productos tras la Guerra.
En los años siguientes hay un descenso del consumo y de la producción que trae consigo un aumento del desempleo y una situación de crisis. La crisis se empeora cuando EEUU corta las ayudas económicas a Europa.
Ante esta situación de crisis los países comenzaron a adoptar políticas proteccionistas que dificultaron el comercio internacional, disminuyendo la producción y aumentando el paro y el malestar social. Los países más perjudicados fueron Alemania y Austria que tenían que pagar altas indemnizaciones de guerra a los países vencedores según el Tratado de Versalles. Esta situación de crisis provocó el colapso económico en Alemania que en 1923 que dejó de pagar sus indemnizaciones de guerra de las cuales dependía Francia.
La situación comenzó a mejorar cuando en 1924 EEUU promovió el Plan Dawes que consistía en ayudas económicas que favorecieron el desarrollo de nuevos sectores industriales como el petróleo y la electricidad creando puestos de trabajo y aumentando el consumo.
Como consecuencia de esta recuperación económica que propicia el Plan Dawes nace la moderna sociedad de consumo.
Esta etapa de prosperidad se conoce como los felices años 20.
Esta situación de prosperidad duró poco tiempo. Una serie de desequilibrios condujeron a la crisis de 1929 que fue muy profunda y prolongada.
2.La crisis de las democracias liberales
El período comprendido entre 1919 y 1939 es muy inestable debido a las dificultades económicas tras la I Guerra Mundial que dan lugar a la aparición de movimientos políticos totalitarios como el Fascismo y el Nacismo que lograrán imponerse en sus respectivos países.
Como consecuencia de la desaparición de los Imperios Alemán, Austríaco y Turco surgen en estos territorios nuevos países que adoptan sistemas políticos liberales y democráticos dando lugar a la creación de repúblicas como en Checoslovaquia, Yugoslavia, Polonia y Rumanía.
En este momento en Europa hay un gran enfrentamiento político entre la izquierda y la derecha. La izquierda pretende imponer una Revolución siguiendo el modelo Bolchevique que triunfó en Rusia. Por su parte, la derecha defiende la Monarquía, el orden social, la Unidad Nacional y los valores religiosos. Esto conduce a una lucha política por imponer la revolución y la contrarrevolución.
En los países con larga tradición democrática como Francia y Gran Bretaña no logran imponerse las tendencias autoritarias.
El caso alemán: La República de Weismar
La derrota del Imperio Alemán en la I Guerra Mundial provocó la dimisión del Kaiser Guillermo II y la proclamación de una República en Alemania en noviembre de 1918 en la ciudad de Weismar.
El primer gobierno de esta República estuvo formado por los socialdemócratas que tuvieron que hacer frente a la oposición de izquierdas que pretendía llevar a cabo una revolución bolchevique y por la derecha el gobierno tuvo que hacer frente a los nacionalistas y conservadores que pretendían evitar el estallido de una revolución.
En este ambiente de lucha y descontento, gran parte de la clase media alemana comenzó a apoyar las posturas totalitarias del nacionalismo radical. De esta forma, en 1919 surge el Partido de los Obreros Alemanes (DAP) fundado por Anton Dresler, un obrero ferroviario que defiende una ideología de extrema derecha.
Un año después en 1920 con Adolf Hitler se convirtió en el Partido Nacional Socialista de los Obreros Alemanes (NSDAP). Desde este momento Hitler se hace cargo de la Jefatura del Partido y llega al Poder en enero de 1933.
3.La depresión económica de los años 30
La caída de la bolsa de Nueva York en 1929 fue el comienzo de una crisis económica a nivel mundial que puso en cuestión por primera vez el sistema capitalista
El crack del 29
La crisis del 29 sorprendió a una sociedad que vivía en un aparente estado de prosperidad. Esta prosperidad era el resultado de un sistema industrial sostenido por créditos bancarios. Estos créditos favorecía la circulación del dinero y la creencia de que la economía marchaba bien. Sin embargo la prosperidad era aparente porque la demanda del mercado era inferior a la producción. Hacia 1928, inversores y especuladores comenzaron a invertir en bolsa ya que proporcionaba grandes beneficios. Esto condujo a que se inflara de forma artificial el precio de las acciones y se creara una burbuja bursátil que provocó el comienzo de la crisis el 24 de octubre de 1929 que pasó a llamarse ”jueves negro”.
Lo que ocurrió fue que en la bolsa de Nueva York ese día se pusieron a la venta un gran número de acciones con una demanda mínima, lo que provocó una caída en picado de los precios que arruinó a pequeños y medianos inversores. Podemos decir que en el estallido de la crisis contribuyeron 3 causas:La sobreproducción industrial,La crisis de liquidez de los bancos, y La caída del consumo.La crisis se extendió a otros sectores económicos de EEUU y posteriormente al resto del mundo. EEUU se vio obligada a dejar de prestar dinero a países como Alemania, Italia y Austria. Estos pises tuvieron que adoptar medidas proteccionistas. Las consecuencias políticas y sociales fueron muy grandes ya que aumentó el paro y se produjo un empobrecimiento de la población que generó desconfianza en el sistema político y en los partidos tradicionales. Los ciudadanos comienzan a darle su confianza a partidos antidemocráticos y antiliberales por haber sido estos los responsables de la crisis.
Soluciones a la crisis: El fin del Liberalismo clásico
La crisis de 29 demostró el fracaso del capitalismo clásico y motivó la búsqueda de soluciones por parte de los Estados. Las reformas que más éxito tuvieron fueron las incluidas en el llamado “New Deal” propuesto en 1932 por el presidente Rosbelt (Americano). Este plan consistía en una serie de medidas que promovían la intervención del estado en algunos sectores y la mejora de las infraestructuras, con el fin de incentivar el consumo y la producción y por tanto crear empleo.
4.El Fascismo Italiano
Orígenes del Fascismo
En sentido estricto Fascismo se refiere al movimiento político de los años 20, que surgió en Italia como consecuencia de la crisis tras la I Guerra Mundial. En el libro “La doctrina del Fascismo” de Benito Musolini escrito en 1932 se recogen las escasas bases teóricas de esta doctrina política. En el origen del Fascismo está el trato discriminatorio dado a Italia en los tratados de paz posteriores a la I Guerra Mundial. Italia a pesar de estar en el lado de los vencedores no vio recompensadas sus aspiraciones territoriales como lo hicieron los otros países ganadores como Francia y Gran Bretaña y a este hecho de le ha aplicado el término de “Victoria mutilada”. El malestar social causado por ese descontento se ve agravado por la crisis económica y ponen a Italia al borde de una revolución comunista. Es por esto por lo que Mussolini en 1919 funda unas escuadras paramilitares (los fascios Italianos de combate)
Cuyo objetivo era evitar las actividades revolucionarias de la izquierda. Mussolini logró su objetivo de evitar las revueltas comunistas y recibió el apoyo de la clase media italiana y de la burguesía. De esta forma en 1921 surge el Partido Nacional Fascista en el que se integran las anteriores escuadras paramilitares.
Fundamentos teóricos del Fascismo–
Antiparlamentarismo y antimarxismo. Culpa a la democracia liberal de ser responsables e incapaces de solucionar la crisis económica vivida en los años 20.-Niega la igualdad entre los individuos, y por tanto rechaza el modelo de gobierno representativo democrático basado en el sufragio universal. -La existencia de una élite y un líder carismático. Parte de la base de que las Sociedades solo deben estar dirigidas por personas bien preparadas y capacitadas para afrontar los problemas. Solo los mejores pueden liderar a los Pueblos.-La exaltación de los valores nacionales. En ello se opone a las corrientes internacionalistas que caracterizaban al comunismo ruso y a la izquierda. El fascismo realza todo lo que contribuya al engrandecimiento de la patria o nación.-Utilización de fuerzas paramilitares. Se utilizan para eliminar todo intento de oposición al Régimen ayudando a mantenerlo. En Italia estas fuerzas de denominaron los “camisas negras”.
-Rechazo del racionalismo ilustrado.Se explica por su oposición al parlamentarismo democrático ya que este es el origen de los Partidos del Sistema Liberal.
La llegada al poder y el estado Fascista
Tras la I Guerra Mundial la situación de malestar social, la crisis económica, el paro y las frecuentes huelgas desestabilizan la sociedad y en octubre de 1922 los sindicatos y los Partidos de izquierda convocan una Huelga General para derrocar al Gobierno. Esto hace que Mussolini organice sus “camisas negras” para impedir que la izquierda se haga con el poder. El 25 de octubre de 1922 los camisas negras liderados por Mussolini realizan la “Marcha sobre Roma” como demostración de fuerza para convencer al Rey Victor Manuel II de que ellos podrían gobernar Italia manteniendo el orden.
5.El Nacismo Alemán
Orígenes del Nacismo
Tiene sus orígenes en el pensamiento y los escritos de Adolf Hitler, recogidos en su libro “mi lucha”. El Partido Nacional Socialista de los Obreros Alemanes (NSDAP) fue fundado en 1920 por Hitler tras unirse al entonces existente Partido Obrero Alemán (DAP). En poco tiempo, Hitler se convierte en el líder del NSDAP logrando aumentar el número de sus afiliados hasta convertirse en una de las principales fuerzas políticas alemanas a comienzos de los años 30. Este rápido ascenso se explica debido a la estructura jerárquica y militar que Hitler le da al partido.
Para ello se basa en la creación de secciones paramilitares como las SA & SS que actuaban como ejércitos armados del Partido. En 1925 Hitler asume el título de Führer siendo a partir de ese momento el líder indiscutible del partido. Durante los primeros años 20 el Partido Nazi fue dándose a conocer a través de mítines, manifestaciones y concentraciones en las cuales comenzó a tomar protagonismo la personalidad y el carisma de Hitler. En 1923 se lleva a cabo un intento de golpe de Estado por parte de los nazis que se conoce como “Putsch de Munich” que terminó fracasando y con los principales líderes nazis encarcelados: Goebels, Goering, Hess y Rosenberg. Durante el período en el que los líderes nazis estuvieron en prisión, escribió su libro “mi lucha” en el cual expone su ideología. El ascenso electoral del partido llegó a finales de los años 20 cuando como consecuencia del desastre del 29 los descontentos de la sociedad alemana se sintieron atraídos por los mensajes y el programa de Hitler. Entre los que apoyaron el Partido Nazi se encontraba gran parte de la clase media alemana que veía en Hitler al único defensor del orden social amenazado por el intento de revolución que pretendía la izquierda. De este modo en 1939 los nazis consiguen su primer éxito electoral al alcanzar 107 diputados en el parlamento. Dos años después, en 1932 lograron 106 diputados, superando a otras fuerzas políticas, llegando al poder en enero de 1933.
La llegada al poder y la formación del Estado Nazi
En enero de 1933 los nazis llegan al poder tras conseguir su máximo apoyo electoral en unas elecciones al Parlamento. El presidente Hindenburg nombró a Hitler Canciller, abriéndole así la puerta al Gobierno. Desde este momento se produce la formación de un estado totalitario que anulará la oposición y consolidará a Hitler como líder indiscutible de Alemania. En febrero de 1933 se produce un incendio en el Parlamento y Hitler acusa a los Comunistas, lo que permite a Hitler ilegalizar ese Partido. Este hecho servirá de excusa al Gobierno Nazi para limitar las garantías constitucionales. En marzo de 1933 con el permiso del presidente Hindemburg saca adelante la Ley de Plenos Poderes que le permitía disolver el Parlamento y convocar nuevas elecciones. De aquí en adelante el nuevo gobierno nazi prohibió la libertad de prensa y los partidos opositores. Este proceso de concentración de poderes culmina cuando en 1934 muere el Presidente Hindenburg, lo que aprovecha Hitler para unificar en su persona la Presidencia y Jefatura del Estado y sus funciones de Primer Ministro o Canciller. Desde este momento Hitler proclama el Tercer Reich y se sitúa como Führer del Pueblo Alemán. Alemania se convierte en un Estado totalitario. A continuación se suprimen todos los Partidos y Sindicatos y Hitler acaba con la poca oposición que tenía dentro del partido, asesinando a los principales líderes de la S.A. el 30 de junio de 1934 durante la llamada “noche de los cuchillos largos”.
Política económica
La política económica se caracterizó por el control estatal y la autarquía (autosuficiencia). Para lograr este objetivo se puso en marcha una política destinada a producir las materias primas que Alemania no tenía en cantidad suficiente.
El desarrollo económico alemán se basó en la industria pesada y en la construcción de infraestructuras. En cuanto a la industria pesada destacó la construcción de armamento para la remilitarización alemana y la construcción de aviones militares. Con respecto a las infraestructuras se construyeron autopistas y carreteras haciendo de Alemania el país europeo con mayor número de kilómetros de autopistas.
Fruto de esta política económica Alemania alcanzó pleno empleo y se convirtió en la 2ª potencia económica del mundo, solo por detrás de EEUU.
Política social
La política social se caracterizó por la intención de conseguir la pureza racial basada en el predominio de la raza germánica. Para lograr este objetivo tuvo especial importancia el Ministerio de Propaganda dirigido por Goebels. También se crearon instrumentos como las juventudes Hitlerianas para difundir los objetivos del Partido desde la juventud.
Para conseguir la pureza racial se aprovecharon las leyes de Nüremberg en 1935 que consideraban como ciudadanos alemanes solamente a aquellos de raza germana. De este modo los judíos quedaron al margen de la ley, siendo perseguidos poco a poco, lo que culminó en la “noche de los cristales rotos” en noviembre del 38 con la primera gran persecución de los judíos.
Política Exterior
La política exterior de la Alemania nazi se caracterizó por su intención expansionista y de revisión de los Tratados de Versalles.
Esta política expansionista pretendía reunir dentro de las fronteras alemanas a todas las personas de razas germanas en una sola nación, constituyendo así la formación de un gran Reich. Esta política expansionista se basa en la teoría de Lebensraum (espacio vital), que proponía la construcción de un espacio vital alemán bajo el que se agrupasen todos los germanos.