6. LA ESCALADA DE LA Tensión
La reactivación de la rivalidad dio lugar a una nueva escalada de tensión que en la década de 1960 situaría al mundo al borde de la guerra mundial. -El Muro de Berlín: La velocidad con la que la RFA llevó a cabo su recuperación económica le merecíó el calificativo de “el milagro alemán”, y ese mérito contrastaba con las dificultades de Alemania Oriental. Así, el sector occidental de Berlín se convirtió para los habitantes de la zona comunista el destino deseado, al que se fugaban en masa. El impacto propagandístico de este flujo migratorio obligó a Jrushchov a entablar negociaciones con el presidente estadounidense Kennedy para reducir la presencia de los aliados en Berlín occidental. Las negociaciones se celebraron en Viena, pero resultaron infructuosas. Como consecuencia, en Agosto de 1961 los soviéticos comenzaron la construcción de un muro que separó ambos sectores de la ciudad y que se convirtió en el símbolo de la Guerra Fría y de la represión soviética. -La crisis de los misiles
: En 1959 triunfó en Cuba la revolución de Fidel Castro. Estados Unidos sintió amenazados sus intereses, por lo que rompíó relaciones diplomáticas, expulsó a Cuba de la OEA e impuso un bloqueo comercial a la isla. La Cía planeó asesinar a Fidel Castro y apoyó los movimientos anticastristas, y promovíó y financió la invasión a la Bahía de Cochinos. El intento fracasó, y Fidel Castro buscó el apoyo soviético. En 1962, un avión espía estadounidense descubríó bases de misiles soviéticos en la isla; Estados Unidos lo consideró como una agresión a su seguridad nacional y ordenó el bloqueo militar de Cuba; fueron días en los que se estuvo al borde de un enfrentamiento nuclear. Finalmente, la Uníón Soviética retiró los misiles y Estados Unidos se comprometíó a no invadir la isla y a desmantelar sus misiles en Turquía. Se establecíó además el teléfono rojo; una línea entre Washington y Moscú para situaciones de crisis. Por su parte, el régimen de Fidel Castro derivó hacia una dictadura comunista dependiente de Moscú cuyo apoyo hacia las guerrillas latinoamericanas (como las lideradas por el “Che” Guevara) resultó trascendental para la difusión de los movimientos de izquierdas en la regíón. -La guerra de Vietnam: Tras la retirada francesa de Indochina, la regíón había quedado dividida en cuatro Estados: Laos, Camboya, el Vietnam del norte comunista y el Vietnam del sur capitalista; en este nuevo país, Estados Unidos decidíó apoyar la dictadura de Dinh Diem, cuyas políticas de represión provocaron el aumento del apoyo a la guerrilla comunista, el Vietcong. Aplicando la teoría del dominó, Estados Unidos decidíó reforzar su presencia en la regíón. El incidente del golfo de Tonkin llevó al presidente Johnson a ordenar la intervención militar directa en Vietnam: comenzaba así una guerra a la que Estados Unidos llegó a enviar medio millón de soldados incapaces de doblegar al Vietcong, que aplicaba tácticas de guerrilla y contaba con el respaldo popular. En 1968, los comunistas lanzaron la ofensiva del Tet y lograron controlar amplias zonas del país. La oposición al conflicto se extendíó por todo Occidente debido a la crueldad de las imágenes que mostraba la televisión. Richard Nixon alcanzó la presidencia con la promesa de concluir la guerra, y en 1973 se llegó a un acuerdo de alto el fuego que significó la retirada de Estados Unidos y la reunificación de Vietnam bajo un Gobierno comunista.-La carrera espacial
: La tensión entre los 2 bloques llevó a la rivalidad al espacio, y ambas superpotencias emprendieron una carrera que tenía una doble motivación: Propagandística: El dominio del espacio simbolizaba el liderazgo mundial, y mostraba el poderío económico y científico de las superpotencias. Tecnológica: La carrera espacial tuvo un inmediato efecto en la inversión tecnológica, y sentó las bases de las telecomunicaciones actuales.
Fueron los soviéticos quienes tomaron la iniciativa. En 1957 lanzaron los Sputnik a orbitar alrededor de la Tierra. Eran cohetes sencillos, pero sirvieron de antecedente para la nave Vostok, tripulada por Yuri Gagarin, pusiera al primer ser humano en el espacio. Los estadounidenses también iniciaron su proyecto espacial. En 1958, lanzaron el Explorer, y en 1961 el presidente Kennedy puso en marcha el programa Apolo para intentar alcanzar la Luna. El 20 de Julio de 1969, el astronauta Neil Armstrong se convirtió en el primer ser humano en lograrlo. Este “gran salto para la humanidad” los situó al frente de la carrera espacial, que se prolongaría hasta finales de la Guerra Fría consumiendo enormes recursos.
7. EL FIN DE LA Guerra Fría CLÁSICA
-Las causas del cambio
:
Los motivos que propiciaron el cambio en las relaciones internacionales tenían que ver con el coste económico, la aparición de rivalidades internas y el surgimiento de nuevos escenarios y actores internacionales:
El agotamiento económico: Las dos superpotencias llevaban décadas asumiendo los elevados gastos provocados por la carrera de armamentos, la proliferación nuclear y la carrera espacial. Esta circunstancia se vio agravada por la crisis de 1973.
Los conflictos internos: En la década de 1960 se habían vivido una serie de conflictos que debilitaron la cohesión de los bloques y que obligaron a ambas superpotencias a centrar sus esfuerzos en preservar el orden interior:
Estados Unidos: Tuvo que hacer frente a una profunda crisis de valores que se manifestó en la rebelión cívica contra la Guerra de Vietnam y en la lucha por los derechos políticos de la minoría afroamericana. Además, hubo de centrar sus esfuerzos en Latinoamérica, donde proliferaban guerrillas y gobiernos de izquierdas.
Uníón Soviética: Además de tener que reprimir algunos intentos de sublevación, como el acontecido en Praga de 1968, debíó afrontar la rivalidad surgida con países de su órbita ideológica.
Los nuevos escenarios y actores internacionales: También en ese decenio surgieron nuevas zonas de conflicto internacional, sobre todo en países árabes e Israelíes, que trajeron consigo numerosas guerras y convirtieron la regíón de Oriente Próximo en foco de constantes tensiones. Por otro lado, la descolonización y la aparición del movimiento de países no alineados sirvieron para concebir una nueva visión de la política exterior en la que la confrontación entre bloques se vio superada por nuevas rivalidades entre Norte y Sur, entre países ricos y países pobres. La Ostpolitik: En 1969, el socialista Willy Brandt se convirtió en canciller de la Alemania Occidental. Desde su cargo, promovíó el restablecimiento de relaciones diplomáticas con la RDA. Esta toma de postura recibíó el nombre de Ostpolitik, o “política del Este”, y supónía el reconocimiento de la RDA como Estado de la RFA, en contraste con la postura anterior, que se negaba a mantener relaciones diplomáticas. Este cambio de postura facilitó el acercamiento entre las dos Alemanias, que se reconocieron mutuamente bajo la fórmula de “dos Estados y una sola nacíón” como paso previo a la aceptación por parte de la comunidad internacional y a su ingreso en la ONU.
La Conferencia de Helsinki
: Como consecuencia de la mejoría en las relaciones entre los bloques, el líder soviético Brézhnev promovíó la celebración de una reuníón que congregase a los países europeos con el objetivo de fomentar el entendimiento diplomático. La propuesta se materializó en la Conferencia de Seguridad y Cooperación en Europa, que celebró sus reuniones en Helsinki (Finlandia) entre Noviembre de 1972 y Agosto de 1975, y a la que también asistieron Estados Unidos y Canadá. En ella se suavizó la tensión entre bloques gracias a la adopción de importantes acuerdos:
Los países del bloque comunista se comprometían a avanzar en materia de derechos humanos.
Se reconocían las fronteras surgidas tras la Segunda Guerra Mundial, lo que supónía aceptar el control soviético en Europa Oriental.
Se establecía el sistema de conferencias con el objetivo de facilitar la comunicación entre ambos bandos.
Las iniciativas de desarme
: El principal cambio acontecido en estos años fue la firma por parte de los soviéticos y estadounidenses de conventos para limitar la proliferación de armas nucleares, que recibieron el nombre de SALT:
SALT I: Suscritos en 1972 entre el presidente Nixon y el líder soviético Brézhnev, ratificaban la reducción de los arsenales nucleares y la prohibición de los sistemas antimisiles, iniciativa que pretendía evitar la guerra mediante la destrucción mutua asegurada.
SALT II: Fueron firmados en 1979 por Brézhnev y el nuevo presidente de Estados Unidos, Jimmy Cárter.
La política de desarme duró poco, ya que el Senado estadounidense no la aceptó al considerar que favorecía los intereses soviéticos; la Uníón Soviética desplegó una red de misiles de corto y medio alcance en Europa, y llevó a cabo la invasión de Afganistán. Ello motivó el cambio de estrategia dirigido por el nuevo presidente estadounidense, Ronald Reagan, que promovíó un sistema estratégico de defensa, conocido como la guerra de las galaxias, que contravénía los acuerdos SALT.