El Imperialismo
Causas del Imperialismo
Intereses Económicos
Los países industrializados de Europa buscaban nuevos mercados donde vender el sobrante de su producción industrial. También aspiraban a comprar materias primas y productos coloniales al mejor precio posible. Querían invertir sus excedentes de capital en lugares fuera de Europa, donde la mano de obra más barata les permitía obtener mayores beneficios.
Crecimiento Demográfico
Los cambios económicos a lo largo del siglo XIX dieron como resultado un gran aumento de la población europea. Esta expansión demográfica generó un volumen de población excedente, sobre todo en la agricultura, que estimuló la emigración hacia otros continentes.
Rivalidad entre Potencias
La expansión imperialista estuvo también provocada por el deseo de ampliar las zonas de influencia de cada una de las potencias industriales. En Europa, a partir de la unificación de Italia y de Alemania, que estabilizó las fronteras, los deseos de los países de ampliar su poder político solo podían hacerse realidad ocupando otros continentes. Todo ello promovió una carrera por controlar nuevos territorios.
El Mito de la Raza Superior
Las causas profundas del imperialismo son incomprensibles sin las concepciones racistas y nacionalistas. Se extendió el convencimiento de que los europeos tenían el deber de difundir su cultura y civilización entre los pueblos considerados inferiores.
Consecuencias del Imperialismo
Económicas
Nueva Organización de la Producción
En 1903, Frederick Taylor revolucionó los métodos de producción inventando la organización científica del trabajo o taylorismo. La producción se orientó hacia la fabricación en serie como la mejor manera de aumentar la productividad, disminuir el tiempo empleado y reducir el coste de fabricación. Estos nuevos métodos de trabajo se basaron en la cadena de producción, en la que cada obrero realiza una parte muy concreta del proceso productivo. La fábrica de automóviles Ford, en Estados Unidos, fue una de las primeras en implantar una cadena de producción en serie de automóviles (fordismo).
La Banca y la Concentración Empresarial
Así nacieron el cartel, el trust, el holding y el monopolio (derecho exclusivo de una empresa a comercializar un producto).
La Expansión Colonial
Exploración y Conquista
A mediados del siglo XIX, numerosas zonas del interior de África, de Asia y de los océanos eran prácticamente desconocidas. Las primeras expediciones europeas las realizaron principalmente británicos y franceses. Destacaron los exploradores británicos Livingstone y Stanley y el francés Brazza, que recorrieron y cartografiaron África central. Tras la exploración de los territorios, la conquista se llevó a cabo de forma relativamente rápida y fácil.
Enfrentamientos entre Potencias Coloniales
El imperialismo del siglo XIX presentó un carácter belicoso, con guerras constantes. El choque de intereses entre las potencias rivales por el reparto de África impulsó la convocatoria de la Conferencia de Berlín. En ella se decidieron las normas para repartirse el territorio y las zonas que ocuparía cada potencia. A pesar de ello, el enfrentamiento de los intereses imperialistas se hizo inevitable. Así, Francia e Inglaterra chocaron en el año 1898 en un territorio al este del lago Chad, llamado Fachoda, y la guerra estuvo a punto de estallar. Otro incidente grave fueron los conflictos anglo-bóeres, en los que se enfrentaron los británicos con los colonos holandeses instalados en la zona sudafricana desde el siglo XVI, donde habían formado las repúblicas del Transvaal y el Estado Libre de Orange. La noticia de que se habían hallado importantes depósitos de oro en el Transvaal impulsó a los británicos a invadir esas repúblicas y anexionarlas. Al cabo de tres años de guerra, los territorios bóeres fueron anexionados al imperio británico. Gran parte del continente asiático fue ocupado tanto por las potencias europeas como por otros países. En China, las potencias colonialistas querían estar presentes en un mercado tan importante por su numerosa población. A través de las Guerras del Opio, entre China y el Imperio británico, forzaron la apertura del comercio y la entrada de intereses occidentales en la explotación de sus riquezas. La intromisión extranjera fue contestada con diversas revueltas sociales, como la de los bóxers.
El Imperio Británico
En África, los británicos formaron un imperio de norte a sur, que se extendía desde El Cairo hasta Ciudad del Cabo. La principal colonia británica fue la India. Con una numerosa población, la India se convirtió en un gran mercado para los productos británicos y en una importante proveedora de materias primas. Para garantizar un territorio de seguridad a su alrededor, los ingleses rivalizaron con Francia para anexionarse Birmania, y con Rusia por el dominio de Afganistán y el Tíbet.
El Imperio Francés
El proyecto francés de ocupar en África un vasto territorio de este a oeste, desde el mar Rojo al océano Atlántico, chocó con los intereses británicos en Sudán. Sin embargo, Francia consolidó su dominio en una amplia zona que se extendía por Marruecos, Argelia y Túnez, y más al sur, en las llamadas África Occidental Francesa y África Ecuatorial Francesa. La presencia francesa en el sudeste asiático, desde mediados del siglo XIX, se amplió con el establecimiento de una serie de protectorados que formaron la Indochina francesa.
Otros Imperios: Estados Unidos y Japón
La expansión colonial de Estados Unidos fue hacia el Pacífico y el Caribe. En una guerra rápida, expulsaron a los españoles de Filipinas, Cuba y Puerto Rico, y se apoderaron de una franja de Panamá, donde acabaron de construir el canal transoceánico. Japón intervino para detener el avance ruso en la provincia china de Manchuria y ocupó las islas Kuriles, Corea y Formosa.
Sociales
Modificación del Territorio
Los europeos crearon nuevos países y trazaron sus fronteras. Todo ello conllevó una modificación de la estructura económica y política africana que no tuvo en cuenta las diferencias tribales, lingüísticas o religiosas, y que formó países con graves problemas de cohesión interna.
Impacto Demográfico
La introducción de medidas higiénicas y la construcción de nuevos hospitales en los cuales se vacunaba a los indígenas permitieron la reducción de las epidemias. Como consecuencia, la mortalidad descendió notablemente y la población aumentó. Pero en muchas colonias, especialmente del continente africano, el aumento de habitantes rompió el equilibrio entre población y recursos, y empezó a producirse una situación de subalimentación crónica.
Desarticulación de las Sociedades Tradicionales
La estructura social también cambió. Los colonizadores no mostraron ningún respeto por las formas de vida de los pueblos indígenas.
La Primera Guerra Mundial
Causas de la Primera Guerra Mundial
Enfrentamientos Coloniales
La Conferencia de Berlín había intentado establecer un acuerdo entre los imperios, pero el ascenso de potencias como Alemania, que había llegado con retraso a la carrera colonial, volvió a reabrir los conflictos entre los países europeos.
Rivalidades y Nacionalismo
El ascenso de los nacionalismos contribuyó a las aspiraciones de independencia de algunos pueblos europeos que querían librarse de la tutela de los viejos imperios tradicionales. La región de los Balcanes, dominada por el Imperio turco, se convirtió en un foco de importantes tensiones internacionales.
Conflictos Balcánicos
Los conflictos en los Balcanes fueron un detonante importante para la Primera Guerra Mundial.
Alianzas Militares y Carrera de Armamentos
Alemania, Austria-Hungría e Italia firmaron la Triple Alianza. Francia, Rusia y Reino Unido acabaron firmando la Triple Entente.
Desarrollo de la Primera Guerra Mundial
El Estallido de la Guerra
El asesinato del archiduque Francisco Fernando de Austria, heredero al trono austrohúngaro, fue el detonante inmediato de la guerra.
La Guerra de Movimientos
En la primera fase de la guerra, los ejércitos se movieron rápidamente, buscando una victoria decisiva.
La Guerra de Trincheras
La guerra se estancó en una guerra de trincheras, con enormes pérdidas humanas.
1917: La Entrada de Estados Unidos y el Fin de la Guerra
La entrada de Estados Unidos en la guerra en 1917 inclinó la balanza a favor de los aliados y condujo al fin de la guerra en 1918.