El Imperio Ruso: Un Gigante Atrasado y Autócrata
El Imperio ruso, bajo el reinado de Nicolás I, era un gigante con pies de barro. A pesar de su vasto territorio y población, era el más atrasado de Europa. Rusia era una autocracia, donde el zar gobernaba sin rendir cuentas a nadie. Los partidos políticos estaban prohibidos y la policía reprimía cualquier oposición. La iglesia ortodoxa ejercía una gran influencia social y era un pilar del zarismo.
La Economía
La economía se basaba en una agricultura muy atrasada y de baja producción, lo que dificultaba alimentar a toda la población. La industrialización se limitaba a la parte más occidental del Imperio (San Petersburgo, Moscú, Ucrania), con una fuerte influencia del capital extranjero.
La Sociedad
La sociedad rusa era una de las más desiguales de Europa. La nobleza poseía la mayor parte de la tierra y disfrutaba de una vida lujosa. Los campesinos, la inmensa mayoría de la población, vivían en extrema pobreza y eran en su mayoría analfabetos. Los kulaks, medianos propietarios que se habían enriquecido acumulando tierras, también existían. Los obreros se concentraban en las ciudades industriales, muchos de ellos antiguos campesinos que habían emigrado en busca de trabajo, huyendo de la miseria rural. Trabajaban en grandes empresas, con salarios bajos y condiciones precarias. La burguesía era escasa y tenía poca influencia en el poder.
Oposición al Zarismo
A finales del siglo XIX, creció la oposición a la autocracia zarista, impulsada por el campesinado y el proletariado. Los primeros opositores fueron los populistas, que buscaban la destrucción del zarismo e imponer el socialismo con base agraria. El anarquismo también arraigó, con organizaciones como Tierra y Libertad, que propugnaba el reparto de tierras entre los campesinos. Se creó el Partido Socialista Revolucionario, con gran influencia sobre los campesinos, ya que buscaba expropiar la tierra de los terratenientes. También se fundó el Partido Obrero Socialdemócrata ruso, que en 1904 se dividió en dos facciones: bolchevique (liderada por Lenin) y menchevique (que seguía las directrices de la II Internacional).
Revolución de 1905 y sus Consecuencias
En enero de 1905, estalló un movimiento revolucionario en San Petersburgo. Una gran manifestación ante el Palacio de Invierno, donde vivía el zar, protestaba contra la injusticia social y demandaba mejores condiciones de vida y una Asamblea Constituyente elegida por el pueblo. La protesta fue reprimida por el ejército, causando más de 300 muertos y 1000 heridos (Domingo Sangriento). Esta revolución obligó al zar a realizar reformas económicas y políticas, anunciadas en el Manifiesto de Octubre. El zar convocó una Duma (parlamento) y una reforma agrícola. Las exigencias de los campesinos se hicieron más importantes. Se organizaron los soviets (consejos de obreros, campesinos y soldados). El Partido Octubrista defendía una monarquía constitucional y apoyó las reformas propuestas por el zar. El Partido Democrático Constitucional (kadete) representaba a las clases medias.
La Revolución de Febrero de 1917
Las reformas posteriores a 1905 fueron insuficientes para transformar las estructuras sociales y políticas del Imperio. El sufragio para elegir a la Duma buscaba impedir el auge de las fuerzas opositoras. El poder del Parlamento era escaso y el zar y sus ministros no eran responsables ante él. La reforma agraria había favorecido a los kulaks, que habían aumentado sus propiedades a costa de los campesinos más pobres. En 1914, parecía que el zarismo había superado sus problemas, pero la participación de Rusia en la Primera Guerra Mundial creó las condiciones para un nuevo estallido revolucionario.
La Difícil Coyuntura de la Guerra Mundial
La economía rusa se centró en abastecer al ejército, las fábricas se transformaron en industrias de guerra y se reclutó a campesinos, lo que disminuyó la producción agraria. Comenzaron a escasear los productos de primera necesidad, los precios subieron y el hambre se extendió por toda la población. Las derrotas militares ante Alemania, debido a que el ejército ruso no estaba bien equipado y fue mal dirigido, provocaron numerosas deserciones. El descontento popular se manifestó en protestas. El zar disolvió la Duma, lo que aumentó el malestar político. La confianza en el zar se hundió y comenzaron los complots en la corte, impulsados por el monje Rasputín, quien fue asesinado en 1916. El desastre militar y el descontento político llevaron a la revolución de febrero de 1917.
Caída del Zarismo
La revolución comenzó el 23 de febrero con una gran manifestación en Petrogrado (San Petersburgo) y se extendió por otras ciudades. Se formaron comités revolucionarios de obreros, campesinos y soldados (soviets) que se oponían al zarismo y adquirieron gran protagonismo en las revueltas. El 27 de febrero, hubo una huelga general en las principales ciudades. Los militares se negaron a disparar contra los manifestantes, que pedían la retirada de la guerra, la dimisión del zar y mejores condiciones de vida. El zar abdicó y la Duma tomó protagonismo, nombrando un gobierno provisional presidido por el príncipe Lvov y luego por Kerenski.
Gobierno Provisional
El nuevo gobierno prometió reformas políticas (libertad de opinión, de prensa, reunión y elecciones libres), sociales (jornadas de 8 horas, derechos sindicales) y la convocatoria de elecciones libres para una Asamblea Constituyente. Sin embargo, el gobierno no atendió a las demandas y decidió mantener los compromisos militares con los aliados. Las condiciones de la población no mejoraron, hubo más manifestaciones y las fuerzas políticas que habían derrocado al zar comenzaron a desunirse. Se estableció un doble poder: el gobierno provisional (apoyado por la burguesía y el socialismo moderado, que querían convertir Rusia en una república parlamentaria al estilo occidental) y los soviets (fuerzas revolucionarias que exigían el reparto de tierras entre campesinos, mejoras salariales y la retirada inmediata de la guerra). El gobierno era muy débil.
La Revolución de Octubre y la Crisis de Abril de 1917
El gobierno provisional permitió que los exiliados del zarismo regresaran a Rusia, entre ellos el bolchevique Lenin. Lenin expuso las “Tesis de abril”, defendiendo que la revolución debía ser proletaria para acabar con el capitalismo y la burguesía (dictadura del proletariado). Para tomar el poder, los bolcheviques debían convencer a sus partidarios de la necesidad de la insurrección armada, aumentar su influencia en los soviets, planificar la insurrección con rapidez y disciplina. Se formó un gobierno de coalición con Kerenski como ministro de guerra. El descontento popular con las promesas incumplidas del gobierno provisional facilitó el triunfo de la revolución obrera.
Julio de 1917
- Se organizó una manifestación armada contra el gobierno provisional tras una nueva derrota en la Primera Guerra Mundial.
- Se radicalizaron las ideas de oposición al gobierno.
- El partido bolchevique fue declarado ilegal, Lenin huyó y Trotski fue encarcelado.
- El príncipe Lvov dimitió a favor de Kerenski, quien formó un gobierno de coalición.
Golpe de Estado de Kornilov (Agosto de 1917)
El general Kornilov organizó un golpe de estado para implantar una dictadura militar. Kerenski lo sofocó con la ayuda de los bolcheviques, quienes reforzaron su poder.
Guerra Civil y el Comunismo de Guerra
Las Primeras Medidas Revolucionarias
Se disolvió el gobierno provisional y se aprobó la formación de un Consejo de Comisarios del Pueblo, liderado por Lenin. Se decretaron las primeras medidas revolucionarias: abolición de la propiedad privada de la tierra y expropiación, control obrero de las empresas de más de 5 trabajadores, nacionalización de bancos, supresión del ejército zarista y reconocimiento del derecho a la autodeterminación de diversos pueblos del Imperio. El gobierno buscó la paz con Alemania, firmando el tratado de Brest-Litovsk, aceptando las exigencias alemanas. Rusia renunció a los países bálticos, Finlandia, territorios polacos y Ucrania se declaró independiente. En 1917, se convocaron elecciones para la Asamblea Constituyente, pero como los resultados no fueron los esperados por los bolcheviques, disolvieron la Asamblea.
Guerra Civil (1918-1921)
La revolución había triunfado, pero los bolcheviques solo controlaban una zona cerca de Petrogrado y Moscú (nueva capital). Los defensores del zarismo iniciaron una resistencia armada para impedir la consolidación del Estado soviético, uniéndose a Gran Bretaña, Estados Unidos y Polonia, que invadieron Rusia con sus ejércitos. Los rusos blancos, partidarios del antiguo orden, se enfrentaron a la Rusia roja. La guerra duró tres años. Los bolcheviques crearon el Ejército Rojo (Trotsky), basado en la disciplina y el ánimo revolucionario. El conflicto fue largo y cruel, causando hambre y miseria. El zar Nicolás II y su familia fueron ejecutados por los bolcheviques. Al principio, el Ejército Blanco obtuvo algunas victorias, pero el Ejército Rojo dominó la situación, apoyado por los campesinos a quienes se les regalaron tierras. El Ejército Blanco estaba desorganizado y los ejércitos extranjeros se retiraron. Tras la victoria en Ucrania, el Ejército Rojo ganó la guerra.
Comunismo de Guerra
Todos los recursos del país se centraron en ayudar al ejército. Se estableció el “comunismo de guerra”, que implicaba un estricto control de la economía por el Estado y una gran vigilancia sobre la población. Se nacionalizaron las industrias de más de 10 trabajadores, la banca, los transportes y el comercio. Se controló la producción de cereales y los agricultores fueron obligados a entregar al Estado la mayor parte de sus cosechas. La disciplina laboral aumentó, se prohibieron las huelgas y se militarizó la producción. La falta de alimentos y el descenso de la producción provocaron desabastecimiento en las ciudades. Se impusieron medidas como la censura, la prohibición de la prensa opositora y la intervención de los tribunales. Se creó una policía política (Checa) que detenía y castigaba a cualquiera que criticara las decisiones del partido bolchevique.
Creación de la URSS y la Expansión Revolucionaria
Después de la guerra civil, en 1922 se creó la URSS. La Constitución soviética negaba las elecciones libres y el parlamentarismo. El Partido Comunista y el Estado constituyeron el nuevo Estado soviético. Lenin y Trotsky defendían que la revolución debía ser del proletariado y buscaron fundar partidos comunistas, uniendo sus fuerzas en la III Internacional para extenderla por Europa.
Una Época de Crisis
Después de la Primera Guerra Mundial y la victoria de los países democráticos, nacieron nuevos países con un carácter liberal parlamentario. En Europa se vivieron dificultades económicas y una gran crisis social con características revolucionarias. Los sindicatos y partidos socialistas se reforzaron, recordando que la revolución soviética había llevado al poder a la clase obrera. Esto generó oposición en las democracias por parte del proletariado y temor en la burguesía y clases medias. La crisis de 1929 complicó aún más la situación y creó un ambiente favorable para la aparición de dictaduras y regímenes totalitarios.
La Democracia ante la Crisis
Ante la crisis económica y la agitación social, algunos países lograron integrar el socialismo emergente en el sistema mediante el sufragio universal y coaliciones políticas, aislando a los partidos más radicales. En Gran Bretaña, la situación económica era grave, con industrias anticuadas y reducción de exportaciones, lo que aumentó el desempleo. En Francia, la crisis económica se extendió en 1930, produciendo protestas obreras y movilizaciones de la derecha. Se formó una coalición entre republicanos, socialistas y comunistas (Frente Popular). En Suiza, Bélgica y Holanda se logró la estabilidad al formar coaliciones alrededor de los partidos liberales. En los países nórdicos se frenó el ascenso de los radicalismos. Las democracias se encerraron en sí mismas y contemplaron el ascenso de las dictaduras en Europa.
El Ascenso de las Dictaduras
En los países donde el sistema liberal parlamentario no tenía gran tradición, y ante la crisis económica y revueltas sociales, se establecieron sistemas políticos autoritarios. Estas dictaduras prometían restablecer el orden, exaltaban el nacionalismo y se apoyaban en el ejército y la Iglesia para combatir el avance de socialistas y comunistas. En 1920, Hungría se convirtió en dictadura, seguida por Polonia, Lituania y Portugal en 1926. En 1933, Austria y en 1934 Letonia y Estonia. En España, el general Primo de Rivera dio un golpe de estado en 1923 e instauró una dictadura, que luego pasó a ser una república democrática, abortada por el levantamiento militar y la guerra civil española y la posterior dictadura del general Franco. El fascismo se extendió por Italia (Mussolini como jefe de gobierno) y los nazis se hicieron con el poder en Alemania en 1933. En la URSS, enemigo de estos regímenes fascistas, se consolidó un régimen totalitario dirigido por Stalin bajo el Partido Comunista.
¿Qué Elementos Definen el Fascismo?
El fascismo surge como rechazo a la tradición ilustrada, a la democracia y al pluralismo político, como un proyecto totalitario, antiliberal y anticomunista. Se basaba en:
- Sumisión y obediencia ciega al líder (Hitler, Caudillo o Mussolini), quien concentraba los poderes, simbolizaba a la nación, era el Estado, jefe del partido único y guía de su país.
- Exaltación del Estado por encima de los derechos y libertades de los ciudadanos.
- Exaltación de la violencia para demostrar quién es superior.
- Defensa de una sociedad no igualitaria, donde dominan los escogidos.
- Nacionalismo exacerbado con un componente racista, justificando la eliminación de otros grupos o pueblos.
- Movilización y organización de masas.
Fascismo Italiano
La situación italiana de la posguerra era grave debido a la crisis económica, el paro y la ocupación de tierras por campesinos empobrecidos. Los italianos estaban defraudados con los acuerdos de Versalles, ya que no vieron satisfechas sus aspiraciones territoriales.
La Toma del Poder
Mussolini aprovechó este descontento para formar fuerzas paramilitares con jóvenes de la burguesía y excombatientes, que actuaron contra las organizaciones de izquierda con palizas y asesinatos. En noviembre de 1921, Mussolini fundó el Partido Fascista, que defendía la propiedad privada y el militarismo. La simbología era la camisa negra como uniforme, el saludo romano y el fascio como emblema. En agosto de 1922, los fascistas abortaron una huelga general convocada por la izquierda. En octubre, se organizó un golpe de estado encubierto, “la marcha sobre Roma”, con manifestaciones y actos de fuerza por el país, finalizando cuando el rey Víctor Manuel III encargó a Mussolini formar un nuevo gobierno.
La Fascistización de Italia
A partir de 1922, Mussolini fue el jefe de gobierno (en coalición con liberales y católicos). Elaboró una nueva ley electoral y convocó elecciones. El PNF obtuvo mayoría absoluta (antes de las elecciones se amenazó a los otros partidos). La oposición protestó por el fraude y la manipulación en las elecciones, lo que fue contestado con el secuestro y asesinato del socialista Matteotti. En 1925, Mussolini inició la dictadura fascista, caracterizada por:
- Supresión de la democracia (encarcelamiento de opositores, censura en la prensa y persecución del antifascismo).
- Concentración de todos los poderes: Mussolini jefe de gobierno y jefe del Partido Fascista, manteniendo la monarquía.
- Creación de un Estado corporativo, donde las corporaciones reunían a empresarios y trabajadores y se convirtieron en los nuevos organismos representativos de la sociedad.
- Establecimiento de relaciones con el Vaticano mediante el Convenio de Letrán, dando a la Iglesia un privilegio social.
- Política exterior expansionista.
- Aprobación de leyes raciales, impidiendo el matrimonio entre blancos y negros (influencia alemana).
Dirigismo Económico y Control Social
Se pretendía que el Estado y el Partido Fascista reglamentaran todos los aspectos de la vida económica y social. Se promovió el intervencionismo económico para implantar la autarquía y conseguir que Italia fuera autosuficiente. Se redujeron las importaciones, se controló la producción agrícola e industrial, se creó el IRI (Instituto para la Reconstrucción Industrial) que controlaba los sectores básicos como la electricidad, etc. Se construyeron autopistas. Esta política generó grandes beneficios, pero los salarios y los derechos laborales no eran buenos y el nivel de vida de los obreros italianos descendió. Se estimuló la afiliación al partido y sindicatos fascistas, se creó la Opera Nazionale Balilla, donde era obligatorio inscribir a todos los niños, se controlaba la educación, los actos de masas y se enseñaban los valores fascistas y el culto a Mussolini.
¿Cómo Consiguió el Partido Nazi Llegar al Poder en Alemania?
Cronología:
- 1919: Partido Nacional Socialista
- 1921: Frente del partido
- 1923: Golpe de Estado: Partido: cárcel
- 1925: S.S (Grupo de protección)
- 1929: Crisis: Década de los 30
- 1932: Gana elecciones: Canciller (presidente)
La Nazificación de Alemania
Hitler en el Poder, Camino al Totalitarismo
Hitler fue proclamado canciller y estableció un régimen totalitario en Alemania. En febrero de 1933, limitó el derecho de reunión y la libertad de prensa. Las fuerzas policiales ocuparon la sede del Partido Comunista. Se incendió el edificio del Parlamento alemán en 1933 y se atribuyó a los comunistas sin pruebas, lo que sirvió para una violenta persecución contra ellos y para suprimir los derechos fundamentales. En un ambiente de represión e intimidación, se celebraron las elecciones de marzo de 1933, con un nuevo triunfo del Partido Nazi (sin mayoría absoluta). Se aprobó una ley de plenos poderes para que Hitler pudiera gobernar durante 4 años sin el apoyo del Parlamento y anular cualquier punto de la constitución si quería.
El Establecimiento del Régimen Nazi
Medidas que completaron el proceso de nazificación:
- Ilegalización de los partidos socialdemócrata y comunista (los dirigentes fueron detenidos y enviados a campos de “reeducación” y sus bienes confiscados).
- Unificación de los Länder (estados federados) mediante la supresión del sistema federal y la disolución de sus parlamentos.
- Depuración de la administración: persecución y exclusión de personas contrarias al régimen.
- Reforzamiento de la represión: la SS y la Gestapo eran las fuerzas policiales. Se empezaron a construir campos de concentración para internar a personas peligrosas o indeseables.
- Eliminación de la disidencia: en la Noche de los cuchillos largos, los principales dirigentes de la SA fueron asesinados, consagrando a la SS como el cuerpo de élite del Estado.
- Conquista del espacio vital: para garantizar la expansión territorial si fuera necesario.
- Nombramiento de Hitler como jefe de Estado, convirtiéndose en el Führer (caudillo y canciller) del III Reich (imperio).
Autarquía y Rearme
Se pretendía convertir a Alemania en una gran potencia industrial y eliminar el paro. Se reforzó el capitalismo alemán y se aplicó el Plan Cuatrienal, preparando al país para la guerra.
- Autarquía económica: Alemania como país autosuficiente y disminución de importaciones.
- Impulso de obras públicas con inversiones del Estado.
- Control de precios y salarios.
- Fomento de la industria pesada (armamento) para remilitarizar el país.
En 1939, Alemania consiguió ser la segunda potencia mundial, sin paro, pero con sueldos muy bajos.
El Totalitarismo Soviético
El Régimen Estalinista
Stalin se centró en consolidar la revolución en Rusia:
- Se implantó una dictadura centralista con Stalin como guía, con un culto a su persona, gran represión contra los disidentes, control ideológico y uso de la violencia para controlar la sociedad.
- El Partido Comunista potenció la burocracia y la nomenklatura.
- Desarrollo económico para convertir a la URSS en una de las primeras potencias mundiales.
La Planificación Económica y la Industrialización
Stalin defendía que la URSS era el único país donde se había consolidado el socialismo y exigía una rápida industrialización. Se apostó por una economía planificada centrada en la colectivización, la industrialización y el uso de la violencia. El proyecto buscaba que el Estado obtuviera del campo y otros sectores el capital necesario para crear industrias. Se colectivizó la producción agraria forzosamente, eliminando la propiedad privada y obligando a los campesinos a integrarse en granjas colectivas o estatales. Todos los que se resistían o no cumplían con los objetivos eran considerados enemigos del pueblo. Se destruyeron los kulaks (propietarios agrarios acomodados). El Estado controlaba toda la producción, comercialización, precios y salarios. El ritmo de esta colectivización fue rápido, pero el coste fue el gran sacrificio de la población campesina y la reducción de sus cosechas. La hambruna impuso el racionamiento y surgió el mercado negro. Los Planes Quinquenales (de 1928 a 1942) fijaron objetivos y medios para transformar la economía a base del esfuerzo de los trabajadores. El objetivo era potenciar la industria pesada, las construcciones mecánicas, la producción de energía e infraestructuras. La industria de bienes de consumo quedó relegada, provocando escasez y desabastecimiento. En 1939, la URSS era la tercera potencia económica mundial, detrás de Estados Unidos y Alemania.
Centralización Política y Control Social
En 1936, una nueva Constitución definía a la URSS como un estado socialista de obreros y campesinos representados en los soviets. Era un estado federal y democrático, reconociendo diferentes nacionalidades, sufragio universal, división de poderes y derechos a los ciudadanos. Pero la realidad era que los derechos y libertades no existían y el control de todo lo tenía el PCUS. Stalin ejerció un poder absoluto en favor del poder central soviético. Había represión y violencia para frenar a opositores y disidentes y mantener el poder de Stalin.