I. El Proceso de Independencia de las Colonias Americanas

La independencia de las colonias españolas en América se inició con la guerra de Independencia y terminó durante el reinado de Fernando VII. Hacia 1825 España había perdido su imperio colonial, y solo conservaba Cuba, Puerto Rico y Filipinas.

Los principales protagonistas del independentismo fueron los criollos, americanos descendientes de españoles, que solo representaban un 15% de la población, pero controlaban la riqueza de las colonias.

Los factores que propiciaron el movimiento independentista fueron los siguientes:

• Rechazo del monopolio comercial: perjudicaba a productores, comerciantes y consumidores.
• Centralización política: impuesta por los Borbones, desplazó a los criollos de los puestos políticos más influyentes en beneficio de la burocracia peninsular.
• Influencia de la doctrina ilustrada y de la independencia de EE. UU. (1783).
• Debilidad de España: reflejada en la guerra de Independencia, provocó el aislamiento de las colonias americanas respecto a la metrópoli y el colapso del comercio.

Fases del Proceso de Independencia

El proceso de independencia de las colonias americanas atravesó las siguientes fases:

• Primera etapa (1808-1814): en 1808, tras la invasión francesa, en las colonias se formaron Juntas como en la Península. Aprovechando la situación algunas de estas Juntas (Caracas, Buenos Aires) negaron su obediencia a las autoridades peninsulares y promulgaron las primeras declaraciones de independencia. En México, el movimiento del sacerdote Hidalgo, que tuvo un marcado carácter social (fin de la esclavitud y reparto de tierras), fue reprimido. Solo Paraguay (1811) logró independizarse durante esta etapa.
• Segunda etapa (1814-1824): con el restablecimiento del absolutismo en España se produjeron en América múltiples sublevaciones. Fernando VII respondió enviando un ejército de más de 10.000 hombres que en un primer momento restauró el control español sobre el territorio excepto en Argentina, que se independizó en 1816 bajo el liderazgo de José San Martín. Poco después San Martín ayudó a O’Higgins en Chile, que alcanzó la independencia tras la batalla de Chacabuco (1817). El movimiento de liberación se extendió por todo el territorio. Simón Bolívar lideró la independencia de Colombia (batalla de Boyacá), Venezuela y Ecuador, aunque fracasó en su intento de formar la «Gran Colombia», cuyas fronteras hubieran englobado los tres territorios anteriores. Por su parte, Iturbide encabezó la independencia de México (1822) y Centroamérica. Finalmente, el general Sucre lideró la emancipación de Perú (batalla de Ayacucho, 1824) y Bolivia. En 1825 toda la América española era independiente, excepto Cuba y Puerto Rico.

Consecuencias de la Independencia de las Colonias

Para España las consecuencias fueron muy graves:

• Económicas: pérdida del mercado americano para las manufacturas españolas, fin del suministro de materias primas baratas y disminución de ingresos de la Hacienda Real. Todo ello privó a España de mercados y recursos en el momento en que estaba desarrollándose la Revolución Industrial en Europa.
• Políticas: España se convirtió en una potencia secundaria en el plano internacional.

Para América también tuvo importantes consecuencias:

• Fragmentación en 15 repúblicas independientes, fracasados proyectos unitarios como el perseguido por Simón Bolívar (la Gran Colombia). La preeminencia de las figuras militares sobre las civiles en el proceso de independencia facilitó la consolidación de la figura política del caudillo.
• Guerras entre las nuevas naciones por cuestiones territoriales, dada la inexistencia de fronteras previas.
• Predominio sociopolítico y económico de los criollos, que prolongó la marginación de la población indígena, negra o mestiza dando lugar a fuertes conflictos sociales.
• Entrada de Iberoamérica en la órbita comercial de Gran Bretaña y, posteriormente, Estados Unidos.

II. El Legado Español en América

El legado español en América, tras cuatro siglos de continuada presencia en el continente, es muy rico y variado, proporcionando elementos políticos, económicos, sociales y culturales que confieren unidad a la región. La influencia española continúa presente en la actualidad, aunque ha sido moldeada por las culturas locales, dando lugar a una rica diversidad cultural.

Dimensiones del Legado Español

Política:

• Instituciones: aunque la mayoría de los nuevos Estados adoptaron sistemas republicanos de gobierno, muchas instituciones políticas (Cabildos, Audiencias…) se basaron en modelos colonizadores debido tanto a que muchos líderes independentistas se habían formado en la tradición española como a la influencia de la Constitución de 1812.
• Fronteras: pese a algunos conflictos territoriales, los nuevos Estados surgieron sobre la base de las fronteras interiores de los virreinatos (intendencias).

Economía:

• Innovaciones: los españoles introdujeron cultivos (trigo, vid, azúcar), animales (caballo, vaca, oveja) y utillaje (arado, prensa) que transformaron profundamente las actividades agrarias y la alimentación local. Entre las novedades tecnológicas destacan algunas técnicas mineras (amalgamación), las armas de fuego y la navegación oceánica.
• Sistema económico: las economías de exportación iberoamericanas, basadas en la explotación de recursos naturales (productos agrarios y mineros) por una mano de obra barata para su exportación, es herencia del sistema productivo colonial.

Sociedad:

• Idioma: el español es el idioma oficial de la mayoría de los países iberoamericanos, siendo uno de los elementos que mayor unidad confieren a la región.
• Mestizaje: la heterogeneidad de la sociedad iberoamericana es herencia de la colonización, que favoreció el mestizaje a través de los matrimonios mixtos (el 80% de los españoles que migraron eran varones) así como la llegada de población africana (esclavos). La jerarquía social, con una élite minoritaria de origen europeo en la cúspide y una amplia base formada por la población indígena, mestiza y negra es, asimismo, herencia de la colonización.

Religión:

El cristianismo es la religión mayoritaria en el continente como resultado de la labor evangelizadora de los colonizadores a través del sistema de encomiendas y misiones.

Cultura:

• Enseñanza: la veintena de universidades fundadas durante la colonización han influido notablemente en la red actual de centros de formación superior.
• Ciudades: las principales ciudades de la región fueron fundadas por los españoles (Buenos Aires, Lima, La Habana) conforme a un sistema urbanístico de plano ortogonal.
• Arte: España llevó a América los estilos artísticos desarrollados en Europa (Renacimiento, Barroco) dotándolos de una personalidad propia al mezclarlos con tradiciones locales. Esta influencia es especialmente notable en arquitectura, gracias a la construcción de catedrales, iglesias y palacios, algunos de los cuales forman parte del Patrimonio Mundial de la Humanidad.