La Dictadura de Primo de Rivera (1923-1930)

La Dictadura de Primo de Rivera (1923-1930)

Expediente Picasso

Este informe produjo fuertes debates en las Cortes y contó con la oposición del ejército, que quería frenar el asunto puesto que de él podían derivarse responsabilidades de los mandos militares y llegar a implicar a la propia monarquía en el desastre. De esta manera, la cuestión de Marruecos se convirtió en un asunto de crisis política. Pero el expediente no llegó nunca a las Cortes, ya que días antes de que lo hiciese se produjo el golpe de Estado de Primo de Rivera.

Los apoyos sociales

El «golpe» fue aceptado mayoritariamente por la gran masa neutra del país. Este sentimiento fue debido a que la mayoría auguraban un sentimiento de restablecimiento de la nación y del orden.

Anarcosindicalistas y comunistas consideraron el golpe como una amenaza y se dispusieron a defender su existencia. Por otra parte, el Partido Socialista y la UGT manifestaron un sentimiento de aceptación y colaboración.

Además, el golpe de Estado fue posible gracias a la actitud de dos fuerzas: la burguesía y el movimiento obrero. A la burguesía le interesaba la dictadura pues pondría fin al auge de los obreros. Por otra parte, los obreros aceptaron el «golpe» ya que no contaban con una firme conciencia política, por lo que no hubo protestas de ninguna clase.

Reorganización del Estado

Directorio militar

Fue dictatorial debido a que se realizó la suspensión del régimen constitucional, disolución de cámaras legislativas, cese de las autoridades civiles, prohibición de las actividades de los partidos políticos y de los sindicatos, etc. Todo ello además fue acompañado de una militarización del orden público y de una represión del obrerismo más radical (cenetistas y comunistas).

Directorio civil

En esta etapa, Primo de Rivera intentó institucionalizar su régimen con la creación de una Asamblea Nacional Consultiva, creada en 1927, y con la realización de un plebiscito que sometió a votación su política interior y exterior. La asamblea tuvo carácter corporativo y autoritario; estaba compuesta, además, por representantes de las corporaciones elegidos por sufragio indirecto. De esta manera, el sufragio universal quedó totalmente en el olvido.

Política económica y social

Se califica de nacionalista debido a que se combinaron elementos intervencionistas (acentuación de la orientación proteccionista) con un impulso al desarrollo industrial de los sectores de bienes de inversión. Además, el Estado tuvo un protagonismo económico notable gracias al fomento de las obras públicas.

Además, se crearon grandes monopolios como el de teléfonos a la Compañía Telefónica Nacional de España o la distribución y venta de petróleo a CAMPSA. Toda esta política provocó un déficit presupuestario, además de un endeudamiento del Estado.

Primo trató de eliminar la conflictividad social mediante un modelo de regulación del trabajo con la intervención del Estado, la integración de los sectores moderados del movimiento obrero y la represión de las organizaciones más radicales.

Se creó la Organización Corporativa Nacional, que articulaba las relaciones laborales sobre la base de las profesiones, creando comités paritarios que estaban formados en igual número por patrones y obreros. Su misión era la reglamentación de los salarios y de las condiciones de trabajo, así como de la mediación y arbitraje en caso de conflictos laborales. Estos comités encontraron apoyo en la UGT, mientras que la CNT era prohibida.

La oposición a la dictadura

La oposición estuvo compuesta por los antiguos líderes de los partidos turnistas, los republicanos, anárquicos y comunistas, determinados sectores del ejército y casi toda la totalidad de intelectuales.

  • Los antiguos partidos de turno criticaron la excesiva duración del régimen y algunos dirigentes monárquicos participaron en conspiraciones militares como el complot conocido como «la Sanjuanada».
  • Los republicanos organizaron la llamada Alianza Republicana, que logró unir a las diversas facciones del movimiento y desarrollar una amplia campaña propagandística en el exterior.
  • El enfrentamiento de los intelectuales con la Dictadura estuvo protagonizado por figuras como Unamuno, Ortega y Gasset, etc.
  • La CNT se mostró totalmente contraria al régimen, pero internamente se dividió entre los que querían una actitud más violenta y los que promulgaban una más posibilista.
  • También el PSOE cambió cuando se declaró a favor de la república.

La caída del dictador

  • 1930: Primo de Rivera dimite. El general Berenguer es el encargado de sustituirle, pero el prometido retorno a la normalidad constitucional se llevaba a cabo tan lentamente, que la oposición y la opinión pública mostraron su descontento.
  • Agosto de 1930: La oposición comienza a organizarse y los republicanos acordaron la firma del Pacto de San Sebastián, por el que se comprometían a proporcionar una alternativa a la monarquía constituyendo un comité revolucionario que debería convertirse en el gobierno provisional de la futura república.
  • Febrero de 1931: Se constituye el último gobierno de la Monarquía presidido por el almirante Aznar, que asume el compromiso de convocar elecciones.
  • 12 de abril de 1931: Se fijan las elecciones municipales presentándose como un plebiscito a favor o en contra de la Monarquía.

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