1. La URSS y las democracias populares
La URSS: Una superpotencia
Después de la Segunda Guerra Mundial, Stalin mantuvo en la URSS un régimen totalitario y una economía planificada. Tras su muerte en 1953, Nikita Kruschev impulsó reformas liberalizadoras (desestalinización), pero en 1964 le sustituyó Leonid Brezhnev, quien restauró el modelo estalinista hasta 1982. La URSS intentó mantener la hegemonía política, ideológica, militar y económica.
Rasgos de esta etapa:
- Política exterior: Se inicia la difusión de la ideología comunista, sobre todo en Asia.
- Investigación: Se potencia la investigación militar y aeroespacial para competir contra EEUU.
- Economía: Los planes quinquenales favorecen el desarrollo de la industria pesada, la energía nuclear y la construcción (puertos).
- Sociedad: Se alcanza el pleno empleo y se consigue una amplia cobertura social (sanidad). También se avanza en la igualdad de derechos de la mujer.
Estos logros ocultaban una gran crisis que se manifestó en:
- Represión: El estado totalitario reprime la libertad individual y los disidentes seguían siendo enviados a campos de concentración.
- Economía ineficiente: La planificación económica no dio los resultados esperados. Se recurrió a la importación de trigo.
- Industria obsoleta: La industria pesada se quedó anticuada comparándola con Japón y Occidente, y la de bienes de consumo era escasa y poco variada. Los ciudadanos tenían que hacer colas para comprar productos básicos.
Las democracias populares: Europa del Este bajo Stalin
Al igual que en la URSS, el objetivo de estos gobiernos era alcanzar el desarrollo y la igualdad económica entre sus ciudadanos. Las medidas que adoptaron fueron:
- Gobiernos totalitarios: Implantación de gobiernos totalitarios, controlados por los partidos comunistas de cada país. Los demás partidos fueron prohibidos.
- Nacionalización: Nacionalizaron las industrias, los bancos y los transportes, y planificaron la economía.
- Colectivización: Colectivizaron las tierras. Muchos campesinos emigraron a las ciudades donde se convirtieron en obreros industriales.
- Pleno empleo e igualdad social: Alcanzaron el pleno empleo y gran igualdad social, aunque los funcionarios disfrutaban de mejores condiciones de vida que los obreros.
- Sanidad y educación gratuitas: El estado garantizaba la sanidad y la educación gratuitas para todos los ciudadanos.
Europa del Este tras la muerte de Stalin
Tras la muerte de Stalin, los países aliados de la URSS intentaron romper con el modelo soviético debido a la situación en la que se encontraban.
- Sistema totalitario insoportable: El sistema totalitario y el férreo control policial se hacían cada vez más insoportables frente a la libertad de los europeos occidentales.
- Escasez de bienes de consumo: Los bienes de consumo eran escasos porque la planificación económica daba prioridad a la industria pesada.
- Bajo nivel de vida: El desarrollo industrial que se logró en las democracias populares no aumentó el nivel de vida de sus habitantes.
Se intentaron reformas liberales:
- 1953: Huelgas obreras en Berlín Este.
- 1956: Hungría, tras anunciar su retirada del Pacto de Varsovia, fue invadida por el ejército soviético.
- 1968: Checoslovaquia fue invadida por tropas del Pacto de Varsovia, porque intentó implantar medidas liberalizadoras.
- 1980: En Polonia, el sindicato independiente Solidaridad, respaldado por los obreros y la Iglesia, consiguió que el gobierno comunista se debilitara.
2. De la Perestroika a la caída del Muro de Berlín
La Perestroika
En 1985, Mijaíl Gorbachov fue elegido secretario del Partido Comunista, máximo dirigente de la URSS. Gorbachov recibió un estado ineficaz con una gran burocracia improductiva y una economía estancada. Intentó reformar el sistema soviético con un cambio llamado Perestroika. Apostó por la democratización del sistema político, el debilitamiento de la colectivización agrícola y la creación de empresas privadas. Otra reforma fue la Glasnost (apertura) que, para reducir los gastos militares, negoció con EEUU tratados de desarme nuclear.
Gorbachov tuvo que afrontar los siguientes problemas:
- Accidente de Chernóbil: El gravísimo accidente de la central nuclear de Chernóbil (Ucrania) en 1986, que puso de manifiesto la anticuada tecnología soviética.
- Revoluciones democráticas: Las revoluciones democráticas de 1989 en los países de Europa central y oriental, donde el ejército soviético comenzó a retirarse.
- Crisis política interna: Las reformas eran lentas e insuficientes para los reformistas, mientras que los comunistas radicales se negaban a permitir cualquier cambio.
- Independencia de repúblicas: Algunas repúblicas de la URSS se rebelaron y reclamaron su independencia, como Estonia, Letonia y Lituania en 1990.
La crítica situación desembocó en agosto de 1991 en un golpe de estado comunista. Los golpistas retuvieron a Gorbachov en su residencia de Crimea y, cuando intentaron hacerse con el poder del país, Boris Yeltsin tomó el control de la situación. El golpe de estado fracasó.
3. China: El comunismo asiático
La revolución comunista
En 1911 se produjo una revolución nacionalista en China, dirigida por Sun Yat-sen, líder del partido nacionalista, que puso fin al régimen imperial y proclamó la república en 1912. Desde la década de 1920 hubo una guerra civil, en varias etapas, entre los nacionalistas, dirigidos por Chiang Kai-shek, y los comunistas de Mao Zedong. Estos obtuvieron la victoria en 1949 y Mao fue proclamado presidente de la república. El país se convirtió en un estado comunista apoyado por la URSS, con la que se enfrentó más tarde. Chiang Kai-shek se instaló en la isla de Formosa (Taiwán) y formó un estado: la China nacionalista.
En economía, la revolución impulsada por Mao se basó en el desarrollo agrario e industrial a través de un plan llamado Gran Salto Adelante. A mediados de 1960, Mao Zedong emprendió una campaña llamada Revolución Cultural, dirigida contra los intelectuales y críticos del Partido Comunista. La campaña terminó con el encarcelamiento y muerte de muchas personas.
4. Europa central y oriental. La CEI y la Federación Rusa
A comienzos de la década de 1990, bajo los gobiernos de Gorbachov y Yeltsin, se produjeron en la URSS acontecimientos como la independencia de las repúblicas bálticas y la ilegalización del Partido Comunista. La URSS fue sustituida por la Comunidad de Estados Independientes (CEI) y la Federación Rusa, una república creada en diciembre de 1991, compuesta por Rusia y un conjunto de repúblicas.
A partir de 1992, con los presidentes Boris Yeltsin y luego Vladimir Putin, Rusia vivió una serie de cambios:
- Política: Se inició la implantación de la democracia, pero también se produjeron reivindicaciones nacionalistas (guerra de Chechenia).
- Política exterior: Rusia se aproximó a Occidente, aunque tuvo problemas por sus intentos de rearme y su oposición al despliegue de misiles estadounidenses en Polonia y la República Checa, así como a la independencia de Kosovo.