La Guerra Hispanoamericana: El Fin del Imperio Español

Contexto

El contexto de la Guerra Hispanoamericana se enmarca en el largo periodo de la Restauración, que se prolongó desde el reinado de Alfonso XII (1875-1885) hasta el reinado de Alfonso XIII (1902-1923). Durante este periodo, España experimentó una relativa estabilidad política, pero el sistema estaba viciado y presentaba fisuras que acabarían por hacerlo inviable.

La Importancia de Cuba

Cuba era una colonia española de gran importancia económica, ya que era un gran exportador mundial de caña de azúcar, café y tabaco. España mantenía en Cuba un mercado cautivo protegido por altos aranceles, lo que molestaba a los Estados Unidos, partidarios del libre comercio. Además, los criollos cubanos demandaban autonomía, representación en las Cortes de Madrid, abolición de la esclavitud y libertad de comercio.

El Conflicto de Cuba

El primer brote de insurgencia en Cuba se produjo en 1868, dando lugar a la Guerra de los 10 Años (1868-1878). La guerra terminó con la Paz de Zanjón y promesas que se cumplirían muy tardíamente, como la abolición de la esclavitud (1886) y la autonomía para la isla (1897).

La insurrección resurgió con fuerza en 1895, dando lugar a la recta final del conflicto (1895-1898). El independentismo era la opinión mayoritaria de la población cubana, acaudillada por José Martí, fundador del Partido Revolucionario Cubano.

En 1895, España envió a Cuba al general Martínez Campos y, posteriormente, al general Weyler, de talante represivo. El giro del gobierno en 1897, a favor de un compromiso de cesión de autonomía a la isla, llegó demasiado tarde.

La Explosión del Maine y la Guerra

La explosión del acorazado Maine en el puerto de La Habana (febrero de 1898) decidió la declaración de guerra a España por parte de los Estados Unidos (abril de 1898). Aunque la guerra tuvo escenarios terrestres, se decidió en el mar, en combates desiguales: batalla de Cavite (mayo de 1898) y batalla del puerto de Santiago de Cuba (julio de 1898).

El Tratado de París

El Tratado de París (1898) puso fin a la guerra y al imperio ultramarino español. España perdió Cuba, Puerto Rico, Filipinas y Guam.

Consecuencias de la Guerra y del Tratado de París

Humanas

Unas 32.000 víctimas españolas.

Económicas

Fin del mercado colonial. Repatriación de capitales americanos.

Políticas

La Restauración prosigue, pero con un sistema cada vez más cuestionado. Se plantea crear un nuevo pequeño imperio colonial en África para recuperar el prestigio perdido.

Morales

Honda frustración por la imagen de debilidad de España. Nacimiento del»problema de Españ» y la Generación del 98.

Militares

El ejército y la armada españoles quedaron dañados por estos fracasos. Nacimiento de un sentimiento militar corporativista enfrentado al sistema político.

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