La Primera República Española (1873-1874)
Tras la abdicación de Amadeo I, las Cortes, el Congreso y el Senado, votaron la constitución de una república. El presidente fue Figueras. La falta de políticos convencidos del republicanismo y la desconfianza fueron un problema de importancia. La república tenía en contra a los políticos autoritarios y conservadores, a la jerarquía eclesiástica y a los carlistas.
Las juntas quisieron poner fin a los ayuntamientos gobernados por monárquicos. Los jornaleros del sur pedían el reparto de los latifundios. En Cataluña, se intentó crear un Estado que se incluyera dentro de la República Federal Española. Este se manifestó además en Galicia y Levante. Con Pi i Margal se llegó a redactar un proyecto de Constitución federal, que organizaba a España en 17 estados.
Entre la tercera guerra carlista y la guerra de Cuba, la consolidación de la República era imposible. Se sucedieron cuatro presidentes: Figueras, Pi i Margal, Nicolás Salmerón y Emilio Castelar. Ninguno consiguió hacerse con las riendas del poder. Finalmente, Manuel Pavía, entregó el poder al general Francisco Serrano y gobernó durante un año hasta la restauración monárquica.
La Restauración Borbónica: El Reinado de Alfonso XII
Muere Alfonso XII y es designada regente su esposa, Mª Cristina. El primer turno fue liberal. La ley de Jurados establecía la independencia del poder judicial, la ley del sufragio universal (ampliaba el derecho a voto a todos los varones mayores de 25 años). A partir de 1890, el presidente de Gobierno era Cánovas o Sagasta, pero presentaron la dimisión a la reina regente por acusaciones o problemas de disensiones en el partido.
Cuando Cuba estaba otra vez en plena insurrección por la independencia, Cánovas fue asesinado. Sagasta volvió al poder y se encargó de asumir la derrota española en Cuba de 1898. La pacificación de Cuba no fue un éxito. En 1878 se firmó la Paz de Zanjón, en la que se concedía a los cubanos los mismos derechos que a los españoles.
El Carlismo
El carlismo estuvo dividido en dos ramas:
- INTRANSIGENTE (representaban los intereses dinásticos de don Carlos. Nocedal combatió contra el régimen liberal de la restauración y contra los católicos que colaboraban con él).
- TRANSIGENTE (colaboraron con el régimen).
Esta división se acentúa cuando el hijo de Nocedal se pasa a la derecha.
El Republicanismo
Emilio Castelar formó un partido republicano conservador con la intención de participar en el sistema político. Cuando Sagasta legisló a favor del sufragio universal y del jurado, Castelar disolvió su partido por entender que se habían conseguido sus objetivos políticos. Pi i Margall se opuso al sistema impulsando el Partido Republicano Federal. Organizó una corriente republicana que practicó la conspiración. Pero el núcleo más eficiente se agrupó bajo el liderazgo de Nicolás Salmerón (diputado en 1883).
El Auge del Nacionalismo
Por otra parte, fue surgiendo la Renaixença. El carlismo y el federalismo están en los orígenes del catalanismo. Tras la caída de la República y la derrota del carlismo se desarrolló un regionalismo prenacionalista que se puede denominar catalanismo político.
Almirall fue el creador del catalanismo «moderno» para unificar las distintas posiciones de las burguesías. Defendía el respeto y el fomento de las costumbres tradicionales de las comarcas forales. Fundó en 1882 el Centre Catalá. En 1887, los conservadores fundaron la Liga de Catalunya. En 1891, el Centre y la Liga se fundieron en la Unión Catalanista. Se redactaron las bases de Manresa.
El Nacionalismo Vasco
El nacionalismo vasco surgió a partir de la defensa de los fueros, y sus bases eran el clero, el campesinado y la burguesía. La abolición de los fueros generó una sensación de derrota. Los perdedores de la guerra carlista soñaban con un País Vasco agrario. El propulsor, Sabino Arana, formuló que para el pueblo vasco recuperar los fueros totales era recuperar la soberanía y la independencia. El lema nacionalista era Dios y ley vieja=fueros y tradiciones.
En 1895 se fundó el PNV, que no evolucionó hasta el ingreso de De la Sota. Entonces apareció tensión entre los defensores de la independencia y los que buscaban la autonomía. Se impusieron en el control del PNV copiando la idea de rehacer España. El PNV comenzó a tener ciertos éxitos.
Otros Nacionalismos
En Galicia, se creó el embrión del galleguismo. En Andalucía y en Valencia surgieron formas de autogobierno.
La Crisis del 98: La Pérdida de las Colonias
A finales del s. XIX, las Guerras de Ultramar supusieron la pérdida de Cuba, Puerto Rico y Filipinas. Los partidos dinásticos apoyaban las guerras coloniales y los anarquistas, nacionalistas y socialistas las rechazaban.
La primera guerra de Cuba terminó con el Convenio de Zanjón. El retraso en aplicar medidas de este convenio provocó un nuevo levantamiento en 1895, dirigido por José Martí, quien contó con el apoyo masivo de la población negra y mulata. El gobierno español empleó una dura represión: las reconcentraciones. El triunfo se debió a la intervención militar del ejército de EEUU, que destruyó la armada española, con la excusa del supuesto hundimiento del Maine.
En 1896 se produjo la insurrección de Filipinas. El gobierno español empleó una represión brutal: fusilamiento de José Rizal. Consiguieron la independencia con ayuda de EEUU, tras la derrota española en Cavite.
España firmó la paz de París en 1898. España reconocía la independencia de Cuba, el protectorado estadounidense sobre Puerto Rico y Filipinas y entregaba Guam a EEUU. En 1899, España vendía a Alemania las islas Carolinas y Marianas. Las causas de la pérdida del imperio español de ultramar fueron la falta de apoyos internacionales y la tardía adopción de medidas autonomistas.
Las consecuencias de la crisis del 98 fueron la pérdida de materias primas baratas, el proteccionismo económico, que Antonio Maura y José Canalejas terminaran asumiendo algunas propuestas regeneracionistas, el comienzo del colonialismo en el norte de África, la aparición del antiamericanismo…
El Movimiento Obrero
Los obreros aportaban pequeñas cantidades de dinero para socorrer a compañeros que no podían trabajar con el derecho de asociación. Se creó una organización de asociaciones de ayuda mutua, dirigida por la Junta Central de Directores de la Clase Obrera. La Revolución de 1868 supuso la restauración de las libertades de expresión y de asociación. El anarquismo tuvo gran importancia en Cataluña y Andalucía basado en la libertad absoluta y en la bondad de la sociedad libre como obra de la naturaleza. Sin embargo, no se sabía con exactitud el número de afiliados. El propagador del anarquismo en España fue Anselmo Lorenzo. Se extendió en Andalucía el anarquismo revolucionario y, en 1883 estalló el asunto de la «Mano Negra».