Causas de la Revolución de 1868
Diversos factores confluyeron para desencadenar la Revolución de 1868:
- Crisis financiera internacional (1866): El hundimiento de la bolsa y la paralización ferroviaria provocaron la quiebra de bancos y empresas, poniendo fin a una etapa de prosperidad económica.
- Crisis industrial: La escasez y el alto precio del algodón afectaron especialmente a Cataluña.
- Crisis de subsistencias: Las malas cosechas de 1866-67 generaron descontento popular, favoreciendo a los partidos de izquierda.
- Agotamiento del régimen político moderado: La corrupción y el desprecio al sistema parlamentario por parte de los moderados generaron rechazo.
- Pacto de Ostende: Progresistas y demócratas, ante la imposibilidad de acceder al poder por vías legales, optaron por la vía revolucionaria.
- Problema universitario: Profesores demócratas y republicanos, como Castelar, criticaban a la reina Isabel II.
Desarrollo de la Revolución
La revolución comenzó con el pronunciamiento de la Armada en Cádiz, liderada por Topete, y el apoyo del ejército con los generales Prim y Serrano. Se formaron juntas revolucionarias que se extendieron por toda España. El gobierno provisional, presidido por Serrano, incluyó a unionistas y progresistas. Se implementaron medidas como la expulsión de los jesuitas, la reforma económica de Figuerola (creación de la peseta, legislación minera y arancel librecambista) y el sufragio universal.
La I República
Las elecciones de 1869 dieron la victoria a la coalición antiborbónica. Figueras fue nombrado presidente, pero enfrentó problemas como la guerra carlista, la situación en Cuba y la tensión revolucionaria. Pi y Margall le sucedió, pero surgieron discrepancias entre republicanos federales (transigentes e intransigentes). La revolución cantonal, con un carácter regionalista, político y social, se extendió. Pi y Margall dimitió, seguido por Salmerón. Castelar asumió la presidencia, buscando restablecer el orden. El golpe de Estado del general Pavía en 1874 disolvió las Cortes. Serrano formó un nuevo gobierno, poniendo fin a la República.
La Restauración
Durante 1874, Serrano restableció el orden público, pero carecía de apoyo social. La causa de Alfonso XII, hijo de Isabel II, promovida por Cánovas del Castillo, ganó fuerza. El pronunciamiento de Martínez Campos en Sagunto (1874) a favor de la monarquía borbónica culminó con la Restauración en 1875.