La Segunda República Española: Constitución, Reformas y Crisis

Segunda República. La Constitución de 1931

La Proclamación de la República y las Primeras Reformas

Después de la dictadura de Primo de Rivera, Alfonso XIII nombró a Berenguer como jefe de gobierno para restablecer la normalidad constitucional. Sin embargo, la situación había cambiado. En 1930, los republicanos firmaron el Pacto de San Sebastián para instaurar la República. En octubre, los socialistas se unieron al levantamiento militar.

Hubo dos intentos de pronunciamientos militares que fracasaron en Jaca y Cuatro Vientos. Berenguer se mantuvo al margen para elaborar un encasillado electoral. Pero los dirigentes de los partidos se negaron a presentar candidaturas y Berenguer dimitió.

Se formó un gobierno presidido por Aznar, que convocó elecciones municipales el 12 de abril. Los resultados fueron favorables a los monárquicos gracias al control que ejercían los caciques en las zonas rurales, pero los republicanos triunfaron en las ciudades importantes donde no había caciques. La Segunda República fue proclamada el 14 de abril. El Comité Revolucionario del Pacto de San Sebastián se convirtió en el gobierno provisional, presidido por Alcalá Zamora y formado por partidos republicanos y personas como Lerroux, Azaña, Marcelino Domingo, Indalecio Prieto y Largo Caballero.

El gobierno convocó elecciones y acometió profundas reformas.

Pero esto trajo consigo conflictos. El más grave fue con la Iglesia católica. La Iglesia se posicionó a favor de la monarquía y los extremistas de izquierda procedieron a quemar iglesias y conventos. Las consecuencias fueron desastrosas.

La Constitución de 1931

Para consolidar la República era necesario un documento que la acreditara. La consulta a las Cortes Constituyentes el 28 de junio de 1931 ratificó el triunfo de la coalición de republicanos y socialistas.

Las Cortes iniciaron su labor en 1931 presididas por Julián Besteiro, quien encomendó a una Comisión de juristas que dio paso a una Comisión constitucional que realizó una ingente labor y presentó un proyecto que concluyó el 1 de diciembre. La cuestión religiosa y los debates en pleno provocaron encendidas discusiones. La Constitución fue aprobada el 9 de diciembre de 1931.

Esta Constitución tuvo un carácter democrático y progresista. Reconoció el derecho de voto de las mujeres, el matrimonio civil y el divorcio. Consagró el derecho a la educación primaria obligatoria y gratuita. Estableció una radical división de poderes. El poder legislativo residía en las Cortes, el poder ejecutivo residía en el Consejo de Ministros y el Presidente de la República, y la justicia se basaba en la autonomía e independencia de los jueces y tribunales.

La Constitución tomó como modelo Austria y Alemania. Es un reflejo de los avances políticos y jurídicos, de signo liberal y progresista.

El Bienio Reformista (1931-1933)

Después de su aprobación, Alcalá Zamora fue elegido presidente con el apoyo de la coalición republicano-socialista. Este encargó a Azaña formar gobierno, pero la amplia coalición de todos los sectores del gobierno provisional no se mantuvo porque el Partido Radical rechazó permanecer si los socialistas permanecían.

La instauración de la República coincidió con la crisis mundial de 1929. El comercio exterior descendió. Los problemas se debieron a los problemas tradicionales como la falta de inversión, y esta evolución económica negativa dificultó las reformas y aumentó la conflictividad social.

Las reformas que se tomaron fueron:

  • Política religiosa: La República aprobó una serie de leyes que aumentaron la beligerancia de la Iglesia contra ella: la Ley de Divorcio y la Ley de Confesiones y Congregaciones, por la que el Estado no hacía aportaciones a la Iglesia. La inmensa mayoría de la jerarquía católica manifestó su antagonismo hacia la República y movilizó a la opinión pública, lo que provocó anticlericalismo en las clases populares.
  • Reformas sociales: Largo Caballero desarrolló una serie de leyes en el terreno laboral que provocaron la hostilidad de los propietarios, ya que mejoraban las condiciones de trabajo del proletariado rural.
  • Reformas educativas y culturales: Las que tuvieron mayor alcance por su agilidad y esfuerzo en su aplicación, aumentando el presupuesto hasta en un 50%. Se intentó construir una escuela mixta, laica, obligatoria y gratuita. Hay que resaltar la labor de intelectuales y artistas.
  • Reformas de organización territorial: La Constitución reconocía el derecho a la autonomía de las regiones españolas. En Cataluña se reconoció un gobierno autonómico. Una Comisión quedó encargada de redactar un Estatuto, pero ciertos sectores retrasaron su aprobación. Las instituciones autonómicas recibieron competencias exclusivas en derecho civil y régimen administrativo, en red secundaria de transporte, sanidad y servicios sociales. En el País Vasco no se aprobó el Estatuto.
  • Reforma del ejército: Se redujeron los efectivos militares y se suprimió la macrocefalia. Para ello se fijó la Ley de retiro de oficialidad y se redujo el número de unidades y oficiales, se cerró la Academia Militar de Zaragoza y se intentó racionalizar los ascensos y escalas. Esto provocó tensiones internas en el ejército.
  • Reforma agraria: Proyecto de mayor envergadura para la República por el papel que desempeñaba en la economía. Para ello se impusieron decretos que intentaban proteger a los campesinos de la tierra y a los arrendatarios. La Ley de Reforma Agraria establecía: expropiación de tierras sin derecho a indemnizar a los Grandes de España y expropiación de tierras con indemnización a todas las restantes. Los resultados de la reforma fueron un fracaso que aumentó la tensión social.

Estas reformas provocaron un aumento de la conflictividad social y la reorganización de las derechas. Las huelgas, insurrecciones y ocupaciones de tierras fueron en aumento progresivo, y el momento más delicado de la República fue la sublevación de Casas Viejas (1933), que minó la credibilidad del gobierno y fue el motivo de su caída.

Mientras tanto, las fuerzas conservadoras se organizaban. En 1933 aparece Renovación Española (Calvo Sotelo), un partido antirrepublicano que aspiraba a la vuelta de la monarquía. En 1932, Sanjurjo hizo un golpe de estado que fracasó, y en 1933, José Antonio Primo de Rivera fundó Falange Española, a la que se unirían las JONS.

Otros sectores optaron por la vía pacífica para conquistar la República electoralmente, y en 1933 se creó la CEDA (José María Gil Robles), que aglutinaría la mayor parte del electorado conservador.

En 1933, Azaña dimitió y se convocaron nuevas elecciones, donde el Partido Radical hizo pactos según le convenía y la derecha se mantuvo en unidad. Ganaron las derechas y Lerroux conformó un ejecutivo sin miembros de la CEDA.

El Bienio Radical-Cedista (1933-1936)

Se caracterizó por la revisión de las reformas del periodo anterior. Al principio lentamente, pero después de forma decisiva. Se mejoraron las relaciones con la Iglesia y el ejército, y aumentaron las tensiones con los sectores obreros y nacionalistas. La inestabilidad política estuvo provocada por:

* Las cuestiones religiosas (sueldos del clero…) * Amnistía a los participantes de la sanjurgada o promoción de militares de dudosa lealtad a la República * Cuestión agraria, donde los propietarios vieron satisfechas sus reivindicaciones sobre jornaleros y arrendatarios * Paralización del Estatuto de autonomía para el País Vasco

Entre 1933-34, Lerroux conformó tres gobiernos y dimitió, encargándole a Alcalá Zamora la formación de gobierno a Samper.

Tras las tensiones en el gobierno, el 5 de octubre de 1934 estalló una huelga general en España convocada por el Comité revolucionario (Largo Caballero). Fracasó en casi todo el país. El gobierno de Madrid envió a la Legión para reprimir el movimiento revolucionario de Cataluña y Asturias.

La revolución de 1934 originó una nueva crisis en el gobierno radical-cedista, y Lerroux tuvo que acceder a formar gobierno con algunos ministros de la CEDA. Finalmente, las Cortes se disolvieron por la crisis del Partido Radical y se convocaron nuevas elecciones el 16 de febrero deiones el 16 de febrero de 1936 en las que el Frente Popular obtiene una amplia mayoría. 5.EL FRENTE POPULAR (FEBRERO-JULIO 1936): después de elecciones Azaña es encargado de formar gobierno y organiza un gabinete con republicanos de izquierda. En mayo Azaña es elegido presidente de La República y la Jefatura de Gobierno recae en Santiago Casares. // El Gobierno comienza a poner en práctica el programa electoral restableciendo el Estatuto de Cataluña y el Estatuto Vasco esta de nuevo en Cortes. // El problema más serio al que se enfrentó este gobierno fue la crisis económica pues muchos propietarios abandonaron empresas y evadieron capitales fuera del país. // Los partidos con mayor representación en Cortes fueron PSOE Y CEDA que contribuyeron a inestibilidad de República. // El lider de derecha es Calvo Sotelo, que protagoniza enfrentamiento con oposición en Congreso. El orden público es el problema más grave del Gobierno con numerosas manifestaciones. Se asesinó a lideres de los extremos (Jose del Castillo y Calvo Sotelo) y la conspiración militar que se estaba organizando por el triunfo del Frente Popular se adelanta por esto. // Algunos militares preparan una rebelión y el gobierno que sabía de esto mando a los generales provocadores lejos de Madrid. Mola elaboró un plan que consistía en la sublevación simultánea de las guarniciones del país, acompañada de represión. El fracaso de la rebelión militar en la mayoria de grandes ciudades derivó en una guerra civil que duraría 3 años. 

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