La II República es la etapa más crucial de la historia contemporánea de España. En su período emergieron de manera diáfana y abierta todos los conflictos, todas las frustraciones históricas y todos los graves problemas que dividían al país. Apareció como una oportunidad para democratizar y modernizar el Estado mediante reformas económicas y sociales. La tensión social aumentó, lo que desembocó en la sublevación militar que dio origen a la Guerra Civil. La Segunda República se divide en tres etapas: entre 1931 y 1933, la República de izquierdas, programó la realización de profundas reformas sociales; entre 1934 y 1936, la República de derechas, frenó gran parte de las reformas del bienio anterior; y las elecciones de 1936 inauguraron el periodo de gobierno del Frente Popular.
El Nacimiento de la Segunda República
El rey encargó a Berenguer la formación de un nuevo Gobierno, consideró que la salida era la vuelta a la constitución anterior a la dictadura sirviéndose de unas Cortes ordinarias y surge así la Dictablanda. Todos los partidos solicitaron la formación de unas Cortes Constituyentes y las fuerzas políticas formularon un programa de acción conjunta con la izquierda catalana y con el Partido Socialista y constituir un comité revolucionario. El Gobierno Berenguer logró controlar la sublevación militar. Un nuevo Gobierno presidido por Aznar decidió celebrar elecciones municipales. La mujer aún no tenía derecho al voto. Las candidaturas republicanas habían vencido en las grandes ciudades, los republicanos consideraron que la obtención del voto urbano era un triunfo definitivo.
El día 13 el conde de Romanones aconseja al rey que salga de España; el día 14 de abril, los miembros del Comité Revolucionario se dirigen al Ministerio de la Gobernación donde son aclamados por la multitud que vitorea la Segunda República Española. Fue recibida con entusiasmo, debía regenerar y modernizar España de manera legal.
El Comité Revolucionario se convirtió en Gobierno provisional, presidido por Niceto Alcalá Zamora, sería la derecha; el centro los radicales de Alejandro Lerroux y los radicales-socialistas de Marcelino Domingo; la izquierda, ocupada por los socialistas, como Francisco Largo Caballero y por la Alianza Republicana de Manuel Azaña, fuera del poder quedaban los comunistas y los anarquistas.
El cambio de régimen vino a significar el paso del poder de la aristocracia terrateniente y de la alta burguesía a los representantes de las clases medias. El Gobierno Provisional tendría como objetivo convocar elecciones a Cortes constituyentes, estableció en el campo la jornada laboral de ocho horas y en educación, se autorizó la construcción de escuelas y oposiciones para maestros.
Los problemas no tardaron en llegar. En Cataluña Maciá proclamó ilegalmente la República Catalana; el anticlericalismo dio lugar a la quema de conventos y hubo un creciente aumento de huelgas.
El Sistema Político y las Fuerzas Políticas
Los elementos fundamentales del sistema político son los partidos políticos y la Constitución de 1931.
Fuerzas Políticas
Entre las fuerzas políticas encontramos los grupos fascistas (JONS y falange), fuerzas políticas de derecha como carlistas (monárquicos tradicionalistas); renovación española, monárquicos alfonsinos, sus características inspiraron al Estado franquista. Otra fuerza política de derecha es la CEDA, los puntos básicos en su programa político eran el conservadurismo y la defensa de la Iglesia católica, la educación religiosa, el Ejército y la familia. Como centro político, el partido republicano radical, la defensa del orden, el temor al movimiento obrero revolucionario y la voluntad de frenar cualquier reforma socioeconómica eran sus señas ideológicas, Alejandro Lerroux era su líder. En los grupos de izquierda, la ACCIÓN REPUBLICANA, este partido progresista y pacifista repudiaba todo extremismo, alcanzó acuerdos políticos con el PSOE para impulsar un programa de reformas, su principal dirigente era Manuel Azaña. Recibía el apoyo electoral de las clases medias de las grandes ciudades, estos partidos se fusionaron formando la IZQUIERDA REPUBLICANA.
En los partidos proletarios, destaca el PSOE, uno de sus máximos dirigentes fue Francisco Largo Caballero. Existían dos grandes corrientes, la izquierda, liderada por Largo Caballero y la derecha, representada por Prieto. Encontramos también el PCE (comunista) y los anarquistas.
Entre los partidos nacionalistas y regionalistas, encontramos el partido nacionalista vasco, (conservador y católico), el partido galeguista, la lliga catalana y la Esquerra republicana de Cataluña.