Los Reinos Cristianos en la Edad Media: Reconquista, Repoblación y Cultura

1. Los Reinos Cristianos en la Edad Media: Los Primeros Núcleos de Resistencia

Los reinos cristianos aparecieron y se consolidaron entre los siglos VIII y X en las zonas que los musulmanes no llegaron a conquistar tras la derrota de Covadonga (Cordillera Cantábrica y Pirineos). Desde allí, iniciaron la Reconquista hacia el sur. No fue un avance coordinado, ni tuvieron un objetivo común, aunque se desarrollaron alianzas de diversa índole y se produjeron frecuentes luchas internas.

1.1. Reino de Asturias

Don Pelayo fue proclamado rey por los astures en el año 718. Éste reivindicó la herencia visigoda y extendió su poder a Galicia y al País Vasco. Más tarde, en el año 910, Alfonso III trasladó la capital a León, transformándose el reino de Asturias en reino de León. Este abarcaba el noroeste peninsular y tenía por fronteras las de Castilla y Portugal (independizada por Enrique de Borgoña en 1109).

1.2. Condado de Castilla

Independiente desde el año 930, Fernán González fue su primer conde. En el año 951, Castilla quedó definitivamente vinculada a su familia.

1.3. Reino de Navarra

En el año 824, Íñigo Arista era reconocido rey de Pamplona. El reino de Navarra se consolidó durante el siglo X e inició su expansión por La Rioja. Sancho III el Mayor convirtió el reino de Navarra en el más poderoso de los reinos cristianos.

1.4. Reino de Aragón

El reino de Aragón, cuyo primer rey fue Ramiro I, nace tras la muerte de Sancho III de Navarra, reino al que, a finales del siglo X, se habían incorporado los condados aragoneses de Sobrarbe y Ribagorza.

1.5. Condados Catalanes

Formaban parte de la «Marca Hispánica» carolingia. Wifredo el Velloso y Borrell II, en los siglos IX y X, consolidaron de hecho estos condados y su independencia con respecto al reino de Francia. El condado más importante era el de Barcelona.

2. Los Reinos Cristianos en la Edad Media: Principales Etapas de la Reconquista

Las principales causas de la expansión territorial de los reinos cristianos hacia el sur fueron: la presión demográfica, la difusión de las instituciones feudales, la búsqueda de botín y el espíritu de cruzada.

2.1. Etapas de la Reconquista

2.1.1. Siglos VIII al X

Avance de los cristianos sobre territorios casi despoblados como el valle del Duero y la plana de Vic. Este avance se vio frenado en el siglo X por la creación del Califato de Córdoba y por la necesidad de repoblar y consolidar las tierras ya conquistadas.

2.1.2. Siglos XI al XIII

Durante estos siglos se produjo el gran avance conquistador.

En el siglo XI y primera mitad del XII, el avance se produce contra los reinos de taifas y los almorávides. Los reinos de León y Castilla ocuparon el Tajo, con la conquista de Toledo en 1085 por Alfonso VI. El valle del Ebro era ocupado por el reino de Aragón (Zaragoza en 1118 por Alfonso I el Batallador) y los Condados catalanes (Tortosa en 1148 por Ramón Berenguer IV). Portugal, independiente desde 1143, conquista Lisboa en 1147.

  • Entre 1150 y 1212 se conquistó el curso medio del río Guadiana (hasta Badajoz) y los cursos altos del Turia y del Júcar. El reino de León se expandió por Extremadura, el de Castilla por la submeseta sur (Castilla-La Mancha) y el de Aragón por Teruel. Los reinos de Castilla y Aragón delimitaron sus áreas de expansión en el Tratado de Cazorla (1179).
  • En el siglo XIII el reino de Castilla reconquistó el valle del Guadalquivir y Murcia. Alfonso VIII derrotó a los almohades en las Navas de Tolosa (1212) y Fernando III el Santo tomó Sevilla en 1248. Los ejércitos de la Corona de Aragón conquistaron el reino de Valencia y Baleares. La ciudad de Valencia fue tomada por Jaime I el Conquistador en 1236.

Al-Ándalus quedaba así reducido al reino de Granada, cuya conquista lograron los Reyes Católicos en 1492.

3. Los Reinos Cristianos en la Edad Media: Las Formas de Ocupación del Territorio y su Influencia en la Estructura de la Propiedad. Modelos de Repoblación y Organización Social

Los reinos cristianos en sus comienzos constituían una sociedad fundamentalmente rural, muy atrasada económicamente, poco romanizada y muy dependiente de Al-Ándalus.

Se conoce como repoblación el proceso de ocupación y colonización cristiana de las tierras reconquistadas. Los modelos de repoblación condicionaron la propiedad de la tierra y fueron los siguientes:

3.1. Presura

Consistía en la ocupación de tierras sin dueño reconocido. Nobles y monjes crearon señoríos con campesinos colonos, en torno a castillos y monasterios. En las zonas más peligrosas (Castilla) se permitió a los campesinos ocupar tierras como hombres libres. Esta ocupación del territorio se vio favorecida durante los siglos IX y X en el valle del Duero.

3.2. Concejil

Consistía en la creación de concejos o núcleos de población que recibían un amplio término municipal o alfoz, con milicias que se encargaban de defender y repoblar la frontera, como en el caso de Ávila. Los reyes concedieron fueros y cartas pueblas, que reconocían privilegios y libertades a los potenciales pobladores con objeto de favorecer la repoblación. Esta forma de repoblación se dio durante el siglo XI entre los ríos Duero y Tajo.

3.3. Órdenes Militares

Dividían la tierra en encomiendas al frente de las cuales se situaba un caballero de la Orden, con título de «comendador». La estructura de propiedad predominante fue el latifundio, dedicado a la ganadería por la abundancia de terreno y la falta de mano de obra. Esta forma de repoblación predominó durante la primera mitad del siglo XIII en la submeseta sur, Aragón y bajo Ebro.

3.4. Repartimiento

Consistía en el reparto de los bienes obtenidos en una conquista entre quienes habían participado en la misma. El lote repartido se llamaba donadío. Su tamaño y valor estaba en función del rango social del receptor. El resultado fue la aparición de grandes latifundios, en manos de la nobleza, el clero y las Órdenes Militares. Esta forma de repoblación fue mayoritaria durante la segunda mitad del siglo XIII en el valle del Guadalquivir y el litoral levantino.

3.5. Organización Social

Entre los siglos XI y XIII se produce un relativo proceso de feudalización, con una monarquía débil con una Corte itinerante y unos sectores privilegiados (nobleza y clero) que poseían ejército propio, tierras y aldeas. Los no privilegiados (labriegos, casados y caballeros villanos) se dedicaban fundamentalmente a la agricultura y ganadería mediante una economía de subsistencia. Las escasas ciudades son pequeñas y fundamentalmente con funciones militares y administrativas.

  • A partir del siglo XIII: continúa la estructura jerárquica pero con menor carácter feudal, más bien señorial, produciéndose un importante crecimiento demográfico que depara un modesto crecimiento de las ciudades por incorporación de las islámicas conquistadas y por influencia del Camino de Santiago. La aparición de artesanos y comerciantes (burgueses) conlleva una mayor dinamización del comercio a través de una extensión de la monetarización y de las ferias y mercados.

A la vez, se genera un aumento de la propiedad y del poder en la nobleza guerrera y de la Iglesia en perjuicio de los campesinos siervos, que se convierten en arrendatarios, aparceros o jornaleros.

4. Diversidad Cultural en los Reinos Cristianos en la Edad Media: Cristianos, Musulmanes y Judíos

Los hechos culturales más importantes fueron:

  • Analfabetismo generalizado en los reinos cristianos.
  • El cristianismo como ideología dominante; la Iglesia es el centro de las actividades intelectuales y la creación literaria.
  • Los estilos artísticos llegan a la Península Ibérica a través del Camino de Santiago.
  • Copia de libros en los monasterios, como labor cultural más importante.
  • Influencia cultural mozárabe en el área occidental y carolingia en el Pirineo oriental.
  • El latín es el idioma culto y oficial, mientras que a partir del siglo XI comienza la difusión de las lenguas romances, primero entre la población y más tarde en la producción literaria.
  • La Península se convierte en el puente cultural entre Europa occidental y el mundo islámico.
  • Traducción de textos científicos y filosóficos griegos, árabes y hebreos al latín y las lenguas romances, por parte de cristianos, mozárabes, musulmanes y judíos. Esta labor se inicia en monasterios como el de Ripoll y culmina en las escuelas de traductores, siendo la de Toledo, impulsada por Alfonso X el Sabio, la más importante. La difusión de los textos es llevada a cabo por judíos hispanos, sobre todo médicos, que enseñaban en universidades europeas.

A partir del siglo XIII, la cultura adquiere un rasgo urbano y humanista; las élites laicas comienzan a interesarse por las letras y el pensamiento. Además, se produjo el nacimiento de una literatura en lengua vernácula y la difusión de dos estilos artísticos: el gótico y el mudéjar.

  • Fundación, en el siglo XIII, de las primeras universidades (Palencia, Valladolid, Salamanca, Lleida, etc.), en las que se enseñaba en latín y se aplicaba el método escolástico (lectura, comentario y discusión).

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