Movimientos Obreros del Siglo XIX: Cartismo, Anarquismo y Comunismo

El Cartismo y sus Demandas

Los cartistas reclamaban principalmente:

  • Sufragio universal masculino: Derecho al voto para todos los hombres, independientemente de su condición económica o social.
  • Redistribución de los distritos electorales: Buscaban una representación más justa en el Parlamento, eliminando el predominio de los distritos rurales con poca población obrera.
  • Salario para los diputados: Permitiría a los trabajadores acceder a cargos políticos sin depender de su riqueza personal.
  • Inmunidad parlamentaria: Protegería a los diputados de represalias por expresar sus ideas libremente.

Presentaron sus demandas, conocidas como la «Carta del Pueblo», a la Cámara de los Comunes en 1842. En su defensa, organizaron huelgas y manifestaciones. Aunque la Carta fue rechazada, el cartismo logró concienciar a amplias capas de trabajadores y contribuyó a la consecución de la primera reducción de la jornada laboral a 10 horas en 1847.

El Anarcocomunismo y la «Propaganda por la Acción»

El anarcocomunismo, liderado por figuras como Piotr Kropotkin, se oponía a cualquier forma de organización jerárquica. Defendía la acción violenta de pequeños grupos contra la sociedad burguesa, una estrategia conocida como «propaganda por la acción». Sostenían que los actos violentos contra los símbolos del Estado, la Iglesia y el capitalismo despertarían la conciencia de las masas y las conducirían a la revolución.

Esta ideología provocó una oleada de atentados en las sociedades occidentales, incluyendo:

  • Asesinato del presidente de la República Francesa (1894).
  • Asesinato del jefe de Gobierno español (1897).
  • Asesinato del presidente de Estados Unidos (1901).

El Anarcosindicalismo y la Organización Obrera

El anarcosindicalismo rechazaba la violencia individual y abogaba por la organización de los obreros en sindicatos. Su objetivo era la eliminación del capitalismo y la creación de una sociedad sin clases, donde la propiedad sería colectiva. Este sindicalismo anarquista defendía:

  • Apoliticismo: Los obreros no debían participar en las elecciones burguesas.
  • Huelga general: Considerada como el principal instrumento revolucionario.

Sus ideas se consolidaron en la Carta de Amiens (1906) y en la formación de poderosos sindicatos anarquistas como la Confederación General del Trabajo (CGT) en Francia y la Confederación Nacional del Trabajo (CNT) en España.

El Manifiesto Comunista: Marx y Engels

«El objetivo inmediato de los comunistas es poner fin a la dominación burguesa y la conquista del poder político por el proletariado (…). Que las clases dominantes tiemblen ante la revolución comunista. Los proletarios no tienen nada que perder, solo sus cadenas (…)«.

Autores

Este fragmento pertenece a Karl Marx y Friedrich Engels, extraído del «Manifiesto Comunista» (1848), una obra fundamental del pensamiento comunista.

Ideas Principales

  1. Conquista del poder político por el proletariado: La clase trabajadora debe derrocar a la burguesía y establecer una sociedad sin clases.
  2. Abolición de la propiedad privada y control estatal de los recursos: Expropiación de tierras y capital de la burguesía, y nacionalización de sectores clave como la banca, la industria y los transportes.
  3. Reforma social y económica para lograr la igualdad: Implementación de medidas como el trabajo obligatorio, la educación gratuita y la eliminación de la herencia para erradicar la desigualdad.

El Pensamiento de Bakunin: Crítica y Propuesta

«Se me ha acusado de que soy comunista porque pido la igualdad económica y social de las clases y de los individuos (…), y porque (…) me he declarado partidario de la propiedad colectiva«.

Autor

El autor de este texto es Mijaíl Bakunin, un influyente pensador anarquista del siglo XIX.

Crítica y Propuesta

Crítica:

  • Bakunin critica el comunismo autoritario por su excesiva concentración de poder en el Estado, lo que, según él, conduce a la negación de la libertad individual.
  • Se opone al sistema de propiedad hereditaria, considerándolo un perpetuador de las desigualdades económicas.

Propuesta:

  • Bakunin propone un colectivismo libertario basado en la eliminación del Estado y la organización social a través de asociaciones libres.
  • Defiende la propiedad colectiva, gestionada por la comunidad, como alternativa a la concentración estatal o privada.
  • Busca una sociedad sin jerarquías, donde la igualdad económica y social sea compatible con la libertad individual.

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