Mudéjares Y MORISCOS
Podemos definir mudéjares a aquellos musulmanes que decidieron quedarse tras la Reconquista de Al-Ándalus en la Edad Media. A estos musulmanes se les permitíó seguir practicando su religión, utilizar su lengua e incluso mantener sus costumbres y durante siglos se dio una coexistencia respetuosa entre cristianos y musulmanes, si bien,estos debían pagar más impuestos.
Con el tiempo esta respetuosidad fue amainando y durante el reinado de los Reyes católicos (Isabel de Castilla y Fernando de Aragón) fueron obligados a convertirse al cristianismo (1502) pasando a denominarse cristianos nuevos o moriscos, o ser expulsados de la península. Debido a estos mudéjares hoy en día podemos encontrar grandes edificios con arquitectura mudéjar, como torres de San Martín y El Salvador en Teruel (Aragón).
Pese a los intentos de los reyes católicos de expandir la religión católica por la península, muchos de los moriscos que decidieron permanecer en la península seguían manteniendo clandestinamente su lengua, costumbres, religión. La gran mayoría vivía en el campo, dedicándose a la agricultura, y sometíéndose de manera más inhumana que los cristianos. Debido a esto protagonizaron algunas sublevaciones (en las Alpujarras en 1568).
Finalmente y tras varios intentos anteriores, se decretó su expulsión en 1609, durante el reinado de Felipe III. Esta expulsión afectó gravemente a los territorios de la Corona de Aragón ya que dejaron cantidad de pueblos vacíos y provocaron graves consecuencias para la agricultura y la artesanía.
Al-ÁNDALUS
Al-Ándalus es el nombre con el que los musulmanes denominaron al territorio conquistado en la península Ibérica) que abarca desde el año 711(s. VIII) hasta el año 1492 (s. XV), y que será reconquistado por los reinos cristianos. Se pueden distinguir diferentes etapas políticas: Emirato Dependiente de Damasco (714-756), Emirato Independiente de Bagdad (756-929) con el emirato de Abd al-Rahman I, Califato de Córdoba (929-1031) emirato de Abd al-Rahman III , Reinos de Taifas y Reino nazarí de Granada (1031-1492). Debido a las victorias cristianas a mediados del siglo XIII, Al-Ándalus quedara reducido a Granada.
El estado de Al-Ándalus se organizó de manera centralizada, siendo el califa la máxima autoridad cuyo poder se extendía a los ámbitos judicial, económico, político y militar. Para poder gobernar el califa se ayudaba de un hachib (primer ministro), de los valíes (gobernadores de las provincias) y de los cadíes (jueces).
En cuanto a su organización económica y social (urbana, comercial y tributaria), cabe destacar la importancia que tuvieron las ciudades, que eran el centro de la vida social, económica y cultural. Desarrollaron, las ciudades, una prospera artesanía y comercio con abundante circulación de moneda. Córdoba fue un gran centro cultural pasando a ser el núcleo cultural y económico mas importante de Al-Ándalus sobre todo durante la época del Califato y llegando a convertirse en la mayor ciudad de Europa occidental. En la agricultura, muy productiva, destaca el impulso a los regadíos y la difusión de nuevos cultivos (agrios, arroz, algodón, azafrán). Su cultura estuvo influida por la religión, que impregnaba toda la vida pública. Tras ocho siglos de convivencia más o menos pacífica, en 1492 los Reyes Católicos tomaron Granada poniendo fin al poder islámico en la península.Actuaron como transmisores de conocimientos, sobre todo del mundo helenístico y del Oriente. Gracias a los musulmanes y a su desarrollo cultural podemos encontrar importantes construcciones como la mezquita de Córdoba, la Alhambra de Granada o la Aljafería de Zaragoza.
LA Repoblación CRISTIANA
La Repoblación cristiana es un proceso de colonización del territorio conquistado por los Reinos cristianos a Al-Ándalus. Esto implicó una nueva organización social, política y administrativa. En algunas zonas permanecieron los musulmanes (mudéjares) que gracias a unas capitulaciones se les permitíó practicar su religión y mantener su forma de vida. Podemos distinguir diferentes tipos en las diversas fases de la reconquista.
En primer lugar, durante los primeros momentos de la reconquista (IX-X) se da lugar a la Presura o Aprisio del valle del Duero y Norte de Cataluña (zonas que se encontraban casi despobladas). Los campesinos ocupaban la tierra, que con el tiempo acabaría perteneciendo a un clérigo o a un noble.
En segundo lugar, durante los siglos XI Y XII, se da lugar la repoblación concejil en los valles del Ebro y el Tajo. Esta repoblación se debíó principalmente a los concejos que eran dotados con fueros o cartas Pueblas. Dichos fueros eran unos documentos que otorgaba el rey y que otorgaba libertades y privilegios a sus habitantes.
En tercer lugar, tras la victoria de las Navas de Tolosa (1212), se da lugar a la repoblación por repartimientos en Extremadura, valle del Guadalquivir y suroeste de la península (Valencia, Murcia, Mallorca). En dicha repoblación el rey dio grandes territorios a los nobles y soldados, e incluso dono tierras a los clérigos.
En determinadas tierras fronterizas se otorgaron cartas de población y fueros, en los cuales se concedían ventajas a quienes fuesen a poblar las tierras de frontera. Estas cartas puebla y fueros solían fijar los límites de los términos, las condiciones de acceso a la tierra, la concesión de franquicias y unas normas básicas sobre la vida municipal, por lo que se constituyen en instrumentos jurídicos, que regulaban esa vida local. Así el derecho local difería de unas localidades a otras. El rey Jaime I realizó un proceso de unificación jurídica en el Reino de Aragón, para lo que convocó Cortes generales en 1247 con la presencia de obispos, ricoshombres, caballeros y representantes de algunas villas y ciudades.
LAS ENCOMIENDAS
Tras la conquista de América, se inició la colonización y explotación económica de los recursos, que iban a ser una gran fuente de ingresos para la Corona. Debido a que la explotación de minas y tierras en las colonias era escasa, la organización económica y social, descansaba sobre la población indígena (no estaba habituada a tener un ritmo de trabajo tan intenso). Sin embargo los indígenas para la Corona debían ser súbditos libres incorporándose como asalariados no esclavos. Asimismo, la Corona deseaba que los indígenas tuvieran una religión cristiana, por lo que se llegó a establecer la institución de la Encomienda.
La Encomienda fue una institución socioeconómica carácterística de la colonización española en América mediante la cual un grupo de individuos debían gratificar a un súbdito español (encomendero) para recibir tributos, que eran pagados con el producto de sus tierras(especie, como ropa, metal, maíz, pescado… ) o en servicios personales…
Esta institución se convirtió en un instrumento para explotar a la población indígena. Debido a esto el crecimiento de la mortalidad aumentó notablemente en muchas zonas.
Los misioneros como Fray Bartolomé de las Casas criticaron severamente el trato que la población indígena sufría, así que decidieron denunciar a la Corona de España la explotación del indio. Pero hasta que no se manifestaron las Leyes de Nuevas de Indias (1542) y llegará mano de obra originaria de África los indígenas no podían ser libres.
La caída del sistema de la encomienda se inició ya en 1510, pero finalmente fue abolida en 1718.
LA Inquisición
La inquisición se trataba de un tribunal eclesiástico creado en el Siglo XIII con el fin de acabar con la herejía (conjunto de ideas religiosas contrarias a los dogmas de una doctrina religiosa). En España fueron los Reyes Católicos quienes la introdujeron en Castilla (1478) y posteriormente en la Corona de Aragón (1483).
A la cabeza de dicha institución estaba el Inquisidor General (cargo nombrado por los monarcas) y el Consejo Supremo. El territorio estaba dividido en distritos en cada uno de los cuales había un tribunal. Sus procedimientos judiciales (anonimato del delator, proceso secreto, torturas…) y sus consecuencias para los acusados (confiscaciones de bienes, penas muy duras que llegaban hasta la muerte en la hoguera…)convirtieron a este tribunal en una institución temible y que generaba el miedo en la población. En un principio se ocupó de los judeoconversos y también de los moriscos, pero su acción desde mediados del Siglo XVI se extendíó también a los sospechosos de protestantes (cristianos viejos). Su actividad se mantuvo durante varios siglos hasta ser abolida definitivamente durante la Regencia de María Cristina (1834).
LA PAZ DE Westfalia
Durante los reinados de Carlos I y Felipe II quedó firmemente asentada la hegemonía de España en Europa y el Mediterráneo.
El reinado de Felipe III transcurre en calma, pero en el de Felipe IV el declive en Europa será un hecho. En el interior hubo de hacer frente a las rebeliones de Cataluña y Portugal. En el exterior, los fracasos en la guerra de los treinta años (lucha por el predominio político en Europa, divisiones religiosas y políticas en Alemania) supone el fin de la hegemonía de los Austrias. Holanda, Dinamarca, Inglaterra, Suecia y, más tarde, Francia, serán los rivales de España y el Imperio alemán. La paz de Westfalia (1648) reconoce el derecho de los príncipes alemanes a escoger la religión de sus estados y la independencia de Holanda, además de ventajas territoriales para Suecia. En la paz de los Pirineos (1659), se pone fin a la guerra con Francia, a la que se cedían el Rosellón, la Cerdaña y algunas plazas en los Países Bajos. Es el fin de la hegemonía en el continente, que pasa a manos de Francia, mientras el dominio de los mares lo ejercerán holandeses e ingleses.
DECRETOS DE NUEVA PLANTA
Tras la muerte de Carlos II (1700) sin descendencia se planteó un problema sucesorio, que llevó a la Guerra de Sucesión (1701-1714), donde se enfrentaron los dos pretendientes al trono, Felipe de Anjou (nieto de Luis XIV) y el Archiduque Carlos, apoyados por las distintas potencias europeas, ya que el conflicto se internacionalizó.
El triunfo de Felipe V supuso, siguiendo el modelo francés, una reorganización del Estado, que implicó una centralización política y administrativa. Los decretos de nueva planta se impusieron en Aragón y Valencia (1707) en Balerares (1715) y un año después en Cataluña. Con los Decretos de Nueva Planta desaparecieron las instituciones políticas propias de los diversos territorios (Cortes, Diputación, Justicia), con la excepción del País Vasco y Navarra debido a la fidelidad hacia Felipe V durante la guerra. Sólo pervivieron los fueros civiles en algunas regiones, como es el caso de Aragón. Los Borbones establecieron una estructura político-administrativa uniforme y centralista en todo el territorio, basada en el modelo de Castilla, lo que favorecíó el absolutismo monárquico.
LA Ilustración
La ilustración fue un movimiento intelectual e ideológico surgido en la Europa del Siglo XVIII basado en el Racionalismo (poder de la razón).
Los ilustrados eran reformistas, afirmaban la tolerancia religiosa, defendían la libertad de pensamiento y de expresión, se oponían al mantenimiento de los privilegios, criticaban el poder del clero, censurando la influencia política y educativa que la Iglesia poseía…
La introducción de las ideas ilustradas en España fue lenta y tardía, sin duda por la falta de una burguésía poderosa y las resistencias de sectores eclesiásticos y aristocráticos. Los ilustrados fueron un grupo reducido de intelectuales (Campomanes, Jovellanos, Aranda, Olavide, Floridablanca…) que analizaron el problema de la nacíón y propusieron reformas con el objetivo de superar el atraso el país.
Tras la evolución, surgirá el pensamiento liberal que triunfará en el Siglo XIX. Critican a la Iglesia, pero aspiran a una práctica religiosa más rigorista y defienden la capacidad del rey para intervenir en asuntos eclesiásticos (regalismo). Por otro lado, confían en el impulso reformista de la monarquía. Entre las preocupaciones de los ilustrados está la educación, pues sólo la cultura podía sacar al país del atraso. El atraso económico también les preocupó y censuraron el fuerte predominio de la propiedad aristocrática y eclesiástica, el excesivo control estatal de las actividades económicas y el desconocimiento de los nuevos avances técnicos que se divulgaban por Europa. Los ilustrados criticaron los privilegios de la nobleza o el elevado número de eclesiásticos y defendieron la dignidad de los oficios mecánicos (fin de la deshonra legal del trabajo).
LOS SEÑORIOS
El señorío es un institución hispánica originaria en la Edad Media que supone el dominio sobre tierras y hombres, encomendado por el rey en otras personas (nobles) o colectivos (eclesiásticos). Los poseedores de un señorío acumulaban las rentas que el vasallo proporcionaba (especias). Los señorias podían ser ‘’señorios territoriales’’ en los que el señor ejercía el poder sobre sus pobladores, obligandolos a pagar rentas y a realizar servicios personales. A estos vinieron a sumarse los ‘’señorios jurisdiccionales’’ en los cuales se ejercía justicia nombrando autoridades locales. En este tipo de señorio existía el derecho de propiedad sobre una parte de tierra pero el campesiono debía pagar unos cánones por el uso de la misma. Este tipo de señorios podían recaer en un “mismo titular” (rey y nobles) denominado señorio laico, destacando el señorio laico (rey) y el solariego (nobleza) o en titulares distintos (eclesiásticos) denominados señorios eclesiásticos, destacando los de abadengo y los de las ordenes militares.
Estos señoríos perduraran hasta las reformas liberales del Siglo XIX (1837) que terminan aboliendolos.
Características DEL Antiguo Régimen
La expresión Antiguo Régimen designa al periodo de la historia anterior a la Revolución Francesa, a las revoluciones liberales y a la industrialización. Se caracteriza por la monarquía absoluta como forma de gobierno, aunque mediatizada por la fuerte presencia de la Iglesia en la vida pública (regulación del matrimonio, importancia de la jurisdicción eclesiástica, diezmos, primicias…) y la existencia de las instituciones representativas de los distintos estamentos (Cortes). La economía es fundamentalmente agraria, con una gran presencia de la nobleza y la Iglesia como propietarios. Además, los patrimonios de la nobleza están vinculados, no pueden venderse (mayorazgos), lo que dificulta el acceso a la tierra de los campesinos. Una buena parte de los campesinos vivían en señoríos, sometidos a la jurisdicción de los señores y debiendo abonar los correspondientes tributos por el uso de la tierra. La industria artesanal y el comercio tienen serios obstáculos debido a la lentitud y carestía de los medios de transporte. La sociedad se basa en el privilegio, en la desigualdad jurídica de los grupos privilegiados (nobleza, clero), y en el nivel económico de las personas, cuestiones no siempre coincidentes. Su fin llegó con la irrupción del liberalismo y el triunfo del capitalismo.