1. El Origen de la Revolución Francesa
1.1. El Concepto de Revolución Industrial
La Revolución Industrial fue un conjunto de importantes transformaciones económicas y sociales que se produjeron como consecuencia de la utilización masiva de máquinas en los procesos de producción. Los cambios se iniciaron en Gran Bretaña en la segunda mitad del siglo XVIII y supusieron la transición de una economía agraria y una sociedad rural a una economía industrial y una sociedad urbana.
- La 1ª Revolución Industrial comenzó en 1760.
- La 2ª Revolución Industrial en 1870.
La Revolución Industrial fue acompañada de importantes cambios demográficos y agrarios.
1.2. La Revolución Demográfica
En la segunda mitad del siglo XVIII se inició un crecimiento demográfico importante y sostenido, debido al descenso de la mortalidad y una elevada natalidad.
Causas del descenso de la mortalidad:
- Disminución de las epidemias de peste.
- Mejoró la alimentación.
- Hubo progresos en la higiene privada y pública.
- Mejoró la sanidad.
El crecimiento de la población provocó un aumento de la demanda de productos agrícolas e industriales y, a su vez, permitió disponer de más mano de obra.
1.3. La Revolución Agrícola
Aplicación de innovaciones en la agricultura y la ganadería:
- Mejoraron las técnicas agrícolas. El barbecho se sustituyó por la rotación cuatrienal (sistema Norfolk): la tierra se divide en cuatro partes, en las que se alternaban trigo, nabos, cebada y trébol. De este modo, se cultivaba sin agotar la tierra y se obtenía alimentación abundante para el ganado.
- A finales del siglo XVIII, comenzaron a utilizar el arado de hierro y poco después introdujeron nuevas máquinas como las sembradoras, trilladoras y cosechadoras mecánicas.
- Se transformaron las estructuras agrarias: desaparecieron las propiedades comunales explotadas de forma colectiva, y la tierra se convirtió en propiedad privada.
- Se reformó la ganadería. Mejoró la alimentación y aumentó el número de cabezas.
Durante el siglo XVIII, los agricultores obtuvieron mayores ingresos y pudieron ahorrar.
1.4. Una Nueva Forma de Pensar
Otras condiciones favorables para el crecimiento económico:
- Existencia de amplios mercados, tanto en el interior de Gran Bretaña como en sus colonias de ultramar.
- Aparición de una nueva mentalidad: La burguesía británica favorecía la inversión y buscaba el beneficio, apoyado por las leyes del Parlamento.
- Abundancia de yacimientos de hierro y carbón, necesarios para las nuevas fábricas.
2. La Primera Revolución Industrial
2.1. Del Taller a la Fábrica
Hasta el siglo XVIII, las manufacturas se elaboraban en pequeños talleres, de forma manual y con herramientas sencillas. En la segunda mitad del siglo XVIII se inventaron en Gran Bretaña diversas máquinas que necesitaban grandes espacios, por lo que los talleres se sustituyeron por fábricas. Las primeras máquinas funcionaban con energía hidráulica, pero pronto apareció la máquina de vapor de James Watt.
Apareció la división del trabajo, en la que cada obrero se especializó en una única tarea del proceso productivo, tenía un horario fijo y debía trabajar al ritmo que imponía la máquina.
Se aumentó la productividad y se abarataron los costes de fabricación, por lo que los precios de los productos disminuyeron.
2.2. Los Sectores Punteros: La Industria Textil
La industria textil algodonera británica disponía de una materia prima abundante y barata: el algodón que llegaba de las colonias.
Esta industria fue la primera en incorporar las innovaciones técnicas en el hilado y el tejido. Cuando comenzó a utilizarse el vapor para mover las máquinas, la producción textil británica impulsó otras actividades, como la agricultura, que suministraba materias primas, y la siderurgia, que proporcionaba hierro a las fábricas.
2.3. Los Sectores Punteros: La Siderurgia
Hasta el siglo XVIII, el hierro británico era de baja calidad porque contenía muchas impurezas, por lo que la mayor parte se importaba. A principios del siglo XVIII comenzó a fundirse el mineral de hierro utilizando carbón de coque, muy abundante en Gran Bretaña. Los costes eran muy elevados hasta que a finales de siglo se utilizó un nuevo procedimiento que permitía obtener a gran escala lingotes de hierro refinado de calidad. Se construyeron modernos altos hornos y la demanda y producción de hierro se multiplicaron para elaborar máquinas y herramientas.
2.4. El Liberalismo Económico
De forma paralela al proceso de industrialización, se difundió por el mundo occidental una nueva doctrina económica, el liberalismo, basada en la teoría expuesta por Adam Smith. La actividad económica debía regirse por el principio de libertad económica para crear empresas, contratar trabajadores y establecer las condiciones y precios de los productos.
Ni los gremios ni el Estado debían intervenir. Solo la ley de la oferta y la demanda se encargaba de regular los precios de los productos y los salarios de los trabajadores. La división del trabajo aumentaría la producción y la productividad.
3. La Revolución de los Transportes
3.1. El Gran Desarrollo de la Navegación
La producción industrial británica hizo necesario contar con transportes rápidos y seguros.
En el siglo XVIII, el transporte por carretera era lento e inseguro, así que se construyeron nuevas carreteras y se mejoraron las existentes. El transporte fluvial era más barato y seguro, y entre 1770 y 1830 se hicieron numerosos canales para transportar mercancías como el carbón.
La máquina de vapor se aplicó en 1807. Se puso en funcionamiento la primera línea comercial con barcos de vapor.
3.2. La Era del Ferrocarril
En 1814, George Stephenson construyó la máquina de vapor y se habilitó para el transporte de personas. Los avances técnicos hicieron del ferrocarril un medio de transporte cada vez más rápido, seguro y barato. Potenció la minería por la demanda de carbón y la siderurgia.
3.3. Los Efectos de la Revolución de los Transportes
Los nuevos transportes tuvieron un fuerte impacto económico y social:
- Potenciaron el desarrollo de la minería, la metalurgia y la siderurgia.
- Se desarrolló el comercio.
- Impulsaron la especialización de la economía mundial.
- Modificaron la vida cotidiana.
4. La Segunda Revolución Industrial
4.1. Nuevas Fuentes de Energía e Industrias
Dos nuevas fuentes de energía fueron la base de la Segunda Revolución Industrial:
- La electricidad: Para mover las máquinas y posibilitó la aparición de nuevos medios de transporte (metro y tranvía) y de comunicación (teléfono y radio).
- El petróleo: En 1859 se perforaron los primeros pozos de extracción.
La 2ª Revolución Industrial fue liderada por:
- Industria siderúrgica.
- Industria química.
- Industria eléctrica.
4.2. La Gran Empresa y la Banca Moderna
Las nuevas empresas necesitaban mucho capital, por eso se crearon sociedades anónimas. En ellas, el capital de la empresa se fracciona en participaciones o acciones que se negocian en la Bolsa y quien las adquiere pasa a ser socio de la misma.
Los bancos prestaban dinero a empresas, a la vez que guardaban el dinero de los particulares. Así, el dinero guardado se invertía en la industria y otros negocios. Así nació el capitalismo financiero.
4.4. Sistemas de Producción Novedosos
A finales del siglo XIX, se aplicaron nuevos sistemas para aumentar la producción:
- El ingeniero Taylor creó el taylorismo, el cual dividía el proceso productivo en pequeñas tareas cronometradas. Cada obrero se especializaba en una tarea y recibía un salario a cambio.
- Trabajo en cadena: El empresario Ford aplicó esto en sus fábricas; los productos pasaban de un operario a otro a través de una cadena de montaje, evitando pérdidas de tiempo.
- Producción en serie: Se producían productos en grandes cantidades, lo que abarataba los precios.
Distintas formas de concentración empresarial:
- Cártel: Asociación de empresas dedicadas a la misma rama de actividad que llegan a acuerdos para controlar la producción y la distribución, fijar los precios y compartir los beneficios.
- Holding: Conjunto de empresas controladas por una de ellas, que es la propietaria de la mayor parte de sus acciones.
- Trust: Agrupación voluntaria de diferentes empresas para cubrir todas las fases de la producción de un artículo, con el fin de dominar el mercado al eliminar la competencia.
5. La Expansión de la Revolución Industrial
5.1. La Revolución Industrial en el Continente Europeo
- Bélgica: el primero que se industrializó tras Reino Unido, gracias a sus recursos naturales, tradición artesanal y apoyo gubernamental a la construcción ferroviaria.
- Francia: Industrialización más lenta. Entre 1830 y 1850 aproximadamente.
- Alemania: El Zollverein fue una unión aduanera entre varios estados alemanes que permitió el comercio interior sin barreras.
- Dinamarca: especialización agrícola.
- Suecia: especialización agrícola y abundancia de hierro de calidad.
5.2. La Industrialización de EEUU
Se convirtió en una gran potencia industrial a finales del siglo XIX por:
- Desarrollo de una agricultura muy productiva: rápida mecanización.
- Abundancia de recursos naturales (hierro, carbón, petróleo) y especialización productiva: Norte (industrial), Sur (algodón), Oeste (alimentos).
- Creación de un gran mercado interior favorecido por el rápido desarrollo del ferrocarril.
- Aplicación de las innovaciones técnicas, nuevos sistemas de trabajo y fuerte concentración empresarial.
6. Los Efectos de la Industrialización
6.1. El Incremento Demográfico
A lo largo del siglo XIX, la población europea pasó de 203 millones de habitantes en 1800 a 408 en 1900. Causas:
- Descenso de la mortalidad: avances médicos y mejoras en la higiene y la alimentación.
- Tasa de natalidad se mantuvo alta hasta la década de 1870.
7. La Sociedad de Clases. Las Clases Altas
7.1. Una Nueva Sociedad
La nueva sociedad industrial se basó en la igualdad jurídica, mismas leyes. Sin embargo, la sociedad era profundamente desigual.
- Las mujeres seguían subordinadas a los varones (padres, maridos).
- Había una gran diferencia económica entre los que tenían propiedades y los que carecían de ellas, diferenciadas por el dinero.
Se distinguen tres clases: alta (aristocracia y alta burguesía), media y baja.
7.2. El Declive de la Aristocracia
En el siglo XIX, la aristocracia perdió parte de su preeminencia social al perder los privilegios señoriales y comenzar a pagar impuestos.
Siguieron ocupando los puestos más prestigiosos en la Administración, la justicia, el ejército y la diplomacia. Tenían una forma de vida muy ostentosa.
7.3. Una Clase Dirigente: La Alta Burguesía
La burguesía se convirtió en la clase poderosa de la nueva sociedad: empresarios, altos funcionarios (médicos, abogados, periodistas…).
Los burgueses vivían en las ciudades, en los nuevos barrios del ensanche, con numerosos servicios, parques y jardines públicos.
8. Las Clases Medias y Bajas
8.1. Las Clases Medias
A finales del siglo XIX, en los países industrializados apareció una amplia clase media o pequeña burguesía que iba aumentando y que tenía un nivel educativo superior a las clases bajas, aunque inferior al de la alta burguesía y aristocracia.
La clase media era un grupo heterogéneo. Entre sus valores destacan el trabajo y el ahorro.
8.2. Las Clases Bajas
La mayoría de la población eran campesinos. En el norte y el este abundaban campesinos propietarios, y en el sur, jornaleros, que cobraban un sueldo bajo, y algunos de ellos eran siervos.
9. El Nacimiento del Movimiento Obrero
9.1. Los Primeros Pasos: Ludismo y Sindicatos
Movimiento obrero: conjunto de iniciativas colectivas llevadas a cabo por los trabajadores asalariados para mejorar sus condiciones.
Ludismo: movimiento de obreros que llevaba a cabo la destrucción de máquinas de forma espontánea, puesto que las culpaban de su situación. Fue la primera reacción de los obreros ante su mala situación.
Cartismo: primer movimiento obrero organizado, con fines laborales y políticos. Presentó al Parlamento inglés la Carta del Pueblo (1848), documento que reclamaba derechos laborales y sufragio universal masculino (los obreros no tenían derecho al voto).
En 1824 se reconoció en Gran Bretaña el derecho de asociación y a partir de ese momento nacieron los primeros sindicatos, denominados trade unions, que reclamaban mejoras salariales, reducción de la jornada laboral y supresión del trabajo infantil. Su principal instrumento de presión era la huelga. En 1833, todos los sindicatos se unieron en la Unión Nacional de todos los trade unions.