El reinado de Isabel II (1833-1868) fue el periodo de la historia de España en el que se consolida el Estado Liberal. Se caracterizó por la inestabilidad política, la corrupción y el protagonismo de los generales sobre la vida política, signo de la enorme fragilidad y arraigo superficial que sufría el liberalismo que estaba naciendo en España, y que dio lugar a dos problemas como fueron: 1. La oposición de los sectores absolutistas (campesinado vasco, nobleza rural, clero regular etc) , que desencadenará hasta dos guerras carlistas. 2. El creciente antagonismo entre las dos ramas del liberalismo, moderados (nobleza, alta burguésía y terratenientes) y progresistas (clases medias, ejército y profesiones liberales) que dificultan la gobernabilidad y la incompetencia de la reina, que era manejada por los militares moderados y por los sacerdotes y monjas que ganaron su confianza. Distinguimos dos etapas principales, con sus correspondientes subetapas: A. La minoría de Edad de la Reina (1833-1843): El gobierno fue delegado en una regencia que ejerce el poder en nombre de Isabel II, encabezada por la Reina Mª Cristina y después por el general Espartero. Durante estos años España pasa de la monarquía absoluta a la constitucional A.1) La Regencia de María Cristina de Borbón, (1833-1840): tras el apoyo de los absolutistas al tío de la Reina (Carlos) durante la I Guerra Carlista (1833-1839), la regente se ve obligada a abrir su gobierno a los liberales-moderados, quienes van a imponer una serie de reformas que hicieron bascular definitivamente al Estado hacia un liberalismo de mínimos, proclamándose el Estatuto Real de 1834 (carta otorgada en donde la Corona auto limitaba sus poderes). La entrada de Mendizábal (progresistas) en el gobierno en 1836 y su desamortización del clero regular causa la reacción de los moderados (excluyen a los progresistas del gobierno). Los Progresistas, no lo aceptan, organizando un pronunciamiento (Motín de la Granja, 1836) del que nace un gobierno de consenso con los moderados, origen de la Constitución de 1837 (soberanía nacional pero con amplios poderes para la corona, senado de designación regia y congreso de sufragio censitario votado por el 5%, estado confesional pero con libertad de culto, elección de ayuntamientos por sufragio etc). No obstante, la corrupción de Mª Cristina más el intento de los moderados de revocar la ley de ayuntamientos dan lugar al ascenso como nuevo regente de Espartero, general progresista que había salvado Bilbao0 de los Carlistas (Luchana, 1836), y terminado con la guerra (Abrazo de Vergara, 1839). A.2) La Regencia de Espartero (1840-1843), tuvo un balance nefasto por la pésima gestión económica y su política autoritaria. Barcelona se subleva, reaccionando Espartero con el bombardeo de la ciudad (1842). En 1843, un nuevo pronunciamiento moderado (Narváez) depone a Espartero y proclama a Isabel II mayor de edad. B. Mayoría de edad de la reina (1843-1868): Destacan las luchas entre moderados y progresistas, que originan gran inestabilidad, agravada todavía más por la II Guerra Carlista (1846-1849), las guerrillas catalanas causadas por la boda de la Reina y por la aparición en 1849 del Partido Demócrata (escisión republicana del progresismo, reclamaba el sufragio universal, apoyado por la pequeña burguésía y clases populares urbanas). B.1) Década Moderada (1844-1854): Gobierno de los Moderados (Narváez), aprobándose la Constitución de 1845 (ayuntamientos nombrados por el gobierno, sufragio restringido al 1%, centralismo, catolicismo de estado sin libertad de culto, soberanía compartida…). Se gana el apoyo del Vaticano y de muchos carlistas gracias al Concordato de 1851 (daba a la iglesia el monopolio educativo). El intento revolucionario de 1848 (Narváez y Bravo Murillo) causó la reacción de los moderados puritanos (O’Donell) quienes se levantan con apoyo progresista (Vicalvarada, 1854), llamando la reina a gobernar a Espartero. B.2) Bienio Progresista (1854-1856), se acelera la industrialización (Cataluña y País Vasco), crece la construcción del ferrocarril (radial), se lleva a cabo la desamortización de Madoz, 1855) que agravó la miseria campesina y consolidó una burguésía terrateniente. Este gobierno acaba debido a las diferencias entre Espartero y O’Donell. O’Donell funda la Uníón Liberal (formado por la derecha del progresismo y la izquierda del moderantismo) B.3) La Uníón Liberal (1858-1863): Intento de crear un sentimiento patriótico mediante la enseñanza de la historia y devolviendo protagonismo internacional a España mediante campañas militares (bajo la tutela de Francia e Inglaterra) como la Guerra de Marruecos (1859-1860), la reincorporación de Santo Domingo (1860-1865) y la expedición a la Conchinchina (1858-1862). A partir de 1861 nacen tensiones entre la izquierda y la derecha del partido a propósito de la guerra de Marruecos, por lo que la Uníón Liberal se divide en dos (1863). B.4) La crisis del régimen (1863-1868): Regresan los moderados y crece la oposición al régimen debido a diversos factores como las crisis (del algodón, de subsistencia, del ferrocarril en 1866, bancaria), el desprestigio personal y político de Isabel II (apoyaba siempre a los moderados), o la muerte de los principales generales moderados (O’Donell y Narváez). Ante esto, Progresistas, Unionistas y Demócratas firman el Pacto de Ostende, (Julio de 1868), donde acuerdan derrocar a los moderados y, por primera vez, también a la Reina.