EJES DE LA POLÍTICA EDUCATIVA REPUBLICANA
En primer lugar es importante señalar las diferentes subetapas dadas en la etapa republicana:
-1931-33: PERIODO REPUBLICANO SOCIALISTA .En estos dos años se produce la reforma educativa.
En Diciembre de 1931 se crea una nueva constitución. Aquí el gobierno se asegura de incorporar los derechos de la escuela para que estos principios puedan seguir funcionando aunque cambie el gobierno. Esto sea una guerra escolar. Los nuevos principios son rechazados por los sectores más conservadores y la Iglesia llama a los padres a la desobediencia. Todas estas medidas transforman completamente la legislación y la política educativa.
-1933-36: POLÍTICA RADICAL CEDISTA (CEDA). Derechos autónomos. Se crea una contrarreforma. Todos los avances son derogados. La izquierda perdíó parte de sus votos por la incorporación de la mujer al sistema electoral. Estas eran influenciadas por sus maridos, curas…otro gran motivo fue el fracaso de la reforma agraria o los llamados “separatismos”. El periodo conservador elimina los presupuestos básicos del sistema educativo
-1936: FRENTE POPULAR. Coalición de izquierdas. En Europa también surge un frente popular como oposición al Nazismo de Hitler y el fascismo de Mussolini. España se convierte es un pre-ensayo de la II Guerra Mundial. La política educativa del Frente Popular, recupera las propuestas anteriores y las radicaliza. Sobre todo en el modelo de escuela única o unificada. Este es el principal objetivo de la república.
Los problemas en educación eran grandes, falta de escuelas, masificación de escuelas privadas, doble red… En el diagnóstico algo prioritario también era la educación de la mujer. El sistema educativo debe de estar integrado. Con una organización de estudios que basamenta el nivel superior en el inferior. Aunque esta reforma concluye con el gobierno Cedista, vuelve a retomarse con el Frente Popular. Posteriormente, la Ley General de Educación vuelve a plantear este modelo.
La escuela es ahora obligatoria, gratuita y repartida por el país (especialmente en el ámbito rural). El país no tiene dinero para ello, por lo que se procede a nacionalizar bienes y se garantiza el derecho de bilingüismo. La igualdad debe de incluir el respeto a la diferencia (en este caso la lingüística). Este derecho es para Cataluña pero puede referirse a lugares históricamente reconocidos. Llega a crearse incluso una Universidad Catalana. Se respetan todas las creencias religiosas. Los niños que sus padres lo deseen pueden recibir religión y si el maestro se niega, lo hará un sacerdote. En la Constitución se dice que el sistema educativo español es laico. Deben de ser retiradas de los centros educativos todos los símbolos religiosos. La Constitución garantizó el derecho a la educación. Se hace una cuantificación de cuántas escuelas son necesarias y se genera un plan de 5 años de creación de escuelas y formación del profesorado. Se crean 14.000 escuelas (no tantas como las esperadas) además de Institutos Femeninos. Las órdenes religiosas no pueden ejercer la enseñanza, esto se recoge en la Constitución en el apartado de congregaciones religiosas. Se procede entonces a la sustitución. El país estaba ya en guerra (no declarado y la falta de tiempo impidió el éxito republicano). El otro asunto que ocupa la reforma es la formación pedagógica a maestros y licenciados.
El modelo de escuela única o escuela unificada era el eje básico de la política republicana, desarrollada por el partido socialista entre los años 1931 y 1933, a pesar de su brevedad, fue una profunda e inesperada transcendencia que aconseja explicitarla más detalladamente.
El principio de laicidad de la enseñanza que incitó a una guerra escolar, fue una medida más destinada a afrontar problemas históricos pendientes. Lo importante era sembrar el país de escuelas, objetivo que se alcanzaría doblando las plazas de maestros existentes. Esto se abordó mediante un plan que fue aprobado por las cortes constituyentes destinado conseguir una plena escolarización en el plazo de 5 años.
Fue importante también afrontar las reivindicaciones de los nacionalismos periféricos en materia educativa, más allá del decreto del Bilingüismo. También la administración ofrecíó un tipo de apoyos y recursos para las necesidades de los docentes como fueron las Semanas pedagógicas, cursos de perfeccionamiento, escuelas-ensayo…
Se crea en 1931 el Plan Personal, que pretendía asegurar la cualificación pedagógica de los futuros maestros y en 1932 se crea la Inspección de la segunda enseñanza. La reforma escolar termina en 1933 y se va a suspender la Ley de Confesiones y Congragaciones religiosas, se prohíbe la coeducación, se reduce el presupuesto de las misiones pedagógicas, se frena la creación y construcción de escuelas y se bloquea la dotación de nuevas plazas para bachillerato. Esto fue debido a que tuvo un triunfo electoral la derecha, que abríó u bienio de signo conservador y contra reformista que liquidó casi todo lo aprobado anteriormente.