El Reinado de Alfonso XIII: Un Panorama General
Tras la crisis de 1898, se inicia en España el periodo conocido como Regeneracionismo. Este movimiento buscaba una renovación del sistema político y social. El 17 de mayo de 1902, Alfonso XIII es coronado rey tras jurar la Constitución de 1876.
Evolución del Régimen (1902-1917)
El Regeneracionismo pretendía solucionar la cuestión social y atender las demandas de las clases populares. Se buscaba dar autenticidad al sistema político del turnismo de partidos, utilizando la masa neutra y eliminando las oligarquías dominantes. Además, se intentaba integrar a las nuevas fuerzas políticas emergentes.
Posteriormente, se produjo un cambio en la dirección de los partidos. En el Partido Conservador, tras el asesinato de Cánovas en 1897, destacaron Francisco Silvela, Fernández-Villaverde y Antonio Maura, este último un enemigo del caciquismo (1903-04, 1907-09). Por parte del Partido Liberal, los presidentes fueron Montero Ríos, Segismundo Moret y Canalejas (1910-1912). Tanto José Canalejas como Antonio Maura fueron protagonistas de este impulso renovador, constituyendo el eje de la monarquía alfonsina. Su fracaso supuso el fin del sistema de la Restauración.
El turnismo comenzó con el turno liberal. Los ataques contra la nación, la figura del rey y el ejército llevaron a la proclamación de la Ley de Jurisdicciones (1906) por Moret. Los delitos contra el ejército y la patria quedarían bajo el control de tribunales militares, lo que supuso un retraso en el sistema de la Restauración iniciado por Cánovas, que establecía la primacía del poder civil sobre el militar.
El turno conservador estuvo presidido de 1907 a 1909 por Antonio Maura, quien manifestó la necesidad de atraer a la masa neutra, las clases medias sin ideología política clara, para alejarlas del movimiento obrero. Para ello, se saneó la administración central, se dio autonomía a los municipios, se intentó terminar con el caciquismo, se eliminó el centralismo y se dialogó con los regionalismos, lo que se conoce como un programa revisionista.
La Semana Trágica de Barcelona (1909)
Durante su gobierno, se produjo la Semana Trágica de Barcelona (1909). En los territorios marroquíes pertenecientes a España, se estaban sucediendo levantamientos, por lo que Maura decidió enviar a Melilla unidades de refuerzo formadas por reservistas. Los conflictos laborales y sindicales, provocados por anarquistas y sindicalistas, proclamaron la huelga general. Ante la situación en Marruecos, el gobierno declaró el estado de guerra en Barcelona, lo que llevó a una fuerte represión y juicios llevados a cabo por un tribunal militar, con fusilamientos gracias a la Ley de Jurisdicciones. La reacción nacional fue la oposición a la gestión de Maura y un escándalo internacional, lo que provocó su dimisión y el paso a Canalejas.
El Turno Liberal de Canalejas (1910-1912)
El turno liberal de José Canalejas (1910-1912) pretendía una reforma social, con diálogo con el movimiento obrero, separación del Estado y la Iglesia, reforma en el programa educativo y modificación del servicio militar obligatorio en tiempo de guerra.
Eduardo Dato fue el presidente de 1913 a 1915 en el turno conservador. La Ley de Mancomunidades permitió cierta autonomía de gobierno a las regiones. El último turno pertenece a los liberales con el Conde de Romanones (1915-1917), quien realizó una reforma fiscal, una reforma educativa y una reforma de infraestructura.
La Crisis de 1917
La crisis de 1917 fue provocada por tres procesos revolucionarios que coincidieron de forma consecutiva entre junio y agosto:
- Las Juntas de Defensa: Aportaron una mentalidad corporativista de unidad dentro del ejército, que ejerció presión para fortalecer su presencia en el Estado, mejorar sus ingresos y ascensos gracias a la guerra de Marruecos.
- La Asamblea de Parlamentarios: Fue un intento de la burguesía de llevar a cabo su revolución contra el sistema político, buscando un amplio consenso representativo de las fuerzas del país.
- La Huelga General: El movimiento obrero, liderado por la UGT, propuso una huelga general, sobre todo política, para lograr la salida del rey y la formación de un gobierno provisional.
La huelga general fracasó. Entre 1917 y 1923 hubo 12 gobiernos.
Conflictividad Social y Sindicalismo (1917-1923)
Tras la Primera Guerra Mundial (1914-1919), se produjo una crisis económica mundial que provocó un aumento de la conflictividad social y un fuerte desarrollo del sindicalismo. El sindicalismo anarquista se agrupaba en la CNT (Confederación Nacional de Trabajadores) y la FAI (Federación Anarquista Ibérica). Los conflictos laborales crecieron tanto en el campo como en la ciudad, con huelgas y manifestaciones. En Barcelona (1920-1923), se produjeron huelgas, fundamentalmente la huelga general de la central eléctrica La Canadiense, en la que el movimiento obrero se organizó y logró la liberación de los detenidos, la readmisión de los despidos y subidas salariales. La patronal catalana y los poderes públicos no aceptaron el acuerdo y pidieron ayuda a militares, lo que dio lugar a una cruenta represión y la organización de sindicatos liberales, grupos paramilitares que actuaban contra los líderes sindicales, asesinando a los más populares de 1920 a 1922 gracias a la Ley de Fugas.
En 1923, con el golpe de Estado de Primo de Rivera, dentro de un contexto económico favorable y la persecución desencadenada contra la CNT y los comunistas, el PSOE aumentó su número de afiliados. En 1921, dentro del contexto de la Revolución Soviética, tuvo lugar el debate sobre la III Internacional, produciéndose una escisión y fundándose el PCE (Partido Comunista Español).
La Cuestión de Marruecos
Otro tema importante fue la cuestión de Marruecos. La tradición histórica en el norte de África generó dos corrientes de opinión: la anticolonial y antimilitarista (izquierda) y la procolonial, que defendía que España debía introducirse de nuevo en el círculo internacional. La mayor parte de la oposición pública al gobierno optó por una política intervencionista que fracasó, iniciándose el llamado avispero marroquí. En 1921, se produjo el Desastre de Annual, una guerra impopular en la que el general Fernández Silvestre, incapaz de esperar la llegada de refuerzos, inició la retirada, lo que supuso una carnicería con 14.000 hombres fallecidos y el suicidio del general.
El Golpe de Estado de Primo de Rivera
Tras el turnismo de partidos, la inestabilidad política y el protagonismo que adquirió el ejército provocaron que Primo de Rivera diera un golpe de Estado en 1923.