Los Reyes Católicos (1469-1516)
Unión Dinástica y Expansión Territorial
1. El Matrimonio de los Reyes Católicos y la Unión Dinástica
Isabel I de Castilla y Fernando II de Aragón, ambos pertenecientes a la dinastía Trastámara, contrajeron matrimonio en 1469. Este enlace unió las dos coronas más poderosas de la Península Ibérica, aunque no implicó la creación de un Estado único. Cada reino conservó sus propias leyes, instituciones, monedas y lenguas. La unión fue, fundamentalmente, de carácter político más que territorial. En la práctica, Castilla ostentó un mayor peso debido a su superior riqueza, población y expansión territorial, mientras que Aragón mantuvo su estructura confederal característica.
2. Expansión Territorial bajo los Reyes Católicos
Los monarcas consolidaron la unidad peninsular mediante la conquista del reino nazarí de Granada en 1492, culminando así la Reconquista. Posteriormente, tomaron las Islas Canarias (1496) y Melilla (1497), e iniciaron la colonización de América tras el primer viaje de Cristóbal Colón en 1492. En 1512, Navarra fue anexionada al Reino de Castilla. Adicionalmente, la Corona de Aragón conquistó Nápoles en 1504, fortaleciendo su presencia e influencia en Italia. Impulsaron también una política de alianzas matrimoniales con el objetivo de aislar diplomáticamente a Francia.
3. La Importancia Estratégica y Simbólica de la Toma de Granada
La conquista de Granada en 1492 significó el fin de más de siete siglos de presencia musulmana en la Península Ibérica y el cierre definitivo del proceso histórico conocido como la Reconquista. Este hito permitió a los Reyes Católicos reorientar sus esfuerzos hacia la expansión exterior, con especial énfasis en el continente americano. Desde una perspectiva simbólica, la caída de Granada fue percibida como una gran victoria para la cristiandad, en contraste con la caída de Constantinopla en 1453 a manos del Imperio Otomano.
6. Expansión Atlántica y en el Norte de África
Se completó la conquista del archipiélago canario (finalizada en 1496) y se tomó la plaza de Melilla (1497), marcando el inicio de la presencia española en el norte de África. El descubrimiento de América en 1492 abrió las puertas a la formación de un vasto imperio colonial. En el ámbito peninsular, la toma de Granada (1492) y la anexión de Navarra (1512) completaron la unificación territorial bajo el reinado de los Reyes Católicos.
Política Interior y Religiosa
5. La Imposición de la Unidad Religiosa
Los Reyes Católicos establecieron la unidad religiosa como uno de los pilares fundamentales para fortalecer el poder real. En 1492, promulgaron el edicto que obligaba a los judíos a convertirse al cristianismo o a abandonar los reinos. En 1502, extendieron esta medida a los mudéjares de Castilla, quienes, al convertirse, pasaron a ser conocidos como moriscos. Se instauró el Tribunal de la Santa Inquisición con el fin de vigilar la sinceridad de las conversiones y asegurar la ortodoxia católica. Si bien esta política reforzó la autoridad del Estado, también provocó un empobrecimiento cultural y económico en ciertas regiones.
7. El Fortalecimiento de la Monarquía Autoritaria
Los Reyes Católicos trabajaron activamente para reforzar el poder real frente a la influencia de la nobleza y las ciudades. Crearon la Santa Hermandad, una fuerza de seguridad para mantener el orden público, y reprimieron las resistencias de la nobleza feudal. Implementaron la figura de los corregidores en los municipios para asegurar el control real, intervinieron en las Cortes y ejercieron control sobre la Iglesia a través del Patronato Real. Además, fortalecieron la Hacienda pública, la administración de Justicia y establecieron un ejército permanente, sentando así las bases del futuro absolutismo monárquico.
Política Exterior
4. Política Exterior de los Reyes Católicos: Objetivos y Alianzas
La política exterior de los Reyes Católicos se articuló en torno a tres ejes principales: la consolidación del control sobre la Península Ibérica (conquista de Granada y anexión de Navarra), la expansión por el océano Atlántico (Canarias y América) y la afirmación del poder de la Corona de Aragón en Italia (conquista de Nápoles). Estratégicamente, buscaron rodear y debilitar a Francia mediante una red de alianzas matrimoniales con Inglaterra, Portugal, el Sacro Imperio Romano Germánico (Austria) y Borgoña. La pugna por el control de Nápoles contra Francia fue un elemento clave para asegurar la hegemonía aragonesa en el Mediterráneo occidental.
Definiciones Importantes
8. Diferencias Clave: Mozárabes y Mudéjares
- Mozárabes:
- Cristianos que vivieron bajo dominio musulmán en Al-Ándalus. Conservaron su religión cristiana, aunque adoptaron numerosos elementos culturales y lingüísticos del entorno islámico.
- Mudéjares:
- Musulmanes a quienes se les permitió permanecer en los territorios cristianos tras el avance de la Reconquista. Conservaron, bajo ciertas condiciones, su religión, lengua y costumbres.
9. Los Moriscos: Conversión y Expulsión
Los moriscos eran los descendientes de los musulmanes que fueron obligados a convertirse al cristianismo, principalmente tras la pragmática de 1502 en Castilla y posteriormente en Aragón, aunque el término se asocia a menudo con los conversos del Reino de Granada después de 1492. A pesar de la conversión oficial, muchos mantuvieron en secreto sus prácticas religiosas y costumbres islámicas (criptomusulmanes). Fueron objeto de marginación social y vigilancia constante por parte de la Inquisición. Su expulsión definitiva de España se decretó bajo el reinado de Felipe III y se llevó a cabo entre 1609 y 1614.
10. 1492: Un Año Decisivo
El año 1492 fue crucial en la historia de España por la confluencia de varios hechos trascendentales:
- 2 de enero: Conquista del Reino Nazarí de Granada, poniendo fin a la Reconquista.
- 31 de marzo: Promulgación del Edicto de Granada, que decretaba la expulsión de los judíos que no se convirtieran al cristianismo.
- 12 de octubre: Llegada de Cristóbal Colón a América, marcando el inicio de la exploración y colonización europea del continente.
La España de los Austrias (Siglos XVI-XVII)
El Imperio Español bajo Carlos I y Felipe II
11. La Conquista de América: Inicio y Organización
Iniciada formalmente en 1492 con el primer viaje de Colón, la conquista y colonización de América se expandió rápidamente. El Tratado de Tordesillas (1494) estableció una línea de demarcación que dividía las zonas de exploración y conquista entre España y Portugal. Entre las conquistas más significativas destacan la del Imperio Azteca por Hernán Cortés (1519-1521) y la del Imperio Inca por Francisco Pizarro (1532-1533). España organizó administrativamente los vastos territorios americanos mediante la creación de virreinatos y procedió a su explotación económica, especialmente de los metales preciosos.
14. La Hegemonía Española en el Siglo XVI: Carlos I y Felipe II
Durante el siglo XVI, bajo los reinados de Carlos I (V del Sacro Imperio Romano Germánico) y Felipe II, España alcanzó su máxima expansión y poder, consolidándose como la potencia hegemónica en Europa. El Imperio Español abarcaba extensos territorios en Europa, América, Asia y África. La defensa del catolicismo fue un eje central de su política exterior, lo que llevó a enfrentamientos constantes con los príncipes protestantes alemanes, el Imperio Otomano, y potencias rivales como Francia e Inglaterra.
15. La Vasta Herencia Territorial de Carlos I
Carlos I heredó un conjunto de territorios sin precedentes:
- De su madre, Juana I (hija de los Reyes Católicos): la Corona de Castilla (incluyendo Navarra y los territorios americanos) y la Corona de Aragón (con sus posesiones italianas: Nápoles, Sicilia y Cerdeña).
- De su abuelo paterno, Maximiliano I de Habsburgo: los territorios patrimoniales de la Casa de Austria y el derecho a ser elegido Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico.
- De su abuela paterna, María de Borgoña: los Países Bajos, Luxemburgo y el Franco Condado (la herencia borgoñona).
En 1556, Carlos I abdicó, dividiendo su vasta herencia: su hijo, Felipe II, recibió las Coronas de España (con sus posesiones en América, Italia y los Países Bajos), mientras que su hermano, Fernando I, heredó los territorios austriacos y el título de Emperador.
16. Política Exterior de Carlos I: Unidad Cristiana y Conflictos Europeos
La política exterior de Carlos I estuvo marcada por la idea de la Universitas Christiana, buscando mantener la unidad religiosa de Europa frente al desafío de la Reforma Protestante iniciada por Martín Lutero. Esto le llevó a constantes guerras de religión en Alemania. Además, mantuvo una intensa rivalidad con Francia por la hegemonía en Europa, especialmente por el control del Milanesado en Italia. Otro frente importante fue la contención del avance del Imperio Otomano en el Mediterráneo y los Balcanes. El enorme coste económico y militar de estos conflictos le llevó a abdicar en 1556, agotado.
17. Política Exterior de Felipe II: Consolidación Imperial y Defensa del Catolicismo
Felipe II continuó la política de su padre, centrándose en la consolidación del Imperio Español y la defensa a ultranza del catolicismo. Logró importantes victorias militares, como la derrota de Francia en la Batalla de San Quintín (1557), que aseguró la hegemonía española. Luchó contra la rebelión protestante en Flandes (Guerra de los Ochenta Años) y contra Inglaterra, sufriendo el desastre de la Armada Invencible (1588). Obtuvo una resonante victoria contra el Imperio Otomano en la Batalla de Lepanto (1571), frenando su expansión en el Mediterráneo. En 1580, consiguió la unión dinástica con Portugal (Unión Ibérica), anexionando su vasto imperio colonial. Sin embargo, su intensa actividad bélica generó un enorme endeudamiento de la Hacienda Real y múltiples frentes de conflicto.
Conflictos y Política Interior (Siglo XVI)
18. Conflictos Internos durante el Siglo XVI
El siglo XVI también estuvo marcado por importantes conflictos internos en los reinos hispánicos:
- Rebelión de las Comunidades de Castilla (1520-1521): Levantamiento de las ciudades castellanas contra la política imperial de Carlos I, percibida como ajena a los intereses del reino, y contra la presencia de consejeros flamencos en la corte.
- Revuelta de las Germanías (1519-1523): Conflicto de carácter social y gremial que estalló en el Reino de Valencia y se extendió a Mallorca, enfrentando a artesanos y pequeña burguesía contra la nobleza local.
- Rebelión de las Alpujarras (1568-1571): Sublevación de la población morisca del Reino de Granada contra las medidas de Felipe II que buscaban erradicar sus costumbres, lengua y cultura, consideradas una amenaza religiosa y política.
La Crisis del Siglo XVII y los Austrias Menores
12. Continuidad de la Política Religiosa bajo los Austrias
Los monarcas de la Casa de Austria (Felipe III, Felipe IV y Carlos II) mantuvieron la política de unidad religiosa heredada de los Reyes Católicos. Se intensificó la presión sobre la población morisca para lograr su asimilación cultural y religiosa completa. Ante el fracaso de estas políticas y la persistente desconfianza hacia este grupo, Felipe III decretó su expulsión definitiva entre 1609 y 1614. En el ámbito europeo, los Austrias continuaron liderando la Contrarreforma y combatieron activamente la expansión del protestantismo para mantener la hegemonía católica en el continente.
13. El Gobierno de los Validos durante los Austrias Menores
Una característica del gobierno durante los reinados de los llamados Austrias Menores (Felipe III, Felipe IV y Carlos II) fue la figura del valido o privado. Eran personas de la máxima confianza personal del rey, quienes ejercían el poder efectivo en su nombre. Entre los validos más destacados se encuentran el Duque de Lerma durante el reinado de Felipe III, y el Conde-Duque de Olivares bajo Felipe IV. Aunque algunos intentaron implementar reformas, su gobierno a menudo se asoció con la acumulación de poder personal, la corrupción y contribuyó al desprestigio de la monarquía.
19. Crisis y Decadencia en el Siglo XVII: Los Austrias Menores
El siglo XVII marcó un periodo de profunda crisis demográfica, económica y política para la Monarquía Hispánica, coincidiendo con los reinados de los Austrias Menores. España perdió progresivamente su hegemonía en Europa. Algunos hitos clave de esta decadencia fueron:
- Crisis de 1640: Estallido simultáneo de la revuelta en Cataluña (Guerra de los Segadores) y la rebelión en Portugal, que condujo a su separación definitiva de la Corona Española.
- 1648 (Paz de Westfalia): Reconocimiento oficial de la independencia de las Provincias Unidas (actuales Países Bajos), poniendo fin a la Guerra de los Ochenta Años.
- 1659 (Paz de los Pirineos): Tratado firmado con Francia tras una larga guerra, que consagró la pérdida de territorios (Rosellón, Cerdaña, Artois) y marcó simbólicamente el fin de la hegemonía española en Europa y el ascenso de Francia como nueva potencia dominante.