1.1 El expansionismo nazi y fascista
Con la llegada de Hitler al poder en Alemania en 1933 pronto se manifestó la fragilidad de la Sociedad de Naciones como garante de la paz. Hitler fue conculcando las limitaciones impuestas por el Tratado de Versalles. En 1935 Hitler se anexiono el Sarre, que estaba bajo control francés, tras la celebración de un plebiscito en el que la población se manifestó partidaria de su incorporación a Alemania. En la Conferencia de Stressa, Francia firmó un acuerdo con Italia y Reino Unido para asegurar la independencia de Austria y contra la política armamentista de Hitler. Pero entre 1935 y 1936 Italia invadíó y conquistó Etiopía. La sociedad de Naciones condenó esta acción y decidíó adoptar sanciones económicas contra Italia.
3.1 La explotación económica de los países conquistados
La estrategia alemana de la guerra relámpago presupónía una guerra corta, y su prolongación creó problemas. Los países conquistados tuvieron que pagar los gastos militares de la ocupación y además fueron saqueados: requisa de materias primas, de productos industriales y alimenticios. El régimen de ocupación fue especialmente duro en Europa oriental, donde se establecieron miles de campos de trabajos, en los que la SS y los grandes conglomerados industriales alemanes explotaron sin límites a una mano de obra esclava.
3.2 Colaboracionismo y resistencia
El nuevo orden hitleriano instaurado en los países ocupados encontró respaldo en una minoría. Eran los colaboracionistas, personas u organizaciones que no solo aceptaron la ocupación, sino que colaboraron activamente con el ocupante. Junto al colaboracionismo, aparecíó la resistencia en los países sometidos al terror nazi. Surgíó como un movimiento patriótico de rechazo a la ocupación alemana. Yugoslavia fue el país donde la resistencia tuvo mayor amplitud. Italia tuvo un importante desarrollo de la resistencia en la zona de la República de Saló, donde hubo episodios tanto de guerra contra el invasor nazi como de Guerra Civil contra los fascistas. En Francia y otros países de la Europa occidental los movimientos de resistencia fueron alentados por los británicos, y sus acciones se intensificaron desde 1941.
3.3 Germanización y genocidio
Los aspectos más brutales de la ocupación alemana derivaron de las dos bases del proyecto de Hitler: la purificación de la raza alemana y la expansión de sus fronteras en busca del espacio vital en el este. En Europa oriental se desarrollo el programa de desplazamiento de los pueblos eslavos, considerados subhumanos y carentes de derechos, para dejar espacio a las poblaciones alemanas. Tras la Conferencia de Wannsee de Enero de 1942 empezó el exterminio masivo y planificado de los judíos en las cámaras de gas y su desaparición en los hornos crematorios de los principales campos de exterminio.
4.1 Pérdidas humanas
La potencia destructiva de las nuevas armas, el carácter de guerra total y la determinación de ambos bandos de proseguir el conflicto hasta el final sin importar la pérdida de vidas humanas explican que la Segunda Guerra Mundial sea la mayor catástrofe que ha conocido la humanidad hasta hoy. El conflicto se extendíó a todo el mundo y desaparecíó el concepto de retaguardia. La URSS fue el país más afectado, seguido por Alemania y Polonia. En el sudeste asíático la guerra y la represión provocaron también enormes perdidas sobre todo en China. La guerra causó también grandes desplazamientos de población. Unos movimientos fueron provocados por los nazis en los países que ocuparon durante el conflicto.
4.2 Efectos morales
La guerra provocó un intenso trauma moral y cuestiónó todos los valores éticos en los que descansaba la civilización occidental. El descubrimiento de las fosas de Katyn en Polonia, donde los soviéticos asesinaron a más de 4500 oficiales polacos.
4.3 Consecuencias económicas
El final de la guerra ofrecía un paisaje de ruina y desolación sobre todo en Europa oriental, donde las ciudades, los campos y la estructura productiva habían sido destruidos. La URSS, a pesar de las destrucciones de la guerra, se confirmó como la segunda potencia mundial. Su política de industrialización de las regiones orientales- más allá de los Urales- evitó que los ataques alemanes destruyeran su potencial industrial.
4.4 Consecuencias políticas
-En Europa occidental, liberada por los angloamericanos, se restablecíó la democracia parlamentaria y el sistema económico capitalista de libre mercado.
-En Europa oriental, liberada por la Uníón Soviética, se impusieron a la fuerza las llamadas democracias populares.