La Guerra de Independencia Cubana y la Intervención Norteamericana
El Grito de Baire y la Renuncia de Martínez Campos
En 1895, el Grito de Baire reinició la sublevación cubana. El general Martínez Campos, enviado para sofocarla, comprendió rápidamente que no se trataba de bandolerismo, sino de una revolución a gran escala con apoyo campesino. Reconoció que la represión militar no bastaba y renunció, sugiriendo el nombramiento de un general de línea dura.