El crecimiento de tierras:
el aumento de la demanda de alimento y de los precios agrícolas en el Siglo XVIII estimuló a la hora de propietarios aumenta la producción para obtener mayor beneficio. Cercaron las parcelas de su campo abierto apropiándose de la tierra comunales y expulsando de ella a muchos campesinos los propietarios pudieron cultivar la tierra cercana según su convivencia y aplicar nuevos sistemas para mejorar la productividad.