Cambios en la Propiedad de la Tierra durante la Revolución Liberal en España
Los cambios introducidos por la **Revolución Liberal** en las estructuras de la propiedad de la tierra en España se enmarcan dentro del nuevo marco institucional que defendía los principios del liberalismo, incluyendo la **propiedad privada**, la **liberalización económica** y la **igualdad ante la ley**. Para implementar estos cambios, era necesario desmantelar las estructuras agrarias del Antiguo Régimen.
Abolición del Régimen Señorial (1837)
La abolición del **régimen señorial** en 1837 respondió a motivaciones tanto económicas como políticas. Los señores feudales eran una fuente de rentas y ejercían poder político sobre sus vasallos. Se buscó diferenciar entre **señoríos territoriales** y **jurisdiccionales**. Los señoríos jurisdiccionales fueron abolidos, mientras que los territoriales se transformaron en propiedad privada. Esto resultó en una pérdida de ingresos y poder político para los señores, pero no implicó una redistribución de la tierra.
Desamortizaciones: Mendizábal (1836) y Madoz (1855)
Se llevaron a cabo dos importantes **desamortizaciones**: la primera en 1836 (Mendizábal), que afectó a los bienes del clero regular, y la segunda en 1855 (Madoz), que afectó a bienes eclesiásticos, municipales y comunales. El proceso consistía en la nacionalización de los bienes y su posterior subasta y adjudicación. Los motivos detrás de estas desamortizaciones fueron ideológicos (eliminar la propiedad no individual), hacendísticos (sanear las arcas públicas) y políticos (obtener apoyo social de los beneficiarios). Los resultados fueron positivos en términos de reducción del déficit y ampliación de la base social del régimen, aunque los campesinos no pudieron acceder a la compra de tierras y perdieron el acceso a los usos comunales.
Otras Actuaciones Relevantes
Además de las desamortizaciones, se implementaron otras medidas importantes:
- Desvinculación (1841): Permitió a los nobles vender bienes que antes eran inalienables.
- Suspensión del Diezmo (1837): Eliminó esta carga fiscal onerosa, aunque la Iglesia perdió una fuente de ingresos compensada parcialmente por la contribución de «culto y clero».
- Supresión de la Mesta (1836): Eliminó los privilegios de esta institución en el pastoreo, permitiendo a los agricultores cultivar la tierra y cerrar los campos.
- Despatrimonialización del Agua: El agua, que era patrimonio del Rey cedido a señores, monasterios y ciudades, fue objeto de despatrimonialización.
Balance de las Actuaciones
En general, estas actuaciones lograron sentar las bases de una **economía de mercado**. Sin embargo, consolidaron las grandes desigualdades y el régimen parlamentario fue enormemente restrictivo. No se logró un crecimiento económico que permitiera a España converger con los países europeos más avanzados.
Evolución de la Economía Española desde la I Guerra Mundial hasta la Segunda República
[Este apartado no contiene información, se mantiene el título para mantener la estructura original]
Impacto de la Crisis de 1973 en la Economía Española
La **crisis del petróleo de 1973** fue causada por el aumento de los precios del petróleo. En España, este evento coincidió con el fin de la dictadura y el inicio de la democracia, lo que agravó la situación. La dependencia energética de España contribuyó a una falta de reacción inicial.
Perspectivas de Análisis
Se pueden analizar los efectos de la crisis desde dos perspectivas:
- Efectos de la Recesión Mundial: La crisis afectó a todo el mundo, provocando el retorno de emigrantes y la disminución del turismo, la inversión y las exportaciones en España.
- Efectos de la Inestabilidad Política: Las incertidumbres económicas se sumaron al retraso en la toma de decisiones y a las demandas de mejoras en las condiciones laborales.
Impacto Industrial
La crisis golpeó al sector industrial por partida doble: la demanda disminuyó, la competencia exterior se intensificó y los costes laborales y energéticos aumentaron significativamente. La situación del INI (Instituto Nacional de Industria) no era óptima, el sector privado perdió rentabilidad y algunas empresas tuvieron que cerrar.
Aumento de la Inflación y el Paro
El aumento de la **inflación** y el **paro** agudizaron los problemas. Para financiar el déficit, se implementó una política monetaria expansiva, lo que contribuyó a la inflación. Los costes laborales también se vieron afectados negativamente, y la deficiente regulación de algunos servicios empeoró la situación.
Conclusiones
El impacto de la crisis de 1973 en la economía española fue negativo. La coincidencia de la crisis económica con una crisis institucional (cambio de régimen) y las consecuencias asociadas (aumento del paro, caída de la demanda, inversión y exportación) fueron especialmente perjudiciales.