La Revolución Industrial en la Europa del Siglo XVIII
En la segunda mitad del siglo XVIII, se inició en Gran Bretaña la Revolución Industrial, que transformó las relaciones económicas y sociales de Europa Occidental.
Fase Económica
La Revolución Industrial se desarrolló en dos fases:
- Primera Fase (1760): Comenzó en Gran Bretaña con cambios en la producción. Se introdujeron nuevas fuentes de energía, maquinaria y la concentración de trabajadores en fábricas. El desarrollo del transporte mejoró la distribución de materias primas y productos manufacturados. Más tarde, en las primeras décadas del siglo XIX, se extendió a países como Alemania, Francia y Bélgica.
- Segunda Fase (1870): Se expandió a otros países europeos, Estados Unidos y Japón. Se implementaron nuevas formas de financiación empresarial, se desarrollaron inventos y se aplicaron fuentes de energía modernas, como la electricidad.
Fase Social
La Revolución Industrial tuvo importantes repercusiones sociales:
- Transición de una sociedad estamental (sociedad cerrada a la que uno pertenece desde nacimiento, dividida en privilegiados y no privilegiados) a una sociedad de clases (dividida en grupos según su riqueza, destacando la burguesía, generalmente empresarios, y el proletariado, trabajadores de fábricas que cobraban un salario).
La Primera Revolución Industrial
Iniciada en Gran Bretaña hacia 1760, la Primera Revolución Industrial consistió en un conjunto de cambios profundos que transformaron una economía agrícola y comercial en una economía industrializada. La aplicación de nuevas máquinas en la industria permitió producir más en menos tiempo y reducir costes. Posteriormente, se extendió a otros países europeos como Alemania, Bélgica y Francia.
Causas o Factores
- Revolución Agrícola: El aumento de la productividad agrícola se debió al uso de nuevas técnicas de producción (fertilizantes), nuevo instrumental agrícola (sembradora) y la concentración de propiedades para una explotación racional y rentable. Se mejoró la calidad del ganado y aumentó su número y tamaño. La Revolución Agrícola proporcionó alimentos para la población y materias primas para la industria.
- Crecimiento de la Población: A partir de 1740, la población creció debido a la disminución de la mortalidad, gracias a mejoras en la alimentación e higiene. Esto generó una mayor demanda de productos y mano de obra numerosa y barata para la industria.
- Expansión Comercial y de los Transportes: El comercio exterior británico se benefició de los intercambios con las colonias y el crecimiento de ciudades como Londres, Liverpool, Manchester y Glasgow. El comercio interior mejoró con los nuevos medios de transporte, especialmente canales y carreteras. El desarrollo del comercio generó un excedente económico que financió la expansión industrial.
Primeras Industrias y la Revolución del Vapor
La Revolución Industrial comenzó en la industria textil, seguida por la siderúrgica, gracias a la máquina de vapor.
- Industria Textil: La invención constante de nuevas técnicas permitió la mecanización del hilado y el tejido. La nueva organización del trabajo transformó la manufactura en industria, caracterizada por la concentración de trabajadores y máquinas en fábricas pertenecientes a un empresario (capitalista).
- Industria Siderúrgica: Se transformó con el uso del carbón mineral, que sustituyó al carbón vegetal, y la implementación de altos hornos. Proporcionó máquinas y herramientas para la agricultura, la industria y los transportes.
- Máquina de Vapor: Ideada por James Watt, este invento clave de la Revolución Industrial se utilizó inicialmente en la industria textil, la minería y la siderurgia. Posteriormente, se aplicó en barcos de vapor y, sobre todo, en el ferrocarril. El ferrocarril revolucionó el transporte, permitiendo comunicaciones regulares y rápidas, conectando zonas alejadas e impulsando el comercio y la industria siderúrgica.