España en el Siglo XIX: Construcción del Régimen Liberal
1. La Crisis del Antiguo Régimen (1808-1814)
A principios del siglo XIX, la guerra contra la invasión francesa originó una profunda crisis del Antiguo Régimen en España. Esta crisis desmoronó las instituciones de la monarquía absoluta borbónica y abrió paso a las ideas liberales.
1.1. La Crisis de la Monarquía Borbónica
Carlos IV, temeroso de la expansión de las ideas liberales, declaró la guerra a Francia (1793-1795). La guerra fue un fracaso. Manuel Godoy, ministro de Carlos IV, se alió con Napoleón para enfrentarse a Gran Bretaña y autorizó al ejército francés a atravesar España para atacar Portugal (Tratado de Fontainebleau, 1807). El descontento popular con las decisiones de Godoy provocó el Motín de Aranjuez (1808), forzando la dimisión del ministro y la abdicación del rey en su hijo Fernando VII. Ante esta situación, Napoleón convocó a Carlos IV y Fernando VII a Bayona (Francia), donde les obligó a abdicar y aceptó el nombramiento de su hermano, José Bonaparte, como nuevo rey de España.
1.2. La Guerra de la Independencia (1808-1814)
Las abdicaciones de Bayona provocaron la rebelión popular. El 2 de mayo de 1808, el pueblo de Madrid se levantó contra las tropas francesas, lo que inspiró un movimiento de resistencia en otros lugares. Grupos de patriotas se organizaron en guerrillas para hostigar a los franceses. La resistencia de las ciudades y la ayuda británica fueron decisivas para que, a finales de 1813, los franceses abandonaran España. El Tratado de Valençay, firmado ese mismo año, restituyó a Fernando VII en la Corona y Napoleón retiró sus tropas.
1.3. Las Cortes de Cádiz
Las abdicaciones de Bayona dejaron un vacío de poder. En 1810, la Junta Central convocó las Cortes en Cádiz, con representantes de todos los territorios. La mayoría defendió las ideas liberales. Su primera decisión fue revolucionaria: todos los representantes, independientemente de su origen, se reunían en una única Asamblea con igual poder de voto. Esta cámara, representando a la nación española, redactó la Constitución de 1812, que reflejaba los principios del liberalismo político: soberanía nacional, división de poderes, sufragio universal masculino y una amplia declaración de derechos. Las Cortes también abolieron el Antiguo Régimen: supresión de los señoríos, abolición de los gremios, supresión de la Inquisición e igualdad legal y fiscal.
2. El Enfrentamiento entre Absolutismo y Liberalismo
2.1. La Restauración del Absolutismo
Fernando VII regresó a España en 1814. Los liberales querían que jurara la Constitución de 1812, pero los absolutistas presionaron para restaurar el absolutismo. El rey, impulsó un golpe de Estado, clausuró las Cortes, anuló la Constitución y restauró el Antiguo Régimen. Muchos liberales fueron detenidos, exiliados o pasaron a la clandestinidad. Los opositores al absolutismo organizaron pronunciamientos, la mayoría reprimidos.
2.2. El Trienio Liberal
En 1820, el pronunciamiento del coronel Riego triunfó, inaugurando el Trienio Liberal (1820-1823). Fernando VII acató la Constitución de 1812, decretó una amnistía y convocó elecciones. Las nuevas Cortes, de mayoría liberal, restauraron las reformas de Cádiz y crearon la Milicia Nacional. Fernando VII pidió ayuda a las potencias europeas. La Santa Alianza encargó a Francia la intervención. En 1823, los Cien Mil Hijos de San Luis entraron en España, derrotaron a los liberales y repusieron a Fernando VII como monarca absoluto.
2.3. La Quiebra del Absolutismo
El gobierno de Fernando VII no pudo resolver los graves problemas del país: la difícil situación económica, la necesidad de una reforma fiscal y un conflicto dinástico. Fernando VII, para asegurar el trono a su hija Isabel, dictó la Pragmática Sanción, que derogaba la Ley Sálica. Muchos absolutistas defendieron los derechos del príncipe Carlos, hermano del rey.
3. Independencia de las Colonias Americanas (1808-1826)
3.1. Las Causas de la Independencia
Varios factores contribuyeron a la independencia de las colonias americanas: la difusión de las ideas ilustradas, el éxito de la revuelta de las colonias británicas de América del Norte y el descontento de la burguesía criolla.
3.2. El Fin del Imperio Americano
La Guerra de la Independencia en España propició la formación de Juntas en las colonias. Simón Bolívar en Venezuela y el general San Martín en el sur lideraron la independencia. México y Centroamérica lograron su independencia en 1821. Tras la derrota de Ayacucho (1824), España perdió casi todas sus colonias.
3.3. Los Problemas de las Nuevas Repúblicas
Las nuevas repúblicas americanas enfrentaron graves problemas: la fragmentación en múltiples repúblicas, el poder de los jefes militares, la desigualdad social y económica, y el olvido de las necesidades de la población indígena, negra y de las clases populares.
4. La Revolución Liberal (1833-1843)
4.1. La Guerra Carlista
A la muerte de Fernando VII, los absolutistas apoyaron a Don Carlos, hermano del rey, mientras que María Cristina, regente de Isabel II, buscó el apoyo de los liberales. La guerra carlista (1833-1840) fue un enfrentamiento entre absolutistas (carlistas) y liberales (isabelinos). El Convenio de Vergara (1840) puso fin a la guerra.
4.2. Las Reformas Progresistas
Para obtener el apoyo liberal, María Cristina impulsó un gobierno liberal. Los progresistas, liderados por Mendizábal, implementaron reformas: disolución del régimen señorial, desamortización de las propiedades del clero, supresión de aduanas interiores y gremios. La Constitución de 1837 inauguró la monarquía parlamentaria.
4.3. La Regencia de Espartero
En 1840, María Cristina dimitió y Espartero fue nombrado regente. Su autoritarismo provocó oposición y dimitió en 1843. Isabel II fue proclamada reina.
5. La Etapa Isabelina: El Liberalismo Moderado (1843-1868)
5.1. La Década Moderada (1843-1854)
El Partido Liberal Moderado impuso el sufragio censitario, una gran intervención de la Corona, limitación de libertades y un Estado centralista. Se promulgó la Constitución de 1845 y se firmó un Concordato con la Santa Sede (1851).
5.2. Del Bienio Progresista a la Crisis del Sistema Isabelino
La última etapa del reinado de Isabel II (1856-1868) se caracterizó por la alternancia entre moderados y la Unión Liberal, una política colonialista y un gobierno autoritario. Surgieron nuevos grupos políticos: demócratas y republicanos.
6. El Sexenio Democrático (1868-1874)
6.1. La Revolución de 1868
La crisis económica y el desgaste del régimen isabelino desencadenaron la revolución de 1868. Prim y Serrano lideraron el movimiento. Se formó un gobierno provisional que impulsó reformas y se aprobó la Constitución de 1869.
6.2. La Monarquía Democrática (1870-1873)
Amadeo de Saboya fue elegido rey, pero enfrentó la oposición de moderados, carlistas y la Iglesia. Tuvo que lidiar con la insurrección cubana (1868) y una nueva guerra carlista (1872). Amadeo abdicó en 1873.
6.3. La Primera República (1873-1874)
Tras la abdicación de Amadeo, se proclamó la República (1873). Enfrentó problemas como las guerras carlista y cubana, divisiones internas y revueltas. Un golpe de Estado en 1874 disolvió las Cortes.
7. La Restauración Monárquica (1874-1898)
7.1. El Sistema Canovista
Alfonso XII fue proclamado rey en 1874. Antonio Cánovas del Castillo configuró un sistema conservador con dos partidos: el Conservador y el Liberal. Se redactó la Constitución de 1876.
7.2. Los Nacionalismos
El Estado centralista provocó la emergencia de movimientos nacionalistas en Cataluña, País Vasco y Galicia.
7.3. La Crisis del 98
En 1895 estalló una nueva insurrección en Cuba. Estados Unidos apoyó a los insurrectos y declaró la guerra a España en 1898. España perdió Cuba, Puerto Rico y Filipinas.