Desarrollo de la Manufactura Rural en el Siglo XVIII
En el siglo XVIII, en algunas regiones europeas, era frecuente que las familias campesinas simultanearan el trabajo agrícola con la elaboración de productos textiles. Los tejedores e hiladores hacían uso de sus sencillos instrumentos de trabajo (ruecas, telares manuales) y hasta tres cuartas partes de las familias campesinas se ocupaban de esta producción manufacturera que proporcionaba unos ingresos complementarios.
En esta primera fase, se trataba de un proceso autónomo que se centraba en las épocas de siembra y recolección, cuando aumentaba el trabajo en el campo. Los campesinos dedicados a estas actividades artesanas eran dueños de sus propios instrumentos y ellos mismos llevaban parte de sus manufacturas a los mercados más próximos, donde las intercambiaban a un precio acordado con los comerciantes. Este sistema es conocido como Domestic System.
En una segunda fase, el comerciante (capital comercial) terminó controlando este proceso productivo tan disperso: suministraba materias primas (algodón), distribuía por los domicilios los instrumentos para hilar y tejer, y fijaba los precios. Este otro sistema es conocido como Putting Out System.
Este cambio surgió como respuesta a la baja elasticidad de la oferta de la producción urbana, estrangulada por el rígido control gremial y los altos costes de producción, que fue incapaz de hacer frente a la creciente demanda de los mercados coloniales en expansión. El Putting Out System permitía:
- Aumentar la producción a costes decrecientes.
- Establecer la supremacía de la producción sobre el consumo, es decir, la producción. La oferta genera e impulsa el consumo y no al revés, lo que hará necesario iniciar la revolución técnica que permita aumentar la producción para pasar al Factory System.
Hacia las últimas décadas del siglo XVIII, esta actividad era cada vez más rentable y se fue extendiendo por muchas zonas. Los problemas de suministrar materias primas y controlar la producción de las familias campesinas en territorios dispersos se resolvieron con la concentración de capital de los comerciantes o de las empresas comerciales, reuniendo en un mismo local a los trabajadores, las máquinas y las herramientas.
La Revolución Agraria
Se provocó la necesaria transformación de la sociedad feudal-agraria que debía provocar:
- Cuando empezó la gran industria, ya se practicaba: una elevada productividad, mecanización y unos propietarios que se planteaban esa actividad como empresarios. Esta revolución agrícola se puso de manifiesto en las transformaciones técnicas y en las reformas de la estructura y la distribución de la propiedad.
- La redistribución de la fuerza de trabajo del campo pasó a la ciudad. Con el cambio de régimen de la propiedad de la tierra, provocaron el fin de las explotaciones extensivas (openfields) de la iglesia, la nobleza o propiedades comunales (pastos) por medio de las Leyes de Cercamiento (Enclosure Acts, 1760-1820), que permitían su venta libre en el mercado.
En 1780, el 90% de la tierra ya estaba cercada en manos de latifundios de empresarios capitalistas. Este proceso impulsó:
- La concentración de la propiedad libre individual capitalista, es decir, la tierra forma parte de la empresa.
- El cultivo intensivo sufrió un progreso técnico: se seleccionaron semillas para ampliar las superficies cultivadas, aparecieron nuevos cultivos, el barbecho fue sustituido por la rotación de cultivos, la estabulación del ganado, abonos orgánicos y la mecanización (sembradoras o trilladoras).
- El incremento espectacular de la productividad, que permitió exportar cereales, junto con otros productos agrarios y ganaderos, a mercados especializados. Entre los años 1600 y 1800 llegó a aumentar un 100% en Reino Unido, pero en Francia sólo un 20%.
Todo esto supone el paso de una agricultura de subsistencia a otra de mercado, que trae consigo:
- El abaratamiento de los precios para un mayor consumo.
- Un importante crecimiento de la renta per cápita agraria para una mayor capacidad de consumo.
- Una excelente mano de obra (éxodo rural) que da lugar al proceso de urbanización.
Datos Comparativos entre Reino Unido y Francia
Población Urbana
- 1600: Reino Unido aumentó un 8%, mientras que Francia un 9%.
- 1800: Reino Unido aumentó un 28% y Francia un 11%.
Población Agraria
- Reino Unido en 1700: 70%.
- Reino Unido en 1800: 37%.
En resumen, la Revolución Agraria aportará cuatro elementos básicos para el despegue de la Revolución Industrial:
- Alimentos: para abastecer a ciudades en crecimiento.
- Mercados: para aquellos consumidores con alto poder adquisitivo.
- Capitales: dispuestos a ser reinvertidos en otros sectores económicos.
- Mano de obra: abundante y barata que inunda las periferias de las ciudades.