Transformaciones Sociales
Hasta 1957 España sufrió los rigores de la posguerra, de la autarquía y del aislamiento internacional. Durante los años 60 la situación cambió tras el Plan de Estabilización y España comenzó el llamado desarrollismo, que trajo una nueva situación económica y un cambio en la sociedad, aunque siempre desde el control gubernamental.
Crisis del Franquismo
A partir de 1973, la crisis era evidente en lo que se conoce como la “agonía del Franquismo”. Con el fin del aislamiento internacional la población española creció, pasando a 34 millones de habitantes. La política natalista y religiosa, las mejoras en la higiene, la sanidad y los nuevos salarios dieron como resultado el baby boom, que, unido al descenso de la mortalidad, provocaron el aumento de la esperanza de vida.
Transformaciones en el Ámbito Laboral
Este hecho aumentó la clase media, puesto que a los profesionales liberales se unían ahora los comerciantes, los grupos ligados al turismo, los empresarios y los funcionarios. A pesar de esta modernización, la mujer tardó en incorporarse al mundo laboral debido a la presión del régimen que determina otras ocupaciones para ella.
Transformaciones Económicas
La Autarquía (1939-1959)
Para superar la situación económica, el régimen optó por un modelo de autarquía económica y de intervención del Estado en todos los aspectos económicos. Se nacionalizaron los bienes estratégicos y de primera necesidad, se creó el Servicio Nacional de Trigo (1937). Se dio un fuerte proteccionismo, imponiendo fuertes aranceles para impedir la importación de productos y proteger la industria nacional.
El Desarrollismo (1959-1973)
En 1957 la situación económica y social de España estaba profundamente deteriorada. Franco se encontraba ante una disyuntiva; volver a la autarquía o abrirse definitivamente a los parámetros económicos europeos. Ante esta situación Franco aceptó entregar la dirección económica a los tecnócratas.