Transición Española a la Democracia: Etapas y Protagonistas

La Transición a la Democracia en España

Introducción

La Transición Española se refiere a la gran reforma desde la dictadura franquista al sistema democrático actual. Se trató de una reforma paulatina de las instituciones franquistas en un sentido democrático. No se llevó a cabo un cambio drástico, sino una reforma impulsada por el mismo Estado franquista. No hubo una gran depuración del franquismo, pero al principio existió un deseo de establecer un sistema democrático con libertades y derechos para todos.

Desarrollo

En este proceso, Don Juan Carlos de Borbón y la sociedad española fueron muy importantes. Don Juan Carlos de Borbón fue coronado el 22 de noviembre de 1975, dos días después de la muerte de Franco. Este fue nombrado personalmente por el dictador en 1969, considerándolo así la persona elegida para continuar con el régimen. Pero, en vez de eso, con un espíritu de monarquía democrática y sin enfrentamientos, consiguió una renovación democrática.

Tuvo que lidiar con un sector de la derecha más conservadora y retrógrada que quería a toda costa el mantenimiento del régimen, y con una izquierda más extremista que demandaba una ruptura radical con el régimen, el nombramiento de un Gobierno Provisional que convocase elecciones a Cortes Constituyentes por sufragio universal donde se decidiría la forma de Estado (monarquía o República), y que no estaban dispuestos a aceptar una monarquía impuesta por el dictador.

La sociedad española ansiaba un sistema semejante al de sus vecinos europeos donde quedasen garantizadas las libertades y derechos propios de un sistema democrático de Derecho, y dio una gran muestra de civismo y moderación.

Don Juan Carlos mantuvo en el gobierno a Carlos Arias Navarro, que había sido nombrado presidente por Franco tras el asesinato de Carrero Blanco, pero este se negó a emprender ninguna de las reformas propuestas por el Rey.

La oposición organizó la PLATAJUNTA, que representaba a todas las fuerzas que luchaban por la convocatoria de elecciones generales. Se iniciaron protestas, huelgas y manifestaciones, reclamando libertades democráticas y amnistía.

El gobierno y los empresarios tuvieron una respuesta represiva, y la huelga de Vitoria de marzo de 1976 se saldó con cinco muertos y decenas de heridos. Más tarde, Don Juan Carlos y sus colaboradores forzaron la dimisión de Arias Navarro, que dimitió el 1 de julio del mismo año.

En julio, Adolfo Suárez fue nombrado jefe de Gobierno y, junto a Torcuato Fernández Miranda, se encargó de dirigir la transición a la democracia. Para ello, tenía que anular la resistencia de los inmovilistas en las instituciones del Estado y atraer hacia su proyecto a una buena parte de la oposición.

Suárez inició contactos con las fuerzas democráticas y promulgó un indulto para los presos políticos. En noviembre del mismo año, consiguió aprobar la Ley para la Reforma Política, que consistía en la creación de unas Cortes bicamerales elegidas por sufragio universal. En diciembre, se celebró un referéndum donde el programa de reformas fue aprobado por la mayoría del pueblo español. En los siguientes meses, se prepararon unas elecciones generales, se decretó la libertad sindical, la legalización de los partidos políticos (excepto el comunista) y se amplió la amnistía por delitos políticos cometidos durante el franquismo.

La legalización del PCE se convirtió en la clave del proceso democrático. Los comunistas apostaron por la democracia y demostraron su fuerte presencia social con la multitudinaria manifestación que tuvo lugar a raíz de los asesinatos de los abogados laboralistas de CCOO en la calle de Atocha de Madrid por personas de la extrema derecha.

En abril de 1977, Suárez legalizó el PCE, tras acordar con Santiago Carrillo la aceptación de la Monarquía de Don Juan Carlos. Más tarde, en junio, se celebraron las Elecciones Generales por sufragio universal, con gran participación ciudadana, imponiéndose la tarea de elaborar una Constitución democrática. En esas elecciones, quien mayor éxito tuvo fue la UCD, seguido del PSOE, el PCE y AP. Por tanto, el pueblo español había optado por la moderación.

Así, este fue el primer gobierno democrático después de la Guerra Civil, presidido por Adolfo Suárez. Las principales cuestiones de este periodo fueron: la crisis económica que ya se llevaba arrastrando desde antes, con la crisis del petróleo, se llegó a una serie de acuerdos con la oposición conocidos como los Pactos de la Moncloa. En estos se acordaba una reforma fiscal y de la seguridad social, que dio lugar al seguro de desempleo, pensiones, sanidad, etc.

También hubo una moderación salarial y devaluación de la moneda, teniendo principalmente en cuenta el problema del paro.

En la proclamación de la Constitución de 1978, se adoptó como forma de Estado la Monarquía parlamentaria y democrática (aconfesional) y se estableció el Estado de las autonomías. Este Estado social y democrático de derecho debía garantizar la igualdad, la libertad y el pluralismo político.

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